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TRANSCRIPCIÓN

Vamos a abrir la palabra del Señor en el primer libro de crónicas capítulo veintinueve, el estudio de esta noche: Los últimos días del rey David.

La vida del rey David es una vida fascinante, de hecho vamos a estudiar más adelante; promesas que Dios le hizo a David y que no le hizo a ningún otro. Dios le prometió a David que su trono sería sempiterno; es decir eterno, para siempre.

Y algunos consideran de que el hecho de que le prometió un trono sempiterno a lo que se refería es; que del linaje de David saldría un rey, y de la tribu de judá pues viene nuestro Señor Jesucristo, por eso es que a Jesús se le decía el hijo de David, vamos a estudiar también eso más adelante. 

Pero hay otro versículo, por ejemplo hay un texto en las escrituras donde dice que Dios va a levantar a David, imagínese usted; Dios lo va a levantar y habrá un reinado de parte de David. 

Cuando uno echa un vistazo un poquito más profundo a la palabra, no quiero mencionar ninguna herejía ¿verdad? por supuesto verdad, pero da la impresión como que David fue el hijo, ¿me  entiende? que Dios no tuvo allá en el antiguo testamento por la relación; el hombre conforme a mi corazón. Pero claro, como David era pues hombre cien por ciento, cometió sus pecados ¿verdad? sus errores, a diferencia de nuestro bendito Señor Jesucristo, que fue sin mancha sin pecado habiendo sido tentado en todo, pero fue sin pecado. 

Y bueno es una vida fascinante en realidad la de este hombre y en esta noche me gustaría que estudiemos pues precisamente eso; los últimos días del rey David.

Dice la palabra del Señor en 1 Crónicas 29: 26-30 Así reinó David hijo de Isaí sobre todo Israel. El tiempo que reinó sobre Israel fue cuarenta años. Siete años reinó en Hebrón y treinta y tres reinó en Jerusalén. Y murió en buena vejez lleno de días, de riquezas y de gloria; y reinó en su lugar Salomón su hijo. Y los hechos del rey David, primeros y postreros, están escritos en el libro de las crónicas de Samuel vidente, en las cónicas del profeta Natán, y en las crónicas de Gad vidente, con todo lo relativo a su reinado, y su poder, y los tiempos que pasaron sobre él, y sobre todo Israel y sobre todos los reinos de aquellas tierras.

Oremos: Señor nos sentimos privilegiados de estudiar la vida de este hombre, un hombre extremadamente especial ungido por tí, con un propósito divino aquí en la tierra. Bendice el estudio de esta noche; nuestros corazones, ábrenos el entendimiento. Espíritu de Dios ayúdanos a comprender tus verdades y queremos tambien hacer tu santa voluntad Señor. En el nombre de Jesus, Amén.

El joven David, interesantemente nació en la misma ciudad que nació nuestro bendito Señor Jesucristo, en Belén. Era el más pequeño de ocho hermanos; hijo de Isaí de la tribu de Judá. Siendo joven fue un gran músico David; tocaba para el rey Saúl, imagínate a muy temprana edad ser llamado para ser parte de la música del rey. 

Además de músico era valiente, dice la palabra del Señor que había matado a leones y osos en defensa de las ovejas de su padre. Siendo joven también mató al gigante Goliat; quien había humillado al pueblo de Israel por cuarenta días. Con esa batalla también el joven David puso muy en alto el nombre de Jehová Dios de los ejércitos, cuando peleó contra Goliat. Con esa batalla también el joven David se ganó el corazón de todo el pueblo de Israel. Pero qué ironía, con esa misma batalla David se convirtió en el enemigo número uno del rey de Israel; el rey Saúl.

El joven David fue el centro de una nueva canción popular que decía: Saúl mató a sus miles y David a sus diez miles. El joven David se convirtió en el músico del rey, el escudero del rey, el yerno del rey, el mejor amigo del hijo del rey, y en el más grande enemigo del rey. David el hombre más mencionado en el antiguo testamento y el segundo más mencionado en toda la Biblia, el primero es el Señor Jesús. 

Escribió setenta y tres de los ciento cincuenta salmos que tenemos en la Biblia; y David escribió el salmo más popular de todos los tiempos que es el salmo veintitrés: Jehová es mi pastor, nada me faltará.

David también fue un hombre de guerra, fue un gran guerrero, a tal grado que en 1 Samuel 18: 13 Por lo cual Saúl lo alejó de sí, y le hizo jefe de mil; y salía y entraba delante del pueblo.

El principal enemigo de Israel fueron los filisteos, a tal grado que los filisteos se mencionan doscientas dieciocho veces y se cree que David tuvo diecinueve encuentros, diecinueve batallas en contra de los filisteos. 

En 1 Samuel 19: 8 Después hubo de nuevo guerra; y salió David y peleó contra los filisteos, y los hirió con gran estrago, y huyeron delante de él.

Mire usted hablando acerca de David como un gran guerrero, como un hombre de guerra.

1 Samuel 27: 8-9 Y subía David con sus hombres, y hacían incursiones contra los gesuritas, los garitas y los amalecitas; porque éstos habitaban de largo tiempo la tierra, desde como quien va a Shur hasta la tierra de Egipto. Y asolaba David el país y no dejaba con vida hombre ni mujer; y se llevaba las ovejas, las vacas, los asnos, los camellos y las ropas, y regresaba a Aquis.

Aquí tenemos una narrativa bien dura acerca del guerrero David, 1 Crónicas 18: 1 Después de estas cosas aconteció que David derrotó a los filisteos, y los humilló, y tomó a Gat y sus villas de mano de los filisteos.

También derrotó a Moab, y los moabitas fueron siervos de David, trayéndole presentes. Asimismo derrotó David a Hadad-ezer rey de Soba, en Hamat, yendo este a asegurar su dominio junto al río Eufrates.

Y le tomó David mil carros, siete mil de a caballo, y veinte mil hombres de a pie; y desjarretó David los caballos de todos los carros, excepto los de cien carros que dejó. 

Y viniendo los sirios de Damasco en ayuda de Hadad- ezer rey de Soba, David hirió de ellos veintidós mil hombres.

Y puso  David guarnición en Siria de Damasco, y los sirios fueron hechos siervos de David, trayéndole presentes; porque Jehová daba la victoria a David dondequiera que iba.

Tomó también David los escudos de oro que llevaban los siervos de Hadad-ezer, y los trajo a Jerusalén. 

Es decir, esta es una de las razones por las cuales cuando David quiso construir el templo, Dios le dijo: No no David, haz derramado demasiada sangre. Claro Jehová Dios le daba las batallas a David.

Ya lo hemos explicado antes; mucha gente toma estos versículos de la escritura diciendo: ¿por qué razón Dios elevó tanto a un hombre que fue tan sanguinario? estos eran los enemigos del pueblo de Israel, los enemigos del pueblo de Israel querían destruir por completo a las cien incursiones en contra de Israel, y no solamente eso, sino que también eran gente idolatra. 

Entonces tenemos primero como Dios escogió a David siendo joven, en segundo lugar como David llegó a ser un un hombre de guerra, en tercer lugar hermano; David tuvo unos hombres que fueron extremadamente leales a él y se les llamó: Los valientes de David a estos hombres. Eran hombres que amaron a David con todo el corazón.

Dice en 2 Samuel 23: 15 Y David dijo con vehemencia: ¡Quién me diera a beber del agua del pozo de Belén que está junto a la puerta! 

Fíjate leímos ese pasaje hace un momento hermano; los filisteos como repito; habían sido los enemigos del pueblo de Israel toda la vida y había un pozo en Belén, en donde David había nacido. 

¿Cuántos se acuerdan? Yo les comentaba que hace unos años que fué mi hijo David conmigo a mi país El Salvador, le digo: – Papa vamos ahí. Quiero llevarte para que conozcas el lugar donde yo nací. Y fuimos… -Que quiero que veas donde jugabamos fútbol con los chamaquitos aquí en la calle. Y bueno, y yo le decía; y aquí en este lugar vivía la señora que cuando topaba la pelota en la puerta de su casa; salía con un cuchillo y le metía el cuchillo a la pelota. Y yo diciéndole eso, cuando salió la señora usted. La misma señora gordita, le decíamos la chocha, es nicaragüense y la misma señora. Claro yo con mi pelito blanco, no me conocía la señora, hasta que le dije: -Yo soy David. – No me diga ¿dónde está la pelota? [jaja] 

Así es que, pues David en un momento de tanto, siendo rey se acordó: Ay dice; Allá en mi rancho había un pozo. Entonces se da cuenta que.. Usted sabe que hay ciertas aguas hermano, ¿sabe usted que si uno toma el agua también en un jarro verdad de barro sabe diferente,  entonces David se levantó y dijo sólo que cometió un error no lo pensó; lo habló, y dijo: Ay como he amanecido con ganas de tomar agua de ese pozo. Y lo oyeron sus valientes. 

Hermano pero el pozo estaba custodiado por los filisteos, entonces me imagino yo, que se hicieron señas el uno con el otro ¿verdad? y salieron y platicaron y dijeron; vamos traigamole agua al rey del pozo. Y se fueron hermanos y se metieron en medio de los filisteos, sacaron el agua y se la trajeron. Ese era el gran cariño, el gran amor que tenían por el rey David. Yo me pregunto si yo dijera un día de estos yo.. No, mejor ni digo nada.

Pero ellos lo hicieron y esa era tanta la lealtad que tenían estos hombres, ahora fíjate; le traen el agua y David no se la tomó, dijo: No, no esto que ustedes han hecho no era necesario, no de ningún modo. Pero la ofreció a Jehová ¿sabe por qué no la tomo? porque ustedes pusieron sus vidas en peligro por mí, ¿que hubiera hecho yo si los hubiera perdido a ustedes? simple y sencillamente porque el rey quería tomar agua del pozo. Esos eran los valientes de David.

En 1 Crónicas 11: 9 Y David iba adelantando y creciendo, y Jehová de los ejércitos estaba con él. 

Estos son los principales de los valientes que David tuvo, y los que le ayudaron en su reino, y los que le ayudaron en su reino, con todo Israel, para hacerle rey sobre Israel, conforme a la palabra de Jehová.

Por eso se le llama los valientes de David y le mando saludos a los valientes de David allá en El Salvador; este ministerio que arrancamos hace cuarenta largos años allá en mi rancho y que todavía sigue funcionando. Y que llegó pues, y todavía me dicen jefe algunos de ellos. Así es que, saludos desde acá.

Ahora el ejército, por supuesto que David también levantó un ejército. En 1 Samuel 22: 2 Y se juntaron con él todos los afligidos, y todo el que estaba endeudado y todos los que se hallaban en amargura de espíritu, y fue hecho jefe de ellos; y tuvo consigo como a cuatrocientos hombres.

Es que jefe siempre es jefe; jefe aunque sea de los amargados pero jefe, ¿verdad? aunque sea de los endeudados pero jefe.

Así comenzó el ejército; un ejército de afligidos. Bueno pero en 1 Samuel 30: 9

Partió, pues, David, él y los seiscientos hombres que con él estaban, y llegaron hasta el torrente de Besor, donde se quedaron algunos.

Se sumaron doscientos afligidos ya no eran cuatrocientos eran seiscientos, no importa que estaban afligidos, tenían fuerza.

Ahora se acuerda usted que uno de los pecados que cometió David; fue censar al pueblo. Y en primero de crónicas veintiuno cinco; David cometió este gran error que lo estudiamos la semana anterior, la última vez. Porque él quería confiar más en la cantidad de soldados que tenía y se le había olvidado que Dios no gana las batallas con ejército, sino con su Santo Espíritu. Y habían en todo Israel un millón cien mil que sacaban espada. Ese fue el ejército, David era un gran estratega militar, tremendo.

Un día, mire usted las palabras del ejército al rey David, hermano, esto es heavy. Ya David estaba viejo, estaba cansado. En 2 Samuel 18: 3 Más el pueblo dijo: No saldrás; porque si nosotros huyéremos; no harán caso de nosotros; [hablando de los enemigos] y aunque la mitad de nosotros muera, no harán caso de nosotros más tú [hablándole al rey David] ahora vales tanto como diez mil de nosotros. [my goodness] Será, pues, mejor que tú nos des ayuda desde la ciudad.

Y no  solamente eso, sino que en otra oportunidad le dijeron a David que él era la luz del pueblo de Israel.

Dice en 2 Samuel 21: 17 mas Abisai hijo de Sarvia llegó en su ayuda, e hirió al filisteo y lo mató. Entonces los hombres de David le juraron, diciendo: nunca más de aquí en adelante saldrás con nosotros a la batalla, no sea que apagues la lámpara de Israel. 

Imagínate cómo tenía el ejército tan en alto a este hombre, de lo que él significaba para una nación, de lo que él era para un pueblo; Tú vales como diez mil de nosotros, mira la mitad del ejército puede salir corriendo y no le va a importar a los enemigos, pero tú no puedes permitir que algo te pase.

También tuvo éxitos políticos, llevó el arca del pacto a Jerusalén, convirtió a Jerusalén en la capital de Israel en lo que se conoce como la ciudad de David. David ha sido considerado el mejor rey de Israel, una tremenda astucia diplomática, brillante, usó las más grandes estrategias militares, el papel de rey David como comandante en jefe militar y como organizador del estado; quedó como modelo para todas las generaciones posteriores, David le dio solidez a Israel delante de sus enemigos y le dió la dignidad al pueblo de Israel y era considerado precisamente como el ungido de Jehová.

Ahora David también; el hombre débil, imperfecto como todos nosotros. El pecado más sobresaliente de David fue el del adulterio con Betsabé, su asesinato de Urias heteo marido de Betsabé. En un tiempo de debilidad ¿se acuerdan ustedes? que se unió al ejército de los filisteos, en un tiempo de debilidad David en medio de los filisteos reaccionó y tuvo que hacerse el loco y dejarse la baba sobre su barba, ¿recuerdan ustedes eso?. En un momento de locura censó al pueblo de Israel, confiando más en el número de soldados que en la fuerza de Jehová. 

Ahora sí vamos a hablar de las pruebas del rey David, podríamos pasar largas horas hablando de las dificultades por las que atravesó David. Saúl lo quería matar; huyó por todos los desiertos y todas las cuevas de Israel. Su propio ejército un día lo quiso apedrear, sus propios hijos lo querían matar, se le muere el hijo que tuvo con Betsabé y entre las principales pruebas del rey David fue con su propia conciencia; después de pecar con Urías heteo y con Betsabé.

Aún en su lecho de muerte había rebelión de parte de sus hijos, dice la palabra en 1 Reyes 1: 1-4 Cuando el rey David era viejo y avanzado en días, le cubrían de ropas pero no se calentaba.

Le dijeron por tanto, sus siervos: Busquen para mi señor el rey una joven virgen, para que esté delante del rey y lo abrigue, y duerma a su lado, y entrara en calor mi señor el rey. 

Y buscaron una joven hermosa por toda la tierra de Israel y hallaron a Abisag Sunamita, y la trajeron al rey.

Y la joven era hermosa; y ella abrigaba al rey, y le servía; pero el rey nunca la conoció. [eso quiere decir; el rey nunca tuvo relaciones íntimas con ella]

1 Reyes 1: 5-7 Entonces Adonías hijo de Haguit se rebeló, diciendo: Yo reinaré. Y se hizo de carros y de gente de a caballo, y de cincuenta hombres que corriesen delante de él.

¡Va! claro, legalmente hablando le corresponde a Adonías ser el rey, porque él era el que seguía en la línea real; pero sin embargo Dios fue el que escogió a Salomón y Dios le dijo a David: ¿Sabes que? tu hijo Salomón va a reinar después de tí.

Y bueno entonces en el versículo cinco dice que Adonias hijo de Haguit se rebeló diciendo: Yo reinaré. Y no le importó que su papá se estuviera muriendo, es que mire hermano el deseo de poder, el ansia de tener, de hacer, es increíble.

Y se hizo de carros y de gente de a caballo, y de cincuenta hombres que corriesen delante de él.

Y su padre nunca le había entristecido en todos sus días con decirle: ¿por qué haces así? Además este era de muy hermoso parecer; y había nacido después de Absalon.

Y se había puesto de acuerdo con Joab hijo de Sarvia y con el sacerdote Abiatar, los cuales ayudaban a Adonías.

Toda conspiración en la historia, toda revuelta, toda persona que quieren bajar del trono a cualquier gente; siempre va a encontrar quien le ayude, que no le quepa la menor duda. Y esto pasó también con Adonías, el hijo de David encontró personas que le dijeron: Tú puedes, ¿sabes que? tú si eres bueno. A ti te vamos a seguir. Tu papá ya está viejo, no es posible que deje a Salomón, a tí te corresponde.

Le dieron garabato como decimos allá en mi rancho; se la creyó y ell hombre no le importó que su padre estuviera muriendo.

1 Samuel 1: 8 Pero el sacerdote Sadoc y Benaía hijo de Joiada, el profeta Natán, Simei, Rei y todos los grandes de David, no seguían a Adonías.

Es decir; aún en el lecho de muerte, David estaba batallando todavía, diciéndole: – Mira tú quieres que Salomón sea el que siga reinando, pero déjame decirte que se acaba de levantar Adonías, diciendo que él quiere ser el rey de Israel. 

Imagínate hermano quiere decir; que los problemas no se acaban nunca en la vida usted, no se acaban nunca. Vamos a pasar toda la eternidad tratando de resolver situaciones y en este caso claro, estas son las responsabilidades que vienen con el reinado, en este caso pues de nuestro querido amigo David que es el que estamos estudiando.

Ahora en primero de Reyes, capitulo dos; vamos a ver un par de cositas que se me hacen interesantes también, me gusta esto 1 Reyes 2: 1-4 Llegaron los días en que David había de morir, [Yo me puedo imaginar esta escena] y ordenó a Salomón su hijo, diciendo: Yo sigo el camino de todos en la tierra; esfuérzate y sé hombre.

Porque déjame decirte algo; hay cosas para las que Dios te llama que necesitas carácter hermano, y ser rey de Israel, haber llamado a David a esta posición se requería de todo esto; de ser esforzado y de tener carácter. Y ahora manda llamar a Salomón y le dice:- Hijo si tú quieres qué el reino continúe tan fuerte como este día; tienes que ser hombre, esfuérzate.

Ahora este carácter al que se refería David mi hermano; tenía que ver con determinación. Lastimosamente los últimos días de Salomón fueron tristes. En el versículo tres David le dice a su hijo algo que llevaba él en el corazón y que hace tan especial a David. Si Dios lo permite este próximo domingo o el que sigue no estoy seguro vamos a estudiar de ¿por qué David era el hombre conforme al corazón de Dios? como parte de esta serie.

1 Reyes 2: 3 Guarda los preceptos de Jehová tu Dios, [de qué manera papá] andando en sus caminos, y observando sus estatutos y mandamientos, sus decretos y sus testimonios, de la manera que esta escrito en la ley de Moises, para que prosperes en todo lo que hagas y en todo lo que emprendas; 

Hermano como quisiera que usted pensará por un instante, este momento de David llamando al futuro rey, a su hijo, mire los consejos que le está dando, aquí no está hablando; – Hijo cuida la casita que te he dejado, mira que me ha costado tanto. 

Está hablando de Dios, está hablando del Señor, está hablando de guardar los preceptos, la ley de Jehová, habla de andar en sus caminos; y todo esto lo quebrantó Salomón usted.

Al principio Salomón pidió sabiduría al Señor, pero recuérdese yo le he dicho en este púlpito en varias oportunidades; la sabiduría es como el pan de cada día. La sabiduría no es un regalo que Dios te lo dá hoy y ya usted se lo echa la bolsa por el resto de sus días, no señor. Así como dice en la escritura el pan de cada día dámelo hoy, de igual manera uno tiene que pedir sabiduría, inteligencia todos los días de su vida; porque todos los días usted va enfrentar situaciones, va a enfrentar circunstancias donde usted puede cometer errores gravísimos y algunas veces estupideces. Aunque seamos creyentes, como le pasó a él, como le pasó a David. Todos los días al comenzar en la mañana: – Señor dame sabiduría, Señor ayúdame a hacer tu voluntad, Señor yo quiero guardar tus preceptos, quiero andar en tus caminos, quiero observar sus estatutos, quiero observar tus mandamientos Señor, su decretos, sus testimonios de la manera que está escrito en la ley de Moisés, Para que prosperes en todo lo que hagas y en todo aquello que emprendas. 

Mire qué manera, qué versículo, que pasaje este, que consejo hermano, que consejo, es que que aparte de esto: ¿que más? ¿sabe que? si usted logra esto, tiene todo lo demás.

Mire; qué lindo que tenga su casita usted, gloria a Dios por eso, qué lindo que tenga usted su carrera, gloria a Dios por eso mi hermano, pero todo eso se queda, todo eso pasa, ¿y de que le va a servir al siguiente día? Yo le decía a usted hace un rato; la salud es un regalo de Dios, lo demás todo es lujo ¿de que le sirve a usted tener tanto si no tiene salud? ¿A ver?

Yo estaba pensando hace poco ¿verdad? Decía: – ¡Híjole! Ehh, ya porque como llegan cartitas después de los sesenta ¿me entiende? y aquí se las mandan antes. Decía bueno ¿y qué ondas con el retiro? Osea ¿cuánto van a dar aquí de retiro? para ya ir haciendo cuentas.

¡No friegue, hombre! Hijole ya no puedes tomar un Starbucks, hay que irse al Tim Hortons ¿me entiende? haciendo cuenta de todas esas cositas pues, ¿y qué ondas con todo esto? – A no, no; pero es que después de los setenta esto se le va a dar.. Si usted se retira después de los sesenta; una tontera; a los sesenta y cinco tontera y media ¿verdad? y a los setenta; ya más o menos.

Y yá a los setenta mijo ¿para qué? si con un pedazo de carne ya se atorzona ¿me entiende? Si comiste seis onzas de carne ya pasa estreñido cuatro cinco días mano.

y entonces pa´ ¿cual es de chiste? – Ahh no, para ir a viajar. Ya no se viaja, a esas alturas así uno mire [ronca] – Hermano, mire que bonito ve [lo despierta] – Ay que chulo [se vuelve a dormir] 

Ya me acordé de mi querido maestro hermano Toby; una de las últimas veces que estuvo aquí en Vancouver, venía con una de sus esposas; digo pues la que tenía en ese momento, no vaya creer usted que tenía varias. [se rie]

Y nos fuimos a caminar allá por la playa ¿verdad? en el carro pues, y el maestro dormido [se refiere a Hno. Toby] y la señora le decía: – Mire que lindo [su esposa] – Si chulo, chulo. [Contestó el Hno. Toby dormido] no vió nada usted.

Y cuando llegamos a la casa: – ¿Y qué tal le pareció? [su esposa] – Muy bonito, es que Vancouver es espectacular. [Hno.Toby]

y le decía su esposa: – Pero si ni vió nada – ¡Ay me enseña la fotos después hombre! [Hno. Toby]

Yo digo bueno este mundo es así, ya al final ¿para qué? 

Pero bueno, digo después de esto no hay nada y vamos a llegar un día donde se me pasan por la mente; familias de esta iglesia, que se movieron lejos de Vancouver; y nada malo con eso, de ninguna manera, está bien. Y me dijo uno de ellos: -Pastor, yo trabajo en Vancouver y ahora vivo en tal parte, entonces me dice; viajo lunes, martes, todos los días. El domingo sinceramente me dice, no me dan ganas de ir a Vancouver. 

Y le digo: ¿Entonces qué van a hacer? – No pues nos vamos a buscar una iglesita por aquí cerca. Está bien, no hay problema si ustedes van a adorar al Señor la idea es que crezcan, la idea es que sigan. Sí, sí pues. Ya que no sé qué. Que no sé cuándo y que aquí que allá ¡chévere!. Nunca encontraron nada y ya pasaron seis años, seis. ¿Ahora sabe dónde nos vemos? en los funerales.

-Hay pastor que gusto de verlo. Y le dije: – Si las últimas tres veces nos hemos visto en funerales. 

¿Sabe por qué? porque las intenciones son buenas, pero el diablo, es diablo mijo. [Mmm..] El diablo es diablo y te va enganchar, es que mire hermano; el diablo ya no viene así como nos lo pintaron a nosotros con una gran cola. Es sutil, es sutil, te va llevando despacito y despacito; – Un dominguito no hay problema porque nos acabamos de mover y estamos sacando las cosas de las cajas. 

Ni ropa que ponernos tenemos pastor, me dijo un día alguien. Le digo: – Ok. – Y no encontrábamos la comida -Ok, les digo. Y un dominguito y después otro y luego después de una semana: -No hemos sacado a los niños y solo los domingo nos queda. Vaya y se fueron. Ya pasaron tres, cuatro años. No los volvimos a ver. 

Es que el negocio no es conmigo hermano, el negocio no es conmigo, y luego yo te voy a decir  una cosa, yo voy a ser honesto ¿verdad?. Yo digo, todas estas cosas pasan con un objetivo, para ver quién de verdad ¿quien? tiene raíz en el evangelio y ¿quién no?. Porque fíjate a unas personas se les ataca su fé poniéndole a una mujer por delante, así se ataca a la fé. 

Y yo conozco y le digo esto; yo conozco de parejas que yo he llegado al punto de decir; tan bobita esta señora. Sabe que su marido anda detrás de un montón de viejas, lo tuvo en la casa del Señor por tanto tiempo, y en la casa del Señor freno de mano ¿verdad? freno de mano. Y hoy, él ya no quiere venir, ella tampoco.

Cuántas cosas dije no ha de andar haciendo esta persona, ¿verdad? porque antes pues era la iglesia lo que lo mantenía; por lo menos así escuchando palabra, porque la fé viene por el oír. A una persona les pone una mujer, a otra mujer les pone un hombre, a otra persona les pone dinero, a otras personas les da una casa, a otra persona le da una carrera, una profesión, a otra persona.. digo cada quien lo suyo. 

Si llegáramos a entender que verdaderamente el punto de todo y aquí estamos hablando de un hombre que no le faltó nada en la santa vida, ni mujeres pues, porque ya vimos cuántas tuvo el cuate. ¿Hijos? ¡No hombre!. Y ahorita que ya llega a viejo no dijeron; mire señor, este.. ¿verdad? tiene frío, démosle una neocitran para que.. No busquemosle una muchachita virgen.

No no, yo conozco al rey David, a este una pastilla no lo calma vayan a buscar en todo el reino a una muchacha. Y el desde la cama; eso eso eso eso.

Yo dije que no iba a decir nada, y no voy a decir nada, hasta ahí lo voy a dejar. Pero eso es todo lo demás viene por añadidura.

1 Reyes 2: 3 Guarda los preceptos de Jehová tu Dios, [de qué manera papá] andando en sus caminos, y observando sus estatutos y mandamientos, sus decretos y sus testimonios, de la manera que está escrito en la ley de Moises, para que prosperes en todo lo que hagas y en todo lo que emprendas; 

Esa es la clave ¿y si te descuidas? pierdes, como perdió Salomón ¿y si te apartas de aquí? pierdes. 

Y a esa persona yo le dije la última vez que la ví: Si hermano tienes una casita en tal lugar y sabes que si hubieras cumplido este versículo; tendrías dos, tendrías tres, tendrías cuatro. Si hubieras cumplido. Pero claro eso pensaste que era tu reino y allí te quedaste. 

Dios es mucho más que cualquier cosa, el que tiene a Dios lo tiene todo amado. Es que, el que tiene a Dios lo tiene todo. 

Y mira yo he sido cuadrado toda mi vida en este sentido y así me ha bendecido el Señor. Yo no voy a agarrar un domingo para irme a  la playa, ¡ni papas! Yo nó.

Es culto, es culto. A la playa vamos otro día hombre. Pero hay gente que no les importa – Vamos hombre, si Dios no se molesta. Te regalan un carro y lo vas a probar el domingo

¡Que boberia! ¿Y Dios pues? ¿y no que hay que amarlo con todo el corazón? ¿y no que hay que amarlo con toda el alma? ¿y no que hay que amarlo con todas tus fuerzas? ¿y no quiero quemarlo con toda tu mente? ¿y entonces pues? es que ahí está todo. Y él manda llamar a su hijo y preocupado por el reino: – Bueno ya llegué al final de mis días, yo quería construir el templo no lo voy a poder construir, hijo por favor guarda los preceptos de Jehová tu Dios, guardalos.

Nadie va a ser por usted lo que Dios puede hacer por usted, nadie. Ninguna carrera, ninguna institución, ninguna mujer, ningún hombre, ninguna cuenta en el banco, ningún equipo de fútbol; ni Messi que es el mejor del mundo, ni Cristiano Ronaldo que es el segundo. Nadie.

Yo conocí a un señor que era más fanático del fútbol, pero ese cuate si era fanático, pero fanatico, y el se convirtió al evangelio; y un día me lo encontré allá el tenía un taller. Y llegué y él salió y platicamos y le digo: Hey y todavía..? [relacionado con fútbol] – No, me dijo. Ya nó, desde que conocí al Señor ya dejé todo eso, es que me quitaba mucho tiempo y ahora nos gozamos en Dios. Esa es la clave.

Es que sí y si usted me pudiera entender hermano, que cuando alguien dice: hay hermano.. “si un dominguito” ¡no hombre! es que un domingo se convierten en dos, y dos se convierten en tres y tres se convierten en cuatro y sabe ¿quiénes son los peores enemigos suyos? aquellos que usted habla por teléfono y le dicen; – Vamos a dar la vuelta a vos, y le dice vamos. Uy ese, ¡mijo! lejos de él por favor!

Usted tiene que estar cerca de aquel que le dice: ¿Ya te diste cuenta que es domingo, vos?- Pues sí hombre pero.. [sin ganas de ir] – Noo tu abuela no fregués hombre. ¿cómo vas a creer? si hoy es día del Señor papá, día del Señor se respeta. Pero hay otros que dicen; – no hombre, si Dios no es tan cuadrado pastor. Pregúntele a aquellos que ya no vienen ¿a ver si es cierto? y bueno me encanta eso, me encanta esta situación.

En el versículo siguiente en 1 reyes 2: 4 Para que confirme Jehová la palabra que me habló, diciendo: Si tus hijos guardaren mi camino, andando delante de mí con verdad, de todo su corazón y de toda su alma, jamás, dice, faltará a ti varón en el trono de Israel.

Quiero que vayamos al primer libro de crónicas una vez más 1 Crónicas: 29: 26-28 

Así reinó David hijo de Isaí sobre todo Israel. El tiempo que reinó sobre Israel fue cuarenta años. Siete años reinó en Hebrón y treinta y tres en Jerusalén. Y murió en buena vejez.

Hermanos este es el anhelo de todo el mundo, no es de mi incumbencia en realidad hablar de esto pero; el pastor hermano Toby padre, a quien yo consideré como mi padre en todo sentido, y a quien respeté pues hasta el último día de su vida, en cantidad de oportunidades, cantidad, él me dijo: David yo quisiera que mi muerte sea una muerte de la que yo no me dé cuenta, él incluso en el púlpito bromeaba y decía: Yo le digo a Dios; Señor si me van a matar que sea un disparo por la espalda y que yo no sienta. 

Uno de sus grandes héroes en la fé, fue un pastor que se llamó Jack Hyles; él escuchó al pastor Jack Hyles de Chattanooga Tennessee, si mas no recuerdo o Indiana algo así, toda su vida, de hecho a él lo consideraban uno de sus misioneros y le mandaban los cassette, las predicaciones, por toda la vida se la mandaron, y él lo dijo mil veces fue su pastor. 

Y este hermano Jack Hyles tenía un problema en la garganta que cuando él estaba predicando había algo que le hacía ¡ejem, ejem! [carraspera] siempre  que estaba predicando. Y ya a sus setenta y pico de años, setenta y ocho años se sometió a una operación y con la anestesia murió.

Entonces hermano Toby decía: Una muerte así, quiero yo. Una muerte así, que no sientas, que te ponen ese gas y al ratito yá pasa, no sentís que fue lo que pasó y amaneces ante la presencia del Señor. Pero lastimosamente no fue así el caso de él, sufrió mucho, sufrió mucho.

Mi querido Walter R. también del que hablé el domingo pasado ¿se acuerda verdad, hermano Tony? sufrió mucho hermano Walter, sufrió bastante. Y esto es un regalo del cielo, es un regalo del cielo. Una buena vejez lleno de días; quiere decir que el hombre lucía bien. ¿quién no va a lucir bien? si le traen a una.. bueno mejor no, de eso dije yo que no iba a hablar.

Riquezas hasta decir ya no, ¿dígame usted? tenía todo; “gloria, las glorias de Israel”. Jaaa los enemigos antes que incursionaban y hacían desastres en Israel si no eche un vistazo a todos los jueces, hasta que clamaba el pueblo y Jehová tenía misericordia de ellos y levantaba un juez; pero los enemigos hacían lo que querían, no con David señores, cuando David llegó al trono los enemigos respetaron a Israel, lo pensaban dos veces, porque eran cantidad de filisteos que morían en cada incursión. 

“gloria y reinó en su lugar salomón su hijo” y esto indiscutiblemente que es una un acto de gloria, de honor, de gratitud ¿porque? porque el rey anterior; Saúl, ninguno de sus hijos gobernó, gobernó David y esta era una bendición adicional que su hijo fuera que iba gobernar a Israel.

Bueno luego dice el versículo 1 Crónicas 29: 29 Y los hechos del rey David primeros y postreros, están escritos en el libro de las crónicas de Samuel vidente, en las crónicas del profeta  Natán y en las crónicas de Gad vidente. 

[nuevamente el 28] 1 Crónicas 29: 28 Y murió en buena vejez, lleno de días, de riquezas y de gloria; y reinó en su lugar Salomón su hijo.

Hay dos pasajes que me gustaría que veamos y terminar con ellos; 2 Samuel 23: 1

Estas son las palabras postreras de David. Dijo David hijo de Isaí, dijo aquel varón que fue levantado en alto, el ungido del Dios de Jacob, el dulce cantor de Israel.

Hermanos la gran cantidad de salmos que se cantan, hay muchísimos salmos que tienen música y se cantan en las iglesias, se han cantado por todos estos años ¿de dónde cree usted que ha salido toda esa letra? de los salmos. Los salmos se consideran como el himnario de Israel.

Y ahora dice la palabra del Señor que David era no solamente el ungido del Dios de Jacob, sino el dulce cantor de Israel, y recordemos algo y usted ha de haber escuchado esto cantidad de veces; la razón y el propósito por lo cual nosotros nos reunimos es para adorar a Dios es para exaltar al Señor, es para darle adoración, para que el se llene la honra, para que el se lleve la gloria. ahora ¿se imagina usted a David? inspirado por el espíritu de Dios, escribiendo todas estas canciones para Dios, esas alabanzas para el Señor.

Hoy en día lastimosamente se escribe mucho para el amor, no me quiero meter en ese lío ¿verdad? se escribe mucho para una cosa para la otra, y nos hemos olvidado, porque cuando nos alejamos de los salmos entonces comenzamos a poner al hombre en el centro, en lugar de poner a Dios y es Dios el único digno de toda alabanza de toda oración.

Y luego en el nuevo testamento en Hechos 13: 22 [Pablo está hablando en antioquia] Quitado este, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí [mire las palabras de Dios] varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero. 

¡Qué palabras! es por eso que un día de estos vamos a estudiar y vamos a ver ¿Porque David fue el hombre conforme al corazón de Dios? y la encrucijada es esta; si para conocer el corazón de David; hay que estudiar el corazón de Dios, o sí para conocer el corazón de Dios, hay que estudiar el corazón de David.

Lo que sí es cierto es que David fue el hombre conforme al corazón de Dios. Vamos a orar demos gracias a Dios.

Padre gracias por la vida del rey David, que miles y miles de años más tarde nos sigue hablando al corazón su testimonio, su amor por tí, su amor por tu palabra, por tus preceptos, por tus testimonios Señor. Y en este día nosotros, Padre, como quisiéramos tener un corazón conforme al tuyo. Cómo quisiéramos Señor que lo más importante en nuestro diario caminar sea hacer tu voluntad, como quisiéramos tener esa inspiración que tuvo el rey para escribir estos salmos que llegaron hasta la intimidad tuya Señor.

Gracias por David, por su vida, de todo aprendemos Señor; de sus errores, como también del gran amor que tuvo por tí, por tu nación, por Israel. Especialmente por ese amor tan grande hacia Dios, como quisiéramos nosotros Señor guardar tus preceptos, guardar tu palabra, guardar tu testimonio y entender que en este mundo no hay nada más importante, precisamente que eso; hacer tu voluntad. Entender que este mundo pasa y sus deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. Y esta es la voluntad tuya; que este mundo te conozca, te ame se entregue en corazón y alma delante de tí.

Mientras todos oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón, pero quisiera hacerlo en esta noche, mira los tiempos son malos y aunque fueran buenos, es importante levantar el rostro y ver el cielo. Si todavía usted no conoce a Cristo como el Señor y Salvador de su vida; yo le invito para que abra su corazón y reciba a Jesús como su Salvador como su Señor.

Mientras oramos, si hay alguna persona con nosotros que dice: Pastor yo quisiera recibir a Cristo, yo siento la necesidad de Dios en mi vida, queremos comenzar una vida nueva en este país, una vida con Dios en el alma, con Dios en el corazón. Yo le invito, si hay alguien ahí donde está póngase de pie, entreguele su corazón a Dios, recíbalo como el Señor y Salvador de su vida. Dios le ama, Dios tiene un plan maravilloso, Dios quiere salvarle, ¡Gloria el Señor! Gracias a Dios, gracias a Dios.

Si usted ahí donde está, quiere comenzar una vida nueva con Dios, haga esta oración conmigo y dígale: Señor en este día te pido perdón por mis pecados, te recibo como el Señor y Salvador de mi alma, te pido perdón, me arrepiento Señor de mis pecados, me arrepiento de mis maldades, y en este día te entrego mi corazón, te entrego mi vida.

Si usted hizo esta oración, yo quiero animarle a crecer en el conocimiento de nuestro bendito salvador Jesucristo y de su santa palabra. Señor gracias por esta noche, por tu palabra, por el convivio con los hermanos, por tu Espíritu Santo y por tu presencia con nosotros, bendícenos en el nombre de Jesús. Amén y amén.