¿Por qué David era el hombre conforme al corazón de Dios? (Parte 2)
enero 19, 2022 – 7:00PM | Hechos 13: 22 | Dr. David Rodriguez
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TRANSCRIPCIÓN
Bueno vamos a abrir la palabra del Señor, en el libro de los Hechos 13: 22 dice la palabra del Señor así: Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dió también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón quien hará todo lo que yo quiero.
En eso estamos, espero que este sea el último estudio, es el número treinta y seis de la vida del rey David y este es el número dos de ¿Porque David era el hombre conforme al corazón de Dios?. Dios le dijo a Samuel: Me he buscado a un hombre conforme a mi corazón, hablando acerca de David.
Y ahora tenemos acá, en el nuevo testamento; hablando acerca del rey David; un hombre conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero.
Bueno que Dios bendiga esta palabra.
Dios no mira las apariencias Dios mira el corazón eso lo dijimos la semana pasada.
Hay una época en la vida, donde nosotros apreciamos más la apariencia de la gente, de hecho en nuestra juventud cuando se anda buscando novia o se anda buscando novio; muchas veces es la apariencia. Yo conozco latinos y latinas que le ponen los ojos a una canadiense ó a un canadiense porque quiere mejorar la raza dicen.
A medida que pasan los años nos damos cuenta que de la apariencia de la gente no se come. A medida que avanzamos en años y vemos a una mujer guapa, a una mujer bonita, la pregunta que uno se hace es: ¿Que habrá en ese corazón? La verdad.
Y es probable que en tiempo de juventud uno pueda pagar el precio, el precio de vivir al lado de una mujer bonita, pero que tenga un carácter del demonio.
Y cuando hablamos de por qué David era conforme al corazón de Dios, tiene mucho que ver, no es una sola razón. Y le repito si usted encuentra alguna novedad de lo que ha escuchado el miércoles pasado y este miércoles, ¡me avisa por favor!, porque le he dado vuelta a todas las cosas y bueno.
Dios no mira la apariencias, Dios mira el corazón, Dios no anda buscando gente perfecta; dijimos, David fue un hombre imperfecto, Dios no anda buscando a un hombre santo; David es un hombre pecador, Dios escogió a Saúl y lo desechó, Dios escogió a David y lo respaldó siempre.
Y luego hicimos una reflexión de que Dios no escoge gente calificada, sino que Dios califica a gente escogida. Y entre las cosas que hablamos de porque creemos que David es el hombre conforme al corazón de Dios; hicimos una comparación entre David y Saúl, porque Saúl pues fue el primer rey de Israel; comenzó bien pero terminó mal, no tenía temor de Dios, y hablamos lastimosamente de muchas de las cualidades o más bien de las cosas que hizo Saúl que no agradaron a Dios. Saúl fue un rey rebelde y necio que desobedeció a Dios en todo.
Y bueno pues, las cualidades que considero personalmente que Dios vió en David son las que vamos a estudiar. La semana pasada, estudiamos algunas, hoy vamos a estudiar otras. La primera: Las intenciones del corazón. A Dios no lo engaña nadie; usted me puede engañar a mí, usted puede engañar a quien quiera, a su abuela puede engañarla, pero a Dios no le engaña nadie y Dios mira las intenciones del corazón, y cuando hablamos de intenciones del corazón, Dios sabe si usted es honesto o es deshonesto, Dios sabe si es honesta o es deshonesta.
Usted puede venir a mostrar una cara aquí a la iglesia y en realidad su cara es otra fuera de la casa del Señor, Dios sabe si usted.. Bueno todo lo que hablamos acerca de las intenciones del corazón y Dios vió eso en la vida de David.
Otro de los aspectos importantes; nos dimos cuenta que David era un hombre de alabanza, un hombre de adoración. Escribió cosas maravillosas porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; y de ser temido sobre todos los dioses. Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; contaré todas sus maravillas. Me alegraré y me regocijaré en tí; cantaré a tu nombre, oh Altísimo.
David danzó cuando traían el arca a Jerusalén, esta adoración, esta alabanza de David hermanos es la que ha servido de base para la adoración a lo largo de las generaciones; porque David escribió los salmos, muchos de los salmos y todas estas cosas lindísimas que son lo que han motivado a grandes artistas y grandes compositores a escribir alabanza y adoración al Señor.
En tercer lugar hablamos de gratitud; David fue un hombre, hay salmos de acción de gracias: Bendito sea Jehová, mi roca, quien adiestra mis manos para la batalla, y mis dedos para la guerra. Un hombre que mostró gratitud al Señor todo el tiempo.
Y luego nos quedamos en el número cuatro en el arrepentimiento.
Hay dos cosas que Dios mira en el arrepentimiento, hermanos dos situaciones: la número uno, es el reconocimiento; es decir, he fallado porque he fallado, y luego la enmienda. Saúl dijo: ¡he fallado! pero justificó su pecado ¿verdad? – Es que no fuí yo. -Es que fué el pueblo. – Es que no soy yo, es que es tal cosa, es que.. [todo se justifica]. Eso es una cosa que Dios mira.
Y luego la segunda cosa con relación al arrepentimiento; es que el arrepentimiento tiene que ser genuino ¿verdad?, Si usted dice: – Si me arrepiento. Y el arrepentimiento le dura un día, le dura dos días, le dura una semana; ¡escúcheme! no es arrepentimiento; usted está jugando, está jugando con usted mismo, está jugando con Dios y eso ya pasó cuatrocientos ochenta y cuatro mil veces. Entonces Dios dice esto no es una persona confiable ¿verdad? porque se arrepiente y luego a la vuelta de tres días regresamos otra vez a lo mismo.
Y David fue un hombre que se arrepintió cuando cometió su terrible pecado con Betsabé y mandó matar a Urías Heteo, y de ahí tenemos el surgimiento del salmo capítulo cincuenta y uno.
Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad y seré más blanco que la nieve. Y tenemos todo ese salmo maravilloso de David mostrando un arrepentimiento genuino.
Y bueno ahora vamos al número cinco, y solamente son ciento cuarenta y cuatro les dije. Mira tal vez logré explicarme esto; usted se da cuenta que uno puede decir esta persona es de buen corazón, aquí en inglés dicen: This is a good man, una persona de buen corazón.
Ya hablamos de las intenciones, ahora quiero hablar de una persona de buen corazón; David era una persona de buen corazón ¿en qué sentido podemos decir? Quiero hablarle de tres cositas bien sencillas; usted se dio cuenta que Saúl lo buscó para matarlo por todos lados. Se acuerda que un día le dijo: Si el rey ha salido a buscar una pulga. O sea me andan buscando en cada cueva, me anda buscando en cada lugar.
Entonces fíjate, hubo en dos oportunidades donde David se pudo vengar de Saúl ¿Se acuerda usted de eso? y no lo hizo, ¿qué significa eso? David no era una persona vengativa.
Ahora, ¿nosotros hermanos? mmmm con la misma moneda ¿verdad? Queremos vengarnos de cosas malas que nos hace la gente. Y sí no tenemos control hermano, podemos caer en esa situación. David no tenía ese problema.
En segundo lugar David nunca permitió ¡escucha esto! que los celos que tenía Saúl de él, lo amargáran. Hoy en día hay gente amargada, hay personas que piensan que todo el mundo quieren el mal para ellos, So what. Pero David se pudo haber amargado y dijo: – No, yo para ser cristiano mejor no, mire todo lo que me ha pasado. [No sé amargó].
Otra cosa también amados míos; David nunca guardó rencor ¿Se acuerda usted, que cuando Saúl dijo que el que matara a Goliat le iba a dar a su hija? Fíjate que no se la dieron, se la dieron a otro, él no tuvo rencor. Entonces es una persona de buen corazón.
¿Usted conoce gente que se resiente fácilmente por todo? Usted conoce personas que; – es que a mí el que me las hace las paga. ¿Usted cree que eso es un buen corazón? Una persona así Dios no le podría llamar; este hombre, esta mujer es conforme a mi corazón.
Entonces ahí tenemos a una persona de buen corazón; el caso de David.
Bueno número seis, porque quiero avanzar y no quiero decir las mismas palabras de la semana pasada; David era un hombre humilde y esto me encanta, era un hombre humilde al cual nunca se le subieron los humos a la cabeza, recuerde que lo estamos comparando con el rey Saúl.
En 1 Samuel 18: 8 [abusado con la biblia por favor] fíjate qué en 1 Samuel 18: 8 Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles y a mí miles; no le falta más que el reino.
Mire usted aquí hay celos, aquí hay envidia ¿ok? pero a pesar de que esa canción se hizo famosa en tiempos de David y Saul. Y desde aquel día Saul no miró con buenos ojos a David.
¿Que quiere decir eso hermanos? Usted cree que David dijo: -¡Ah mira! Mira lo que la gente dice de mí. – Wuao que barbaro – Ese soy yo ahora. De ninguna manera, a él no se le subieron los humos a la cabeza; es decir, mire hermano, fue un hombre humilde en todo tiempo y no hay cosa mas linda que eso en realidad, es que mire hermano que digan; fulano es grande y mengano tal cosa ¡Gloria a Dios, hombre! ¿y cual es el problema de eso? Si una de las cosas que debemos entender nosotros es que Dios nos da una posición a cada uno en la vida ¿me entiende? y tenemos que aceptarla pues.
Hay cantantes, hay cantantes de cantantes, hay unos que son mejores que otros, ¡Gracias a Dios hermano! hay unos predicadores que predican mejor que otros,¡Gloria a Dios hombre! ¡Gracias al Señor! Hay pastores que tienen unas iglesias que son de miles, de miles ¡Bendito sea el nombre del Señor hermano!
David fue humilde, él no crea usted que andaba pues ¿verdad? Imagínese si hubiese tenido facebook David; con esto, con esto que dijeron: -Oh mira David mató a diez miles. No hermano, eso era para engrandecerse. Y el otro que tenía un corazón chueco. – Ohh solamente le falta el reino, y entonces para que no me quite el reino mejor me lo echó al plato, lo voy a matar.
Y esas son las diferencias, ahora recuerde una cosa; Dios al altivo, lo mira de lejos; al humilde mira de cerca. Por eso es que es bien pero bien importante aprender a ser humildes en nuestra vida cristiana. David fue una persona humilde.
Fíjese que en una oportunidad en 1 samuel 18: 18 cuando el rey lo quería hacer su yerno, mire lo que dijo él: ¿Quién soy yo? ó ¿que es mi vida ó la familia de mi padre en Israel para que yo sea yerno del rey? Es decir, el nombre estaba ubicado, y eso es una cosa muy buena.
Número siete; David nunca se promovió a sí mismo, y esto me gusta, esto me encanta, él nunca se promovió a sí mismo, él nunca dijo: Yo soy David. Sin embargo Saúl, tenía un problema serio de identidad.
Fíjate que las palabras de David; Jehová es mi roca, Jehová es mi fortaleza, Jehová es mi libertador, Jehová es mi pastor, Jehová unge mi cabeza con aceite, Jehová es mi luz y mi salvación, Jehová es la fortaleza de mi vida, Jehová roca mía y castigo mío, mi Dios en quien confiaré, mi libertador. Jehová mi escudo, la fuerza de mi salvación.
Fíjate que él no puso a la obra del reino David Ministry para exaltarse a él como persona, nunca se promovió a sí mismo; porque es importante entender, que la única persona que merece exaltación cuando se trata del reino de Dios es Jehová, Dios el único, es el único.
Y viera que yo personalmente tengo un problema serio con las nuevas regulaciones de liderazgo como usted no tiene idea oye, pero serio, porque todos los líderes de la actualidad dicen que uno tiene que estimular a los servidores, de que uno tiene que hacer aquí y que tiene que hacer allá. Yo digo que está bien que hagan eso en una compañía que es secular, pero siervos inútiles somos, eso es lo que somos siervos inútiles.
Yo por eso, a mí en lo personal, a mí no me gusta, aquí el día del pastor no se celebra, nunca lo hemos celebrado, bueno una vez lo celebramos y me arrepiento eternamente ¿ok? y yo lo dejé a un grupito que lo celebrara y me arrepiento, pero me arrepiento de haberlo hecho.
El único que merece honra y gloria en este púlpito es Dios nada más, nosotros somos instrumentos en las manos del Señor y san se acabó ¿ok? Bueno, entonces David nunca se promovió asimismo.
Otro aspecto grandioso del rey David; Misericordia, entonces recuérdese que cuando comenzamos el estudio de la semana pasada dijimos; bueno si queremos saber nosotros porque David tenía el corazón conforme al corazón de Dios ¿qué es lo que tenemos que estudiar? ¿el corazón de David o el corazón de Dios? y usted se da cuenta que las cualidades que encontramos en David las encontramos también en Dios. Dios misericordia, David misericordia.
¿Se acuerda usted cuando David dijo: ha quedado alguno de la casa de Saúl a quien haga yo misericordia por amor de Jonathan? Imagínate que lo primero que hacen los reyes es matar a toda la descendencia del rey anterior, esto es lo primero que hacen, para evitar que se vayan a levantar. Él no hizo eso; él dijo ¿habrá quedado alguien de la casa de Saúl a quien yo haga misericordia? por eso digo David tenía un buen corazón, mi hermano.
Otro de los aspectos importantísimos, pero tremendos de David era su confianza en Dios, y eso hermano mío lo vemos en 1 Samuel 17: 45 Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; más yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú ha provocado.
¡Dios mío! hermano, ¡que barbaridad!, ¡que confianza! y déjeme decirle que en la vida como cristianos que somos, tenemos que confiar en Dios, usted va a pasar dificultades. Mire yo hoy estuve contestado unos correos y en realidad le digo, mire hermano, si es que leía uno de los correos esta tarde; pastor y me pasó esto y luego me pasó aquí y luego me pasó allá y no me lo va creer pero me pasó después tal cosa, yo dije: – juela mano, a este brother hay que hacerle una limpia ¡qué barbaridad! tanta cosa, tanta situación. Y me decía ya no puedo más pastor, ya no puedo más. Hay que confiar en Dios, hay que confiar en Dios.
Y es mas le voy a decir otra cosita; hay que confiar en Dios esperando lo mejor, aunque es posible que no reciba lo que usted quiera, porque solamente de esa manera Dios puede saber si nuestra confianza en él es real, es incondicional.
Yo voy a confiar; esto es lo que yo quiero, esto es lo que yo le estoy pidiendo a Dios, ¡Señor por favor!, ¡Señor por favor! ¡Yo confío en tí!, ¡Yo confío en tí!. Pero si la cosa no sale como yo estoy esperando; ¡Bendito sea el nombre del Señor! Yo voy a seguir confiando en Dios. Y la confianza que tenía David en Jehová con ese versículo que tenemos hermanos, suficiente.
En el salmo 37 No te impacientes a causa de los malignos, confía en Jehová, deleitate en Jehová, encomienda a Jehová tu camino, cuando el hombre cayere no quedará postrado, porque Jehová sostiene su mano. Él mismo dijo joven fuí y envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan.
Confianza, confianza, confianza en Dios.
En el Salmo 27: 3 mire las palabras de David, que por cierto hay un corito de este salmo: Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá mi corazón. [El pastor canta] ¿Te das cuenta? Aunque un ejercito acampe contra mí, no temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, yo estaré confiado. Es que a lo que yo me refiero es que; estas palabras hermanos son maravillosas, en lugar de: Ya no puedo, ya no aguanto más, yo no sé qué está pasando conmigo, yo ya no sé ni qué creer, yo ya me estoy muriendo.
Mire aunque un ejercito acampe contra mí no temerá mi corazón; aunque contra mí se levante guerra, yo estaré ¿que dice la palabra? confiado. Cualquiera que sea la situación; aunque se esté muriendo mano, ¡confiado en el Señor!.
Hay situaciones en la vida que son así, My goodness! Hay cosas en la vida que son así y yo he pasado un montón que para que le cuento, un montonazo.
Me acuerdo que cuando comenzamos el proyecto del templo y los hermanos me dijeron: Pastor si usted nos promete que va a estar con nosotros hasta que salgamos con todo esto, le entramos. Pero si a la vuelta de unos años usted dice; ¿bueno, saben que? de verdad yo pues estoy viendo otros pastos que son más verdes que estos.
Y déjeme decirle que cuando firmamos aquí el documento, delante de toda la iglesia el ocho de marzo del dos mil veinte fue ¿verdad? Veinte sí, y la siguiente semana se cerró la iglesia, yo ví pastos más verdes en otras partes del mundo. Y conozco pastores.. Claro, ya habíamos firmado – ¿Cómo es posible? ¿por qué se metieron a un compromiso tan grande? ¿Y ahora cómo van hacer? y ahora aquí y ahora allá.. Y claro mis aguites los he pasado, ¿verdad? mis aguites los he pasado en gran manera.
Yo creo que mi esposa ni sabe, espero, de que nuestra casa está puesta como una garantía por ese préstamo. Como ella me dice a mí: Ahí tú te encargas. Entonces yo me encargué. Eso ¿sabe que demuestra eso? la confianza que tenemos en el Señor y si se puede ¡Bendito sea el nombre del Señor! y si en en el camino le dice; no lo que yo tengo para ustedes es otra cosa ¡bendito sea el nombre de Dios también! Pero en todas las circunstancias de la vida hay que mostrar confianza, en todas.
Hace un año que me estaba muriendo por el covid-19 el primero, este segundo fue más tranquilo, pero el primero, ¡hijole mano!, yo dije: – Se acabó – Hoy voy a colgar la Biblia. Porque los pastores no colgamos los guantes ni los tenis, colgamos la Biblia. – Se acabó. ¿Pero sabe que? no hay cosa más linda que decirle a Dios: – Yo estoy listo mano. Si voy a ver tu rostro Señor y voy a ver Tú gloria y voy a caminar por esas calles de oro; monós, como dicen en mi rancho.
Por supuesto uno está apegado a un montón de cosas ¿verdad? y cuestiones y ¿Que va hacer? si ver a Dios es mejor que cualquier otra cosa, estar ante la presencia del Señor es mejor que cualquier cosa, y hay algo que yo aprendí y lo aprendí difícil, que Dios me lo mostró un día, y es el hecho de que yo me preocupaba por mi familia, y Dios me dijo a mi corazón un día, me dijo Dios: – ¿Tú crees que yo no puedo cuidar a tu familia mejor de la que la cuidas tú? Y yo dije: – ¡nos vemos mano!, tiene toda la razón vámonos yá. Y me trajo de regreso, fíjese. Me dijo: pues no, hay que ir a pagar allá abajo.
Ahora hay otra cosa que es bien importante, entre las las características que estamos viendo, porque es una comparación de Saúl que Dios lo desechó y David que Dios amó.
Fíjate que Saúl, lo acabamos de leer hace un ratito; Saúl era el tipo de persona que era people pleaser, él quería complacer a la gente, ese era el tipo de persona Saúl, Saúl quería quedar bien él con la gente y hacer lo que la gente quería. Y en la vida hermanos, en la vida nos vamos a encontrar: Con, hacemos lo que la gente quiere ó hacemos lo que Dios quiere.
Y Saúl se encontró en una situación. Miren el capítulo 1 Samuel 15: 9 quiero mostrarle varias cosas, eche un vistazo si tiene su biblia por favor, ahora fíjate ¿se acuerda usted lo acabamos de leer, que Dios lo mandó para que mataran a ese pueblo? porque ese pueblo era idolatra por completo. Y no lo hicieron, ahora mira en el versículo nueve:
Y Saul y el pueblo perdonaron a Agag, entonces el contraste que quiero que vea en este momento es lo siguiente: Saúl se dejaba llevar por la gente, David era líder, David guiaba a la gente, David guiaba no se dejaba llevar, aunque hubiera gente de influencia porque en todas las congregaciones hay gente de influencia.
El versículo 1 Samuel 15: 15 Y Saúl respondió: De Amalec los han traído; ¡oiga! porque el pueblo perdonó lo mejor de las ovejas. Una vez más, el pueblo.
Y mira el versículo 1 Samuel 15: 24 hermanos, Entonces Saúl dijo a Samuel: Yo he pecado pues he quebrantado el mandamiento de Jehová y tus palabras, y mire usted la razón que dió de su pecado “porque temí al pueblo y consentí a la voz de ellos”. Wow ese era Saúl. Saúl era el tipo de persona que quería complacer a las multitudes, quería complacer a la gente, sabiendo que la gente muchas veces no está en lo correcto.
Ahora comparémoslo con David vea 1 Samuel 24: 4 ¿se acuerda usted de este episodio hermano, que fueron dos veces? pero vamos a ver este nada más. Entonces los hombres de David ¿se acuerda usted cuando estaban metidos en esta cueva?, le dijeron: He aquí el día de que te dijo Jehová: He aquí te entrego a tu enemigo en tu mano, y harás con él como te pareciere. Y se levantó David y calladamente cortó la orilla del manto de Saúl. Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl. Y dijo a sus hombres: Jehová me guarde de hacer tal cosa contra mi Señor.
¿Iglesia usted ve la diferencia? ¿dígame por favor si la mira? Claro, Saúl era, él quería complacer a la gente; – ¿Entonces no los matamos pues? – No, no lo matemos – ¿entonces nos llevamos el motín? – llevemoslo. David, y no solamente eso, mire usted; me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el ungido de Jehová, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido de Jehová.
1 Samuel 24: 7 Así reprimió David a sus hombres con palabras, – No señores, no vamos a hacer lo que ustedes quieran. Y eran sus valientes y era su gente de confianza y eran aquellos que lo habían apoyado en los momentos más difíciles de su vida. Pero David era líder, era guía del pueblo, no se dejaba guiar.
Y tenga mucho cuidado; porque hay personas que se dejan llevar por los compañeros de trabajo, se dejan llevar por lo que dice la familia, se dejan llevar por lo que dice el marido, se dejan llevar por lo que dice la mujer. Y aquí tenemos una gran diferencia entre uno y el otro.
Ahora número once; David amaba la casa de Dios; mire cuando yo hablo de esto hermanos, Salmos 26: 8 dice la palabra: Jehová, la habitacion de tu casa he amado, y el lugar de la morada de tu gloria.
Yo tenía dieciocho añitos cuando el pastor general, hermano Toby, me pidió que me fuera a vivir a la iglesia, al templo. Habían dos habitaciones, como estábamos en la colonia la sultana en ese entonces; una habitación era la mía, la otra era la de él. Y yo vivía ahí, me acuerdo que yo predicaba los domingos y los sábados.
Mire, en las iglesias se dice un montón de cosas; los templos. Aquí también la hermana que ha limpiado acá, nos ha dicho un montón de veces que aquí se oyen ruidos a la medianoche, y es cierto se oyen, pero yo a los muertos no le tengo miedo, a los vivos les tengo miedo. Y bueno, yo me acuerdo que era las once de la noche y yo me iba a meter al templo, donde yo predicaba el siguiente día, y yo pasaba momentos tan especiales ahí yo solito, medianoche; – Señor mañana se va a predicar tu palabra en este lugar, toca corazones, transforma vidas, que almas preciosas vengan a tus pies. Dieciocho añitos tenía.
Y luego después de eso, nos movimos a donde está el templo hoy e hicieron mi cuarto; hicieron dos cuartos; teníamos mi cuarto de un lado, en el centro era donde se contaba la ofrenda, y luego del otro lado el cuarto del pastor.
Y ahí viví los últimos años, yo los últimos nueve años, diez años de mi vida antes de venir aquí; es decir de 1979 póngale usted al 1988 yo los viví en el templo en la iglesia, excepto en los últimos meses de casado que mi esposa me sacó de la iglesia para llevarme a un apartamento que todavía conservamos allá en El Salvador.
Pero yo viví en el templo, entonces yo tengo un amor tan especial por el templo como usted no tiene idea, lo aprendí lo aprendí, y la otra cosa es esto; vivir ahí jeje era muchísimo mejor que vivir dónde yo había vivido. Tenía todo pero todo lo que yo podía necesitar y fueron años.. también ya casados han sido felices ¿verdad? [ríen] pero ¡Qué tiempos aquellos! ¡Qué felicidad!, es que era Dios y yo, nadie más.
El día domingo era una locura, porque desde muy temprano en la mañana; cinco y media de la mañana, comenzaba el gran relajo y todos mis líderes de los valientes de David se llegaban a meter a mi cuarto ¿verdad? y el hermano Toby se molestaba, y no le gustaba incluso que me dijeran David mis líderes, – No, no tienen porque qué decirte.. Tienen que decirte pastor y que no sé qué, no sé cuánto.
Pero eran tiempos tan especiales, entonces yo tengo un amor especial por la casa del Señor, ¡me encanta! por eso cuando está cerrada la casa de Dios ¡Me hace falta! ¡me hace falta! Yo vengo solito y me meto.. ¡Me encanta! ¡lo disfruto!. David tenía un amor muy especial por la casa de Dios.
Jehová la habitación de tu casa he amado, Y el lugar de la morada de tu gloria. Porque claro por las cosas que pasan las cosas que suceden en la casa del Señor.
En el Salmos 27:4 David dijo: Una cosa he demandado a Jehová, y ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová y para inquirir en su templo.
Entonces lo que yo me pongo a pensar es esto; David que es el gran guerrero, el hombre por el cual no dejó Dios que le construyera casa, decía: – Híjole mano, si yo tuviera que ir a la guerra a pelear contra esos filisteos incircuncisos ó quedarme en la casa de Jehová para contemplar la hermosura de Jehová y para inquirir en su templo; yo preferiría quedarme en la casa de Jehová ¡Qué lindo eso!
Fíjate que David amaba tanto la casa del Señor hermanos, que le ofreció a Dios construirle casa y usted debe recordar que Dios le dijo: Wow nadie me había ofrecido eso, nadie me la había ofrecido, y mira lo que tú me estás ofreciendo.
Bueno amaba la casa de Jehová, fue generoso con la casa de Jehová también, en 1 Crónicas 29 : 2 cuando Dios le dijo a David que él no iba a construir el templo porque había derramado demasiada sangre, entonces David dijo: Bueno no lo voy a construir, pero si puedo dar todas mis riquezas para el templo, dice: Yo con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, y me encanta eso cuando él se adueña del Señor. Oro para las cosas de oro. Necesitamos oro hermanos para las cosas de oro; – Aquí está decía David. Necesitamos plata para las cosas de plata; – aquí está También bronce; – aquí está. Hierro; – no hay problema. Madera; – no hay problema. Piedra de ónice, preciosas, negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, piedras de mármol, y dice en abundancia, sólo faltaba que David dijera: otra cosita no quieren? Todo.
1 Crónicas 29: 3 Además de esto, por cuánto tengo mi afecto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular [o sea que uno el tesoro del pueblo y tesoro particular] oro y plata que, además de todas las cosas que he preparado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios.
Yo no quiero hablar de esto, en cuestiones meramente personales ¿ok? No quiero hacerlo; pero las personas que están cerca saben como mi familia hemos bendecido esta obra mucho más allá de lo que hemos podido. Es por eso que a mí las críticas de la gente me tienen sin cuidado, pero sin cuidado.
En primer lugar porque yo jamás en la vida me ha robado cinco centavos de esta iglesia, en la vida. Yo puedo levantar mi cara y mi cuello lo más que usted se imaginan en cuestiones de dar para el reino. Jamás hemos detenido nuestra mano para la casa del Señor, nunca, y hemos dado más allá de nuestras fuerzas, para la gloria de Dios, nunca hemos escatimado nada, en absoluto. Y yo me he manejado un principio que es: Para el Señor lo mejor, para el señor lo mejor.
Jamás he gastado yo más en, por ejemplo fíjate, si yo le voy a dar a mis hijos un regalo de quinientos dólares, yo le tengo que dar a Diós algo que valga mucho más que eso, claro la Biblia no dice que hay que hacerlo, es simple y sencillamente algo que está mi corazón, así.
Por eso es que Dios ha sido tan consentidor con muchos de nosotros pues, en muchos aspectos porque Dios conoce el corazón ¿se acuerda? Dios conoce el corazón. Y personas que hablan, que han hablado, yo simple y sencillamente digo que Dios los bendiga, que Dios los bendiga.
El día que un viejo loco apareció por ahí diciendo que yo estaba robando, yo le dije: Mire si usted cree que yo lo estoy haciendo, ¿porque no va a la policía hombre? y denuncieme, dígale allá mire que hay un viejo que está robando, no viejo no, un pastor que está robando, vaya y denuncie.
Pero eso sí, aquí no está usted en su país ¿verdad? que usted va a hablar estupideces, vaya y compruebe lo que está diciendo y si le comprueban a usted todo lo contrario, porque hay gente mala, en todos lados hay gente mala, en todos lados.
Y bueno tener amor en la casa de Dios tener ser generoso con la casa del Señor y ahora quiero mencionarle un dato nada más porque ahora sí vamos a terminar. Solamente tres reyes gobernaron sobre toda la nación de Israel que fue: Saúl, David y Salomón después de ellos, treinta y nueve reyes más gobernaron, lo que se conoció como Israel y Judá; es decir podríamos decir que fueron prácticamente cuarenta y dos los reyes de Israel.
Ahora sabe usted que de los treinta y nueve reyes que reinaron sobre Israel y Judá ¡escuche esto! Treinta y tres reyes, treinta y tres adoraron ídolos. David jamás adoró a un ídolo.
Ahora Dios, porque usted puede decir; bueno porque yo no me acuerdo que Saúl haya adorado una estatua. Yo no me acuerdo que Saúl haya adorado un pedazo de palo, no lo hizo. Pero Dios le dijo estas palabras: Por tu rebelión y obstinación es como pecado de idolatría. Dios se lo dijo a Saúl.
La obstinación, la rebelión la desobediencia, era como pecado de idolatría, o sea yo le estaba diciendo mira los pecados que tú has cometido en contra mía porque tú me desobedeces, porque tú no tienes temor de mí porque tú haces lo que tú quieres es peor que haberse arrodillado delante de un ídolo. Es peor, ¿por qué? porque Saúl tenía un ídolo; él mismo; un hombre ególatra.
Fíjate que cuando Samuel, y se me olvidó mostrar ese versículo, cuando Samuel le dijo ¿que porque no había matado a la gente?, ¿porque no había hecho esto? Saúl llegó a un punto hermanos, que le dijo estas palabras a Samuel: Oye le dijo ¿por qué no me exalta delante de mis ancianos? ¡imagínate! lo enfermo que estaba el pobre, un hombre que quería quedar bien con todo el mundo, pero no le importaba lo que Dios pensara de él hermano ¿cómo es posible? si yo quiero quedar bien delante de una congregación y me vale lo que Dios piense de mí.
Si yo quiero quedar bien delante de la gente y no me importa qué es lo que Dios piensa al respecto.
David nunca adoró ídolos, David amaba la ley de Jehová, amaba la oración; era un hombre compasivo, sensible, piadoso, consciente ¿Se acuerda que no quería que mataran a los de Keyla por su culpa? Estas y muchas otras cosas más son las razones por las que David era el hombre conforme al corazón de Dios.
En el desierto escribió muchos salmos, siempre tuvo una alabanza en sus labios aún en medio de la soledad. El desierto en la Biblia es un símbolo de soledad, de sed espiritual, de abandono, de tristeza, de melancolía, de frustración, de desolación, miseria, depresión, de prueba, de sufrimiento, y nunca escuchamos a David quejarse contra el Dios de la gloria.
Ahora si yo pudiera mencionar cuatro cosas, cuatro, por las que David a parte de todas las que he mencionado que las envuelve y que están allí metidas en estas cuatro palabras que voy a decir; me atrevería a decir que la primera fué: Obediencia;
Yo me voy a buscar a un hombre que haga lo que yo quiera, obediencia, la primera, y esa fue la razón por la que desechó a Saúl, por desobediente, entonces la primera obediencia.
La segunda: Amor; David amaba a Dios, entonces fíjate, David obedecía a Dios porque lo amaba. Es que yo puedo imaginarme el día que llegó Samuel a la casa de Isaí y pasaron a los siete hijos y Samuel dijo: No pues, no, no no son estos ¿no tienes otro más? Si tengo uno, pero es un pequeñito que anda por ahí trabajando. – Llámenlo. Yo me pregunto ¿Qué estaba haciendo Davicito en ese momento? ¿cuidando a las ovejitas? ¿sabe que creo que estaba haciendo David? Cantando, cantándole a Dios.
Entonces a lo largo de la vida de David usted muestra amor, y mis queridos y amados hermanos sin amor no hay el resto, sin amor no hay obediencia, sin amor no hay generosidad no, no hay ¡imposible! y no hay, es que tiene que amar, recuérdese; para dar hay que amar. ¿Porque a los hijos los inundamos de todo lo que quieren? para dar hay que amar, el que no dá no ama.
Entonces la primera es obediencia, la segunda es amor, la tercera es: Adoración; El dulce cantor de Israel, y la cuarta si pudiera envolver en estas cuatro palabras, la cuarta es: Comunión. Es que no se puede escribir tanto salmo hermano si nos está en una íntima comunión con Dios, no se puede decir tantas cosas bonitas si no se está en íntima comunión con Dios, no se pueden ganar tantas batallas si no hay obediencia, si no hay amor, si no hay adoración, si no hay comunión.
No se puede huir por quince largos años en el desierto y de cueva en cueva y hacerse como que está loco y pasar tanta tribulación y llegar al punto de que sus mismos valientes lo quieren apedrear, no se puede pasar todo eso y escribir Jehová es mi pastor nada me faltará, y escribir el bien y la misericordia de Jehová me seguirán todos los días de mi vida.
Es que no se puede vivir de esa manera; sin obediencia, sin amor ,sin adoración y comunión. Es que no se puede tener un corazón sensible, un corazón generoso, un corazón de misericordia, que en lugar de buscar la vida las personas busca salvarlas y bendecirlos, y decirle a Mefiboset: A partir de este día vas a comer a la mesa del rey como uno de mis hijos y a partir de este día te vamos a devolver todas las cosas, todos los terrenos, todo lo que le pertenecía a tu abuelo Saúl, te lo vamos a regresar. Eso es misericordia.
Ojalá mis amados hermanos, y quiero terminar con esto, quiero decir esto que voy a decir y es bien importante y por favor no quiero que pensemos que lo que hemos hablado en estas dos semanas es una exaltación de David por encima de la glorificación de Dios, de ninguna manera.
Yo no quiero ser como David para tener todo lo que tuvo David, la verdad que yo no quiero estar metido en una batalla como estas, la verdad que no. Pero si me llama la atención cómo una persona puede obedecer a Dios, amar a Dios, adorar a Dios y tener comunión con Dios, ¡Qué cosa más linda! Es por esa razón que Dios dijo que David era el hombre conforme a su corazón.
Vamos a orar, demos gracias al Señor; Padre el estudio de la vida de David es un estudio enriquecedor, una vida espectacular, honesta en el sentido de contarnos los éxitos como los fracasos, los momentos altos, como los momentos bajos. Te alabamos Señor por este rey; el rey David y por todas las enseñanzas que hemos obtenido de su vida.
Los principios que obtenemos por medio de tu palabra Señor, que siguen siendo tan reales en nuestros días.
En nuestro diario caminar Padre, recordamos cada una de las cosas de este hombre y pedimos que nos ayudes a hacer tu voluntad; obedecerte, amarte, adorarte y tener comunión en tu maravillosa presencia ¡Qué maravilla Señor! Ayúdanos a querer, ayúdanos a buscar esta intimidad contigo.
Mientras todos oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón pero quisiera hacerlo en esta noche, usted dice; pastor yo necesito a Dios en mi vida, yo quiero entregarle al Señor mi corazón. Si hay alguien entre nosotros que nunca antes ha recibido a Cristo pero quisiera hacerlo hoy, la invitación es para usted.
Si hay alguna persona que dice; Pastor yo necesito al Señor. Yo le invito para que se ponga de pie para que levante su mano, alguien se va a acercar para ayudarle a hacer esta oración, que es la oración que te acerca a Dios y le ayuda a usted a ponerse a cuentas con el Señor.
Usted que nos mira por redes sociales, usted también puede tener un encuentro personal con Jesús, dígale: Señor en este día te pido perdón por mis pecados, reconozco que soy pecador y te pido Señor que a partir de este día me ayudes a caminar de la mano contigo.
Si usted hizo esta oración, yo quiero animarle a crecer en el conocimiento de Dios y de su santa y bendita palabra. Padre querido, despídenos con tu paz, con tu bendición, en el nombre de Jesús oramos. Amén y amén.
¿Por qué David era el hombre conforme al corazón de Dios? (Parte 2)
enero 19, 2022 – 7:00PM | Hechos 13: 22 | Dr. David Rodriguez
Etiquetas: enero 2022, hechos, pastor david rodriguez, transcripcion, vida del rey david
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TRANSCRIPCIÓN
Bueno vamos a abrir la palabra del Señor, en el libro de los Hechos 13: 22 dice la palabra del Señor así: Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dió también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón quien hará todo lo que yo quiero.
En eso estamos, espero que este sea el último estudio, es el número treinta y seis de la vida del rey David y este es el número dos de ¿Porque David era el hombre conforme al corazón de Dios?. Dios le dijo a Samuel: Me he buscado a un hombre conforme a mi corazón, hablando acerca de David.
Y ahora tenemos acá, en el nuevo testamento; hablando acerca del rey David; un hombre conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero.
Bueno que Dios bendiga esta palabra.
Dios no mira las apariencias Dios mira el corazón eso lo dijimos la semana pasada.
Hay una época en la vida, donde nosotros apreciamos más la apariencia de la gente, de hecho en nuestra juventud cuando se anda buscando novia o se anda buscando novio; muchas veces es la apariencia. Yo conozco latinos y latinas que le ponen los ojos a una canadiense ó a un canadiense porque quiere mejorar la raza dicen.
A medida que pasan los años nos damos cuenta que de la apariencia de la gente no se come. A medida que avanzamos en años y vemos a una mujer guapa, a una mujer bonita, la pregunta que uno se hace es: ¿Que habrá en ese corazón? La verdad.
Y es probable que en tiempo de juventud uno pueda pagar el precio, el precio de vivir al lado de una mujer bonita, pero que tenga un carácter del demonio.
Y cuando hablamos de por qué David era conforme al corazón de Dios, tiene mucho que ver, no es una sola razón. Y le repito si usted encuentra alguna novedad de lo que ha escuchado el miércoles pasado y este miércoles, ¡me avisa por favor!, porque le he dado vuelta a todas las cosas y bueno.
Dios no mira la apariencias, Dios mira el corazón, Dios no anda buscando gente perfecta; dijimos, David fue un hombre imperfecto, Dios no anda buscando a un hombre santo; David es un hombre pecador, Dios escogió a Saúl y lo desechó, Dios escogió a David y lo respaldó siempre.
Y luego hicimos una reflexión de que Dios no escoge gente calificada, sino que Dios califica a gente escogida. Y entre las cosas que hablamos de porque creemos que David es el hombre conforme al corazón de Dios; hicimos una comparación entre David y Saúl, porque Saúl pues fue el primer rey de Israel; comenzó bien pero terminó mal, no tenía temor de Dios, y hablamos lastimosamente de muchas de las cualidades o más bien de las cosas que hizo Saúl que no agradaron a Dios. Saúl fue un rey rebelde y necio que desobedeció a Dios en todo.
Y bueno pues, las cualidades que considero personalmente que Dios vió en David son las que vamos a estudiar. La semana pasada, estudiamos algunas, hoy vamos a estudiar otras. La primera: Las intenciones del corazón. A Dios no lo engaña nadie; usted me puede engañar a mí, usted puede engañar a quien quiera, a su abuela puede engañarla, pero a Dios no le engaña nadie y Dios mira las intenciones del corazón, y cuando hablamos de intenciones del corazón, Dios sabe si usted es honesto o es deshonesto, Dios sabe si es honesta o es deshonesta.
Usted puede venir a mostrar una cara aquí a la iglesia y en realidad su cara es otra fuera de la casa del Señor, Dios sabe si usted.. Bueno todo lo que hablamos acerca de las intenciones del corazón y Dios vió eso en la vida de David.
Otro de los aspectos importantes; nos dimos cuenta que David era un hombre de alabanza, un hombre de adoración. Escribió cosas maravillosas porque grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; y de ser temido sobre todos los dioses. Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; contaré todas sus maravillas. Me alegraré y me regocijaré en tí; cantaré a tu nombre, oh Altísimo.
David danzó cuando traían el arca a Jerusalén, esta adoración, esta alabanza de David hermanos es la que ha servido de base para la adoración a lo largo de las generaciones; porque David escribió los salmos, muchos de los salmos y todas estas cosas lindísimas que son lo que han motivado a grandes artistas y grandes compositores a escribir alabanza y adoración al Señor.
En tercer lugar hablamos de gratitud; David fue un hombre, hay salmos de acción de gracias: Bendito sea Jehová, mi roca, quien adiestra mis manos para la batalla, y mis dedos para la guerra. Un hombre que mostró gratitud al Señor todo el tiempo.
Y luego nos quedamos en el número cuatro en el arrepentimiento.
Hay dos cosas que Dios mira en el arrepentimiento, hermanos dos situaciones: la número uno, es el reconocimiento; es decir, he fallado porque he fallado, y luego la enmienda. Saúl dijo: ¡he fallado! pero justificó su pecado ¿verdad? – Es que no fuí yo. -Es que fué el pueblo. – Es que no soy yo, es que es tal cosa, es que.. [todo se justifica]. Eso es una cosa que Dios mira.
Y luego la segunda cosa con relación al arrepentimiento; es que el arrepentimiento tiene que ser genuino ¿verdad?, Si usted dice: – Si me arrepiento. Y el arrepentimiento le dura un día, le dura dos días, le dura una semana; ¡escúcheme! no es arrepentimiento; usted está jugando, está jugando con usted mismo, está jugando con Dios y eso ya pasó cuatrocientos ochenta y cuatro mil veces. Entonces Dios dice esto no es una persona confiable ¿verdad? porque se arrepiente y luego a la vuelta de tres días regresamos otra vez a lo mismo.
Y David fue un hombre que se arrepintió cuando cometió su terrible pecado con Betsabé y mandó matar a Urías Heteo, y de ahí tenemos el surgimiento del salmo capítulo cincuenta y uno.
Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad y seré más blanco que la nieve. Y tenemos todo ese salmo maravilloso de David mostrando un arrepentimiento genuino.
Y bueno ahora vamos al número cinco, y solamente son ciento cuarenta y cuatro les dije. Mira tal vez logré explicarme esto; usted se da cuenta que uno puede decir esta persona es de buen corazón, aquí en inglés dicen: This is a good man, una persona de buen corazón.
Ya hablamos de las intenciones, ahora quiero hablar de una persona de buen corazón; David era una persona de buen corazón ¿en qué sentido podemos decir? Quiero hablarle de tres cositas bien sencillas; usted se dio cuenta que Saúl lo buscó para matarlo por todos lados. Se acuerda que un día le dijo: Si el rey ha salido a buscar una pulga. O sea me andan buscando en cada cueva, me anda buscando en cada lugar.
Entonces fíjate, hubo en dos oportunidades donde David se pudo vengar de Saúl ¿Se acuerda usted de eso? y no lo hizo, ¿qué significa eso? David no era una persona vengativa.
Ahora, ¿nosotros hermanos? mmmm con la misma moneda ¿verdad? Queremos vengarnos de cosas malas que nos hace la gente. Y sí no tenemos control hermano, podemos caer en esa situación. David no tenía ese problema.
En segundo lugar David nunca permitió ¡escucha esto! que los celos que tenía Saúl de él, lo amargáran. Hoy en día hay gente amargada, hay personas que piensan que todo el mundo quieren el mal para ellos, So what. Pero David se pudo haber amargado y dijo: – No, yo para ser cristiano mejor no, mire todo lo que me ha pasado. [No sé amargó].
Otra cosa también amados míos; David nunca guardó rencor ¿Se acuerda usted, que cuando Saúl dijo que el que matara a Goliat le iba a dar a su hija? Fíjate que no se la dieron, se la dieron a otro, él no tuvo rencor. Entonces es una persona de buen corazón.
¿Usted conoce gente que se resiente fácilmente por todo? Usted conoce personas que; – es que a mí el que me las hace las paga. ¿Usted cree que eso es un buen corazón? Una persona así Dios no le podría llamar; este hombre, esta mujer es conforme a mi corazón.
Entonces ahí tenemos a una persona de buen corazón; el caso de David.
Bueno número seis, porque quiero avanzar y no quiero decir las mismas palabras de la semana pasada; David era un hombre humilde y esto me encanta, era un hombre humilde al cual nunca se le subieron los humos a la cabeza, recuerde que lo estamos comparando con el rey Saúl.
En 1 Samuel 18: 8 [abusado con la biblia por favor] fíjate qué en 1 Samuel 18: 8 Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles y a mí miles; no le falta más que el reino.
Mire usted aquí hay celos, aquí hay envidia ¿ok? pero a pesar de que esa canción se hizo famosa en tiempos de David y Saul. Y desde aquel día Saul no miró con buenos ojos a David.
¿Que quiere decir eso hermanos? Usted cree que David dijo: -¡Ah mira! Mira lo que la gente dice de mí. – Wuao que barbaro – Ese soy yo ahora. De ninguna manera, a él no se le subieron los humos a la cabeza; es decir, mire hermano, fue un hombre humilde en todo tiempo y no hay cosa mas linda que eso en realidad, es que mire hermano que digan; fulano es grande y mengano tal cosa ¡Gloria a Dios, hombre! ¿y cual es el problema de eso? Si una de las cosas que debemos entender nosotros es que Dios nos da una posición a cada uno en la vida ¿me entiende? y tenemos que aceptarla pues.
Hay cantantes, hay cantantes de cantantes, hay unos que son mejores que otros, ¡Gracias a Dios hermano! hay unos predicadores que predican mejor que otros,¡Gloria a Dios hombre! ¡Gracias al Señor! Hay pastores que tienen unas iglesias que son de miles, de miles ¡Bendito sea el nombre del Señor hermano!
David fue humilde, él no crea usted que andaba pues ¿verdad? Imagínese si hubiese tenido facebook David; con esto, con esto que dijeron: -Oh mira David mató a diez miles. No hermano, eso era para engrandecerse. Y el otro que tenía un corazón chueco. – Ohh solamente le falta el reino, y entonces para que no me quite el reino mejor me lo echó al plato, lo voy a matar.
Y esas son las diferencias, ahora recuerde una cosa; Dios al altivo, lo mira de lejos; al humilde mira de cerca. Por eso es que es bien pero bien importante aprender a ser humildes en nuestra vida cristiana. David fue una persona humilde.
Fíjese que en una oportunidad en 1 samuel 18: 18 cuando el rey lo quería hacer su yerno, mire lo que dijo él: ¿Quién soy yo? ó ¿que es mi vida ó la familia de mi padre en Israel para que yo sea yerno del rey? Es decir, el nombre estaba ubicado, y eso es una cosa muy buena.
Número siete; David nunca se promovió a sí mismo, y esto me gusta, esto me encanta, él nunca se promovió a sí mismo, él nunca dijo: Yo soy David. Sin embargo Saúl, tenía un problema serio de identidad.
Fíjate que las palabras de David; Jehová es mi roca, Jehová es mi fortaleza, Jehová es mi libertador, Jehová es mi pastor, Jehová unge mi cabeza con aceite, Jehová es mi luz y mi salvación, Jehová es la fortaleza de mi vida, Jehová roca mía y castigo mío, mi Dios en quien confiaré, mi libertador. Jehová mi escudo, la fuerza de mi salvación.
Fíjate que él no puso a la obra del reino David Ministry para exaltarse a él como persona, nunca se promovió a sí mismo; porque es importante entender, que la única persona que merece exaltación cuando se trata del reino de Dios es Jehová, Dios el único, es el único.
Y viera que yo personalmente tengo un problema serio con las nuevas regulaciones de liderazgo como usted no tiene idea oye, pero serio, porque todos los líderes de la actualidad dicen que uno tiene que estimular a los servidores, de que uno tiene que hacer aquí y que tiene que hacer allá. Yo digo que está bien que hagan eso en una compañía que es secular, pero siervos inútiles somos, eso es lo que somos siervos inútiles.
Yo por eso, a mí en lo personal, a mí no me gusta, aquí el día del pastor no se celebra, nunca lo hemos celebrado, bueno una vez lo celebramos y me arrepiento eternamente ¿ok? y yo lo dejé a un grupito que lo celebrara y me arrepiento, pero me arrepiento de haberlo hecho.
El único que merece honra y gloria en este púlpito es Dios nada más, nosotros somos instrumentos en las manos del Señor y san se acabó ¿ok? Bueno, entonces David nunca se promovió asimismo.
Otro aspecto grandioso del rey David; Misericordia, entonces recuérdese que cuando comenzamos el estudio de la semana pasada dijimos; bueno si queremos saber nosotros porque David tenía el corazón conforme al corazón de Dios ¿qué es lo que tenemos que estudiar? ¿el corazón de David o el corazón de Dios? y usted se da cuenta que las cualidades que encontramos en David las encontramos también en Dios. Dios misericordia, David misericordia.
¿Se acuerda usted cuando David dijo: ha quedado alguno de la casa de Saúl a quien haga yo misericordia por amor de Jonathan? Imagínate que lo primero que hacen los reyes es matar a toda la descendencia del rey anterior, esto es lo primero que hacen, para evitar que se vayan a levantar. Él no hizo eso; él dijo ¿habrá quedado alguien de la casa de Saúl a quien yo haga misericordia? por eso digo David tenía un buen corazón, mi hermano.
Otro de los aspectos importantísimos, pero tremendos de David era su confianza en Dios, y eso hermano mío lo vemos en 1 Samuel 17: 45 Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; más yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú ha provocado.
¡Dios mío! hermano, ¡que barbaridad!, ¡que confianza! y déjeme decirle que en la vida como cristianos que somos, tenemos que confiar en Dios, usted va a pasar dificultades. Mire yo hoy estuve contestado unos correos y en realidad le digo, mire hermano, si es que leía uno de los correos esta tarde; pastor y me pasó esto y luego me pasó aquí y luego me pasó allá y no me lo va creer pero me pasó después tal cosa, yo dije: – juela mano, a este brother hay que hacerle una limpia ¡qué barbaridad! tanta cosa, tanta situación. Y me decía ya no puedo más pastor, ya no puedo más. Hay que confiar en Dios, hay que confiar en Dios.
Y es mas le voy a decir otra cosita; hay que confiar en Dios esperando lo mejor, aunque es posible que no reciba lo que usted quiera, porque solamente de esa manera Dios puede saber si nuestra confianza en él es real, es incondicional.
Yo voy a confiar; esto es lo que yo quiero, esto es lo que yo le estoy pidiendo a Dios, ¡Señor por favor!, ¡Señor por favor! ¡Yo confío en tí!, ¡Yo confío en tí!. Pero si la cosa no sale como yo estoy esperando; ¡Bendito sea el nombre del Señor! Yo voy a seguir confiando en Dios. Y la confianza que tenía David en Jehová con ese versículo que tenemos hermanos, suficiente.
En el salmo 37 No te impacientes a causa de los malignos, confía en Jehová, deleitate en Jehová, encomienda a Jehová tu camino, cuando el hombre cayere no quedará postrado, porque Jehová sostiene su mano. Él mismo dijo joven fuí y envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan.
Confianza, confianza, confianza en Dios.
En el Salmo 27: 3 mire las palabras de David, que por cierto hay un corito de este salmo: Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá mi corazón. [El pastor canta] ¿Te das cuenta? Aunque un ejercito acampe contra mí, no temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, yo estaré confiado. Es que a lo que yo me refiero es que; estas palabras hermanos son maravillosas, en lugar de: Ya no puedo, ya no aguanto más, yo no sé qué está pasando conmigo, yo ya no sé ni qué creer, yo ya me estoy muriendo.
Mire aunque un ejercito acampe contra mí no temerá mi corazón; aunque contra mí se levante guerra, yo estaré ¿que dice la palabra? confiado. Cualquiera que sea la situación; aunque se esté muriendo mano, ¡confiado en el Señor!.
Hay situaciones en la vida que son así, My goodness! Hay cosas en la vida que son así y yo he pasado un montón que para que le cuento, un montonazo.
Me acuerdo que cuando comenzamos el proyecto del templo y los hermanos me dijeron: Pastor si usted nos promete que va a estar con nosotros hasta que salgamos con todo esto, le entramos. Pero si a la vuelta de unos años usted dice; ¿bueno, saben que? de verdad yo pues estoy viendo otros pastos que son más verdes que estos.
Y déjeme decirle que cuando firmamos aquí el documento, delante de toda la iglesia el ocho de marzo del dos mil veinte fue ¿verdad? Veinte sí, y la siguiente semana se cerró la iglesia, yo ví pastos más verdes en otras partes del mundo. Y conozco pastores.. Claro, ya habíamos firmado – ¿Cómo es posible? ¿por qué se metieron a un compromiso tan grande? ¿Y ahora cómo van hacer? y ahora aquí y ahora allá.. Y claro mis aguites los he pasado, ¿verdad? mis aguites los he pasado en gran manera.
Yo creo que mi esposa ni sabe, espero, de que nuestra casa está puesta como una garantía por ese préstamo. Como ella me dice a mí: Ahí tú te encargas. Entonces yo me encargué. Eso ¿sabe que demuestra eso? la confianza que tenemos en el Señor y si se puede ¡Bendito sea el nombre del Señor! y si en en el camino le dice; no lo que yo tengo para ustedes es otra cosa ¡bendito sea el nombre de Dios también! Pero en todas las circunstancias de la vida hay que mostrar confianza, en todas.
Hace un año que me estaba muriendo por el covid-19 el primero, este segundo fue más tranquilo, pero el primero, ¡hijole mano!, yo dije: – Se acabó – Hoy voy a colgar la Biblia. Porque los pastores no colgamos los guantes ni los tenis, colgamos la Biblia. – Se acabó. ¿Pero sabe que? no hay cosa más linda que decirle a Dios: – Yo estoy listo mano. Si voy a ver tu rostro Señor y voy a ver Tú gloria y voy a caminar por esas calles de oro; monós, como dicen en mi rancho.
Por supuesto uno está apegado a un montón de cosas ¿verdad? y cuestiones y ¿Que va hacer? si ver a Dios es mejor que cualquier otra cosa, estar ante la presencia del Señor es mejor que cualquier cosa, y hay algo que yo aprendí y lo aprendí difícil, que Dios me lo mostró un día, y es el hecho de que yo me preocupaba por mi familia, y Dios me dijo a mi corazón un día, me dijo Dios: – ¿Tú crees que yo no puedo cuidar a tu familia mejor de la que la cuidas tú? Y yo dije: – ¡nos vemos mano!, tiene toda la razón vámonos yá. Y me trajo de regreso, fíjese. Me dijo: pues no, hay que ir a pagar allá abajo.
Ahora hay otra cosa que es bien importante, entre las las características que estamos viendo, porque es una comparación de Saúl que Dios lo desechó y David que Dios amó.
Fíjate que Saúl, lo acabamos de leer hace un ratito; Saúl era el tipo de persona que era people pleaser, él quería complacer a la gente, ese era el tipo de persona Saúl, Saúl quería quedar bien él con la gente y hacer lo que la gente quería. Y en la vida hermanos, en la vida nos vamos a encontrar: Con, hacemos lo que la gente quiere ó hacemos lo que Dios quiere.
Y Saúl se encontró en una situación. Miren el capítulo 1 Samuel 15: 9 quiero mostrarle varias cosas, eche un vistazo si tiene su biblia por favor, ahora fíjate ¿se acuerda usted lo acabamos de leer, que Dios lo mandó para que mataran a ese pueblo? porque ese pueblo era idolatra por completo. Y no lo hicieron, ahora mira en el versículo nueve:
Y Saul y el pueblo perdonaron a Agag, entonces el contraste que quiero que vea en este momento es lo siguiente: Saúl se dejaba llevar por la gente, David era líder, David guiaba a la gente, David guiaba no se dejaba llevar, aunque hubiera gente de influencia porque en todas las congregaciones hay gente de influencia.
El versículo 1 Samuel 15: 15 Y Saúl respondió: De Amalec los han traído; ¡oiga! porque el pueblo perdonó lo mejor de las ovejas. Una vez más, el pueblo.
Y mira el versículo 1 Samuel 15: 24 hermanos, Entonces Saúl dijo a Samuel: Yo he pecado pues he quebrantado el mandamiento de Jehová y tus palabras, y mire usted la razón que dió de su pecado “porque temí al pueblo y consentí a la voz de ellos”. Wow ese era Saúl. Saúl era el tipo de persona que quería complacer a las multitudes, quería complacer a la gente, sabiendo que la gente muchas veces no está en lo correcto.
Ahora comparémoslo con David vea 1 Samuel 24: 4 ¿se acuerda usted de este episodio hermano, que fueron dos veces? pero vamos a ver este nada más. Entonces los hombres de David ¿se acuerda usted cuando estaban metidos en esta cueva?, le dijeron: He aquí el día de que te dijo Jehová: He aquí te entrego a tu enemigo en tu mano, y harás con él como te pareciere. Y se levantó David y calladamente cortó la orilla del manto de Saúl. Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl. Y dijo a sus hombres: Jehová me guarde de hacer tal cosa contra mi Señor.
¿Iglesia usted ve la diferencia? ¿dígame por favor si la mira? Claro, Saúl era, él quería complacer a la gente; – ¿Entonces no los matamos pues? – No, no lo matemos – ¿entonces nos llevamos el motín? – llevemoslo. David, y no solamente eso, mire usted; me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el ungido de Jehová, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido de Jehová.
1 Samuel 24: 7 Así reprimió David a sus hombres con palabras, – No señores, no vamos a hacer lo que ustedes quieran. Y eran sus valientes y era su gente de confianza y eran aquellos que lo habían apoyado en los momentos más difíciles de su vida. Pero David era líder, era guía del pueblo, no se dejaba guiar.
Y tenga mucho cuidado; porque hay personas que se dejan llevar por los compañeros de trabajo, se dejan llevar por lo que dice la familia, se dejan llevar por lo que dice el marido, se dejan llevar por lo que dice la mujer. Y aquí tenemos una gran diferencia entre uno y el otro.
Ahora número once; David amaba la casa de Dios; mire cuando yo hablo de esto hermanos, Salmos 26: 8 dice la palabra: Jehová, la habitacion de tu casa he amado, y el lugar de la morada de tu gloria.
Yo tenía dieciocho añitos cuando el pastor general, hermano Toby, me pidió que me fuera a vivir a la iglesia, al templo. Habían dos habitaciones, como estábamos en la colonia la sultana en ese entonces; una habitación era la mía, la otra era la de él. Y yo vivía ahí, me acuerdo que yo predicaba los domingos y los sábados.
Mire, en las iglesias se dice un montón de cosas; los templos. Aquí también la hermana que ha limpiado acá, nos ha dicho un montón de veces que aquí se oyen ruidos a la medianoche, y es cierto se oyen, pero yo a los muertos no le tengo miedo, a los vivos les tengo miedo. Y bueno, yo me acuerdo que era las once de la noche y yo me iba a meter al templo, donde yo predicaba el siguiente día, y yo pasaba momentos tan especiales ahí yo solito, medianoche; – Señor mañana se va a predicar tu palabra en este lugar, toca corazones, transforma vidas, que almas preciosas vengan a tus pies. Dieciocho añitos tenía.
Y luego después de eso, nos movimos a donde está el templo hoy e hicieron mi cuarto; hicieron dos cuartos; teníamos mi cuarto de un lado, en el centro era donde se contaba la ofrenda, y luego del otro lado el cuarto del pastor.
Y ahí viví los últimos años, yo los últimos nueve años, diez años de mi vida antes de venir aquí; es decir de 1979 póngale usted al 1988 yo los viví en el templo en la iglesia, excepto en los últimos meses de casado que mi esposa me sacó de la iglesia para llevarme a un apartamento que todavía conservamos allá en El Salvador.
Pero yo viví en el templo, entonces yo tengo un amor tan especial por el templo como usted no tiene idea, lo aprendí lo aprendí, y la otra cosa es esto; vivir ahí jeje era muchísimo mejor que vivir dónde yo había vivido. Tenía todo pero todo lo que yo podía necesitar y fueron años.. también ya casados han sido felices ¿verdad? [ríen] pero ¡Qué tiempos aquellos! ¡Qué felicidad!, es que era Dios y yo, nadie más.
El día domingo era una locura, porque desde muy temprano en la mañana; cinco y media de la mañana, comenzaba el gran relajo y todos mis líderes de los valientes de David se llegaban a meter a mi cuarto ¿verdad? y el hermano Toby se molestaba, y no le gustaba incluso que me dijeran David mis líderes, – No, no tienen porque qué decirte.. Tienen que decirte pastor y que no sé qué, no sé cuánto.
Pero eran tiempos tan especiales, entonces yo tengo un amor especial por la casa del Señor, ¡me encanta! por eso cuando está cerrada la casa de Dios ¡Me hace falta! ¡me hace falta! Yo vengo solito y me meto.. ¡Me encanta! ¡lo disfruto!. David tenía un amor muy especial por la casa de Dios.
Jehová la habitación de tu casa he amado, Y el lugar de la morada de tu gloria. Porque claro por las cosas que pasan las cosas que suceden en la casa del Señor.
En el Salmos 27:4 David dijo: Una cosa he demandado a Jehová, y ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová y para inquirir en su templo.
Entonces lo que yo me pongo a pensar es esto; David que es el gran guerrero, el hombre por el cual no dejó Dios que le construyera casa, decía: – Híjole mano, si yo tuviera que ir a la guerra a pelear contra esos filisteos incircuncisos ó quedarme en la casa de Jehová para contemplar la hermosura de Jehová y para inquirir en su templo; yo preferiría quedarme en la casa de Jehová ¡Qué lindo eso!
Fíjate que David amaba tanto la casa del Señor hermanos, que le ofreció a Dios construirle casa y usted debe recordar que Dios le dijo: Wow nadie me había ofrecido eso, nadie me la había ofrecido, y mira lo que tú me estás ofreciendo.
Bueno amaba la casa de Jehová, fue generoso con la casa de Jehová también, en 1 Crónicas 29 : 2 cuando Dios le dijo a David que él no iba a construir el templo porque había derramado demasiada sangre, entonces David dijo: Bueno no lo voy a construir, pero si puedo dar todas mis riquezas para el templo, dice: Yo con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, y me encanta eso cuando él se adueña del Señor. Oro para las cosas de oro. Necesitamos oro hermanos para las cosas de oro; – Aquí está decía David. Necesitamos plata para las cosas de plata; – aquí está También bronce; – aquí está. Hierro; – no hay problema. Madera; – no hay problema. Piedra de ónice, preciosas, negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, piedras de mármol, y dice en abundancia, sólo faltaba que David dijera: otra cosita no quieren? Todo.
1 Crónicas 29: 3 Además de esto, por cuánto tengo mi afecto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular [o sea que uno el tesoro del pueblo y tesoro particular] oro y plata que, además de todas las cosas que he preparado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios.
Yo no quiero hablar de esto, en cuestiones meramente personales ¿ok? No quiero hacerlo; pero las personas que están cerca saben como mi familia hemos bendecido esta obra mucho más allá de lo que hemos podido. Es por eso que a mí las críticas de la gente me tienen sin cuidado, pero sin cuidado.
En primer lugar porque yo jamás en la vida me ha robado cinco centavos de esta iglesia, en la vida. Yo puedo levantar mi cara y mi cuello lo más que usted se imaginan en cuestiones de dar para el reino. Jamás hemos detenido nuestra mano para la casa del Señor, nunca, y hemos dado más allá de nuestras fuerzas, para la gloria de Dios, nunca hemos escatimado nada, en absoluto. Y yo me he manejado un principio que es: Para el Señor lo mejor, para el señor lo mejor.
Jamás he gastado yo más en, por ejemplo fíjate, si yo le voy a dar a mis hijos un regalo de quinientos dólares, yo le tengo que dar a Diós algo que valga mucho más que eso, claro la Biblia no dice que hay que hacerlo, es simple y sencillamente algo que está mi corazón, así.
Por eso es que Dios ha sido tan consentidor con muchos de nosotros pues, en muchos aspectos porque Dios conoce el corazón ¿se acuerda? Dios conoce el corazón. Y personas que hablan, que han hablado, yo simple y sencillamente digo que Dios los bendiga, que Dios los bendiga.
El día que un viejo loco apareció por ahí diciendo que yo estaba robando, yo le dije: Mire si usted cree que yo lo estoy haciendo, ¿porque no va a la policía hombre? y denuncieme, dígale allá mire que hay un viejo que está robando, no viejo no, un pastor que está robando, vaya y denuncie.
Pero eso sí, aquí no está usted en su país ¿verdad? que usted va a hablar estupideces, vaya y compruebe lo que está diciendo y si le comprueban a usted todo lo contrario, porque hay gente mala, en todos lados hay gente mala, en todos lados.
Y bueno tener amor en la casa de Dios tener ser generoso con la casa del Señor y ahora quiero mencionarle un dato nada más porque ahora sí vamos a terminar. Solamente tres reyes gobernaron sobre toda la nación de Israel que fue: Saúl, David y Salomón después de ellos, treinta y nueve reyes más gobernaron, lo que se conoció como Israel y Judá; es decir podríamos decir que fueron prácticamente cuarenta y dos los reyes de Israel.
Ahora sabe usted que de los treinta y nueve reyes que reinaron sobre Israel y Judá ¡escuche esto! Treinta y tres reyes, treinta y tres adoraron ídolos. David jamás adoró a un ídolo.
Ahora Dios, porque usted puede decir; bueno porque yo no me acuerdo que Saúl haya adorado una estatua. Yo no me acuerdo que Saúl haya adorado un pedazo de palo, no lo hizo. Pero Dios le dijo estas palabras: Por tu rebelión y obstinación es como pecado de idolatría. Dios se lo dijo a Saúl.
La obstinación, la rebelión la desobediencia, era como pecado de idolatría, o sea yo le estaba diciendo mira los pecados que tú has cometido en contra mía porque tú me desobedeces, porque tú no tienes temor de mí porque tú haces lo que tú quieres es peor que haberse arrodillado delante de un ídolo. Es peor, ¿por qué? porque Saúl tenía un ídolo; él mismo; un hombre ególatra.
Fíjate que cuando Samuel, y se me olvidó mostrar ese versículo, cuando Samuel le dijo ¿que porque no había matado a la gente?, ¿porque no había hecho esto? Saúl llegó a un punto hermanos, que le dijo estas palabras a Samuel: Oye le dijo ¿por qué no me exalta delante de mis ancianos? ¡imagínate! lo enfermo que estaba el pobre, un hombre que quería quedar bien con todo el mundo, pero no le importaba lo que Dios pensara de él hermano ¿cómo es posible? si yo quiero quedar bien delante de una congregación y me vale lo que Dios piense de mí.
Si yo quiero quedar bien delante de la gente y no me importa qué es lo que Dios piensa al respecto.
David nunca adoró ídolos, David amaba la ley de Jehová, amaba la oración; era un hombre compasivo, sensible, piadoso, consciente ¿Se acuerda que no quería que mataran a los de Keyla por su culpa? Estas y muchas otras cosas más son las razones por las que David era el hombre conforme al corazón de Dios.
En el desierto escribió muchos salmos, siempre tuvo una alabanza en sus labios aún en medio de la soledad. El desierto en la Biblia es un símbolo de soledad, de sed espiritual, de abandono, de tristeza, de melancolía, de frustración, de desolación, miseria, depresión, de prueba, de sufrimiento, y nunca escuchamos a David quejarse contra el Dios de la gloria.
Ahora si yo pudiera mencionar cuatro cosas, cuatro, por las que David a parte de todas las que he mencionado que las envuelve y que están allí metidas en estas cuatro palabras que voy a decir; me atrevería a decir que la primera fué: Obediencia;
Yo me voy a buscar a un hombre que haga lo que yo quiera, obediencia, la primera, y esa fue la razón por la que desechó a Saúl, por desobediente, entonces la primera obediencia.
La segunda: Amor; David amaba a Dios, entonces fíjate, David obedecía a Dios porque lo amaba. Es que yo puedo imaginarme el día que llegó Samuel a la casa de Isaí y pasaron a los siete hijos y Samuel dijo: No pues, no, no no son estos ¿no tienes otro más? Si tengo uno, pero es un pequeñito que anda por ahí trabajando. – Llámenlo. Yo me pregunto ¿Qué estaba haciendo Davicito en ese momento? ¿cuidando a las ovejitas? ¿sabe que creo que estaba haciendo David? Cantando, cantándole a Dios.
Entonces a lo largo de la vida de David usted muestra amor, y mis queridos y amados hermanos sin amor no hay el resto, sin amor no hay obediencia, sin amor no hay generosidad no, no hay ¡imposible! y no hay, es que tiene que amar, recuérdese; para dar hay que amar. ¿Porque a los hijos los inundamos de todo lo que quieren? para dar hay que amar, el que no dá no ama.
Entonces la primera es obediencia, la segunda es amor, la tercera es: Adoración; El dulce cantor de Israel, y la cuarta si pudiera envolver en estas cuatro palabras, la cuarta es: Comunión. Es que no se puede escribir tanto salmo hermano si nos está en una íntima comunión con Dios, no se puede decir tantas cosas bonitas si no se está en íntima comunión con Dios, no se pueden ganar tantas batallas si no hay obediencia, si no hay amor, si no hay adoración, si no hay comunión.
No se puede huir por quince largos años en el desierto y de cueva en cueva y hacerse como que está loco y pasar tanta tribulación y llegar al punto de que sus mismos valientes lo quieren apedrear, no se puede pasar todo eso y escribir Jehová es mi pastor nada me faltará, y escribir el bien y la misericordia de Jehová me seguirán todos los días de mi vida.
Es que no se puede vivir de esa manera; sin obediencia, sin amor ,sin adoración y comunión. Es que no se puede tener un corazón sensible, un corazón generoso, un corazón de misericordia, que en lugar de buscar la vida las personas busca salvarlas y bendecirlos, y decirle a Mefiboset: A partir de este día vas a comer a la mesa del rey como uno de mis hijos y a partir de este día te vamos a devolver todas las cosas, todos los terrenos, todo lo que le pertenecía a tu abuelo Saúl, te lo vamos a regresar. Eso es misericordia.
Ojalá mis amados hermanos, y quiero terminar con esto, quiero decir esto que voy a decir y es bien importante y por favor no quiero que pensemos que lo que hemos hablado en estas dos semanas es una exaltación de David por encima de la glorificación de Dios, de ninguna manera.
Yo no quiero ser como David para tener todo lo que tuvo David, la verdad que yo no quiero estar metido en una batalla como estas, la verdad que no. Pero si me llama la atención cómo una persona puede obedecer a Dios, amar a Dios, adorar a Dios y tener comunión con Dios, ¡Qué cosa más linda! Es por esa razón que Dios dijo que David era el hombre conforme a su corazón.
Vamos a orar, demos gracias al Señor; Padre el estudio de la vida de David es un estudio enriquecedor, una vida espectacular, honesta en el sentido de contarnos los éxitos como los fracasos, los momentos altos, como los momentos bajos. Te alabamos Señor por este rey; el rey David y por todas las enseñanzas que hemos obtenido de su vida.
Los principios que obtenemos por medio de tu palabra Señor, que siguen siendo tan reales en nuestros días.
En nuestro diario caminar Padre, recordamos cada una de las cosas de este hombre y pedimos que nos ayudes a hacer tu voluntad; obedecerte, amarte, adorarte y tener comunión en tu maravillosa presencia ¡Qué maravilla Señor! Ayúdanos a querer, ayúdanos a buscar esta intimidad contigo.
Mientras todos oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón pero quisiera hacerlo en esta noche, usted dice; pastor yo necesito a Dios en mi vida, yo quiero entregarle al Señor mi corazón. Si hay alguien entre nosotros que nunca antes ha recibido a Cristo pero quisiera hacerlo hoy, la invitación es para usted.
Si hay alguna persona que dice; Pastor yo necesito al Señor. Yo le invito para que se ponga de pie para que levante su mano, alguien se va a acercar para ayudarle a hacer esta oración, que es la oración que te acerca a Dios y le ayuda a usted a ponerse a cuentas con el Señor.
Usted que nos mira por redes sociales, usted también puede tener un encuentro personal con Jesús, dígale: Señor en este día te pido perdón por mis pecados, reconozco que soy pecador y te pido Señor que a partir de este día me ayudes a caminar de la mano contigo.
Si usted hizo esta oración, yo quiero animarle a crecer en el conocimiento de Dios y de su santa y bendita palabra. Padre querido, despídenos con tu paz, con tu bendición, en el nombre de Jesús oramos. Amén y amén.