Y David danzaba
Septiembre 22, 2021 – 7:00PM | 2 Samuel 6: 14-23 | Dr. David Rodríguez
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TRANSCRIPCIÓN
Tenemos un estudio interesante para esta noche, llamado: “Y David danzaba.” Un pasaje de la escritura muy conocido. Vamos a pedir a Dios que nos bendiga con el mensaje de la palabra. Quiero invitarles a ir a 2 Samuel capítulo 6, y vamos a leer del versículo 14 en adelante. Yo voy a leer para ustedes.
2Samuel 6: 14-23 (NTV): 14Y David danzó ante el Señor con todas sus fuerzas, vestido con una vestidura sacerdotal. 15Y David y todo el pueblo trasladaron el arca del SEÑOR entre gritos de alegría y toques de cuerno de carnero. 16Entonces cuando el arca del SEÑOR entraba a la Ciudad de David, Mical, hija de Saúl, se asomó por la ventana. Cuando vio que el rey David saltaba y danzaba ante el SEÑOR, se llenó de desprecio hacia él. 17Así que trasladaron el arca y la colocaron en su lugar dentro de la carpa especial que David le había preparado. David sacrificó al SEÑOR ofrendas quemadas y ofrendas de paz. 18Cuando terminó de ofrecer los sacrificios, David bendijo al pueblo en el nombre del SEÑOR de los Ejércitos Celestiales. 19Después repartió a todos los israelitas que estaban allí reunidos, tanto hombres como mujeres, una hogaza de pan, un pastel de dátiles y un pastel de pasas de uva. Luego todos regresaron a su casa. 20Cuando David regresó a su hogar para bendecir a su propia familia, Mical, la hija de Saúl, salió a su encuentro y le dijo indignada: – ¡Qué distinguido se veía hoy el rey de Israel, exhibiéndose descaradamente delante de las sirvientas tal como lo haría cualquier persona vulgar! 21David le replicó a Mical: – ¡Estaba lanzando delante del SEÑOR, quien me eligió por encima de tu padre y de su familia! Él me designó como el líder de Israel, el pueblo del SEÑOR, y de este modo celebro delante de él. 22 ¡Así es, y estoy dispuesto a quedar en ridículo e incluso a ser humillado ante mis propios ojos! Pero esas sirvientas que mencionaste, ¡de seguro seguirán pensando que soy distinguido! 23Y Mical, la hija de Saúl, nunca tuvo hijos en toda su vida.
¡Que Dios bendiga esta lectura!
Mical fue la primera esposa de David. Recuerdan ustedes que Mical era hija del rey Saúl. Y el rey, primero le había ofrecido a la mayor, quien matara a Goliat. David lo mató, pero como Saúl era tremendo, no se la dio. Después, llegó a oídos del rey Saúl de que la hija menor estaba enamorada de David. El rey Saúl le dijo a David: te la voy a dar como mujer, y se casaron; pero no fue de gratis. Le pidió cien prepucios de filisteos, pero David trajo doscientos, quiere decir que mató doscientas personas. Entonces se fueron a vivir juntos, David y Mical. Pero de repente Saúl, como estaba loco, no le gustó la canción que cantaba el pueblo (Saúl mató a sus miles y David a sus diez miles) y mandó soldados a casa de su propia hija, para que mataran a David. Pero Mical salió y les dijo: “No lo pueden matar porque está enfermo. Si lo van a matar, tienen que matarlo cuando esté sano el hombre.” Todo esto había sido una trampa de la mujer, ella lo había encubierto; había puesto una sábana por encima a una estatua, e hizo que David huyera. Se fue David, no lo volvió a ver por un tiempo, se quedó sola la mujer. Entonces el rey Saúl le dio un hombre llamado Palti, que la amaba tanto que lloraba por ella. Ustedes deben de recordar que, cuando David fue rey de Hebrón le vinieron a ofrecer engrandecer su reino; la condición que David puso fue que le regresaran a su esposa (Mical) y por eso ella ahora está en el palacio.
En el estudio anterior, David trae el arca del pacto a Jerusalén. Dice la Biblia que David danzaba, brincaba, de regocijo y de alegría por el temor de que ya había muerto Uza. Mire usted si David es tan especial que dijo: Bueno, Uza u Ahío iban adelante, entonces me voy a poner yo delante del arca de Dios, y si el Señor me quiere llevar, que lo haga. David se vistió como se visten los sacerdotes, caminaban seis pasos y después sacrificaban un buey; celebrando esos pasos. Estaban alegres porque el Señor estaba complacido con ellos, por traer el arca del pacto a la ciudad de Jerusalén.
Fíjese usted, ya había bendecido a Jehová, había bendecido al pueblo, y ahora viene para bendecir la casa. Y, ¿cómo le sale la señora?
2Samuel 6: 20 (RV-60): Volvió luego David para bendecir su casa; y saliendo Mical a recibir a David dijo: ¡Cuán honrado ha quedado hoy el rey de Israel, descubriéndose hoy delante de las criadas de sus siervos, como se descubre sin decoro un cualquiera!
Quiero mencionar dos cosas. La versión en inglés dice: Medio desnudo. Otra versión dice: Hoy has hecho el ridículo, no te has portado a la altura de un rey. Con los saltos que dabas, hasta la última de tus sirvientas te vio el trasero. Te has portado como una persona vulgar y sin vergüenza.
David no estaba desnudo hermanos, lo que pasa es que David se había quitado sus atuendos de rey; y se había vestido al igual que se visten los sacerdotes; eso es todo. Recordemos que esta señora era la hija del rey Saúl, ella no entendía lo que hacía su marido. Ella quería ver a su marido vestido de rey toda la santa vida. Se refiere a su esposo como desnudo, porque se había quitado su ropa de rey.
¿Por qué danzaba David? La respuesta es sencilla: Para agradar a Dios.
Quiero que notemos varios detalles, 2 Samuel 6:14 (RV-60), interesantes.
2 Samuel 6:14 (RV-60): Y David danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; y estaba David vestido con un efod de lino. Nos dice que estaba vestido con un efod de lino, claro no tenía su atuendo del rey, no tenía su corona. En este caso nos damos cuenta que el danzaba delante de Jehová, la respuesta es: danzaba por regocijo, danzaba por alegría, danzaba porque habían traído el arca a la ciudad de Jerusalén. Un arca que había estado olvidada, prácticamente, por todos los años que reinó Saúl, nunca le preocupó siquiera. David ya había conquistado Jerusalén, la había hecho la capital política; ahora estaba haciéndola la capital religiosa al traer al arca, la presencia de Dios dentro de Jerusalén.
Le aseguro una cosa hermano, en ningún momento David estaba pensando en Mical, él estaba pensando en Dios, estaba pensando en la gloria de Dios. David nunca se imaginó que la señora estaba molesta. ¡Qué bonito hubiese sido que ella también hubiese adorado al Señor!
2 Samuel 6:15 (RV-60): Así David y toda la casa de Israel conducía en el arca de jehová con júbilo y sonido de trompeta. Es decir, no estaba haciendo ninguna cosa fuera del lugar, estaba ofreciendo sacrificios a Jehová; lo dice la escritura.
2 Samuel 6:17 (RV-60): Metieron, pues, el arca de Jehová, y la pusieron en su lugar en medio de una tienda que David le había levantado; y sacrificó David holocaustos y ofrenda de paz delante de Jehová. Está haciendo lo que le dictó su corazón. Hay gratitud en el alma, hay gratitud en el corazón delante de Dios.
2 Samuel 6:18 (RV-60): Y cuando David había acabado de ofrecer los holocaustos y ofrenda de paz, bendijo al pueblo en el nombre de Jehová de los ejércitos. Después de eso reparte comida (versículo 19) a todo el pueblo, a toda la multitud de Israel. Quiere decir que, David no se fue, hasta que todo el mundo tuvo comida.
¿Cómo es posible que un día de tanto gozo, que pudo haberse muerto David mientras trasladaba el arca, la esposa le iba a llevar la contraria? Esto molestó mucho a David.
La comunicación en el matrimonio es un arte, hay que aprender a comunicarse. Hay personas que tienen lengua y boca, pero solamente para lanzar veneno todo el día; y déjeme decirle que uno se cansa de escuchar veneno todo el día. Hay tiempo para todo, hay tiempo para discutir (sabiamente), hay tiempo para pasarla bien, para conversar (tomar un café, hablemos de otras cosas).
La Señora de David, al parecer se comió la víbora en la mañana. Y esta fue una situación interesante que se presenta en este pasaje de la escritura; porque David no se quedó callado.
La connotación del pleito (2Samuel 6) tenía que ver con el hecho de haberse quitado la ropa. Es que hay personas que no están contentos con nada en la vida.
2 Samuel 6:21 (RV-60): Entonces David respondió a Mical: Fue delante de Jehová, quien me eligió en preferencia a tu padre y a toda su casa, para constituirme por príncipe sobre el pueblo de Jehová, sobre Israel. Por tanto, danzaré delante de Jehová.
¡Me encanta la respuesta de David! “Pero si fue delante de Jehová”, como diciendo: “Mira yo no saqué a bailar a nadie, yo no me puse a bailar aquí para agradar a ninguna mujer, yo solo danzaba delante de Jehová.” Me encanta: quien me eligió en lugar de tu papá (de toda tu casa).
2 Samuel 6:22 (RV-60): Y aún me haré más vil que esta vez, seré bajo a tus ojos; pero seré honrado delante de las criadas de quienes has hablado. Está David como diciendo: ¿tú crees que por ese reclamo que tú me acabas de hacer, a partir de ahora, ya no voy a danzar delante de Dios? ¿Tú crees que por ese reclamo que tú me acabas de hacer, a partir de ahora, ya no voy a adorar a Dios con el alma, con el corazón? Te equivocas, podré ser más bajo a tus ojos, pero seré más brillante delante de las criadas.
Aquí hay una situación interesante, ¿cómo es posible que las criadas pueden tener más sensibilidad, que una esposa? Se lo está diciendo ahí la Biblia. Las criadas le aplaudieron, las criadas decían: ¡Ese es nuestro rey! “Nos ha traído el arca a Jerusalén, ahora la gloria de Dios estará en medio de nosotros.” Eso lo decían las criadas.
2 Samuel 6:23 (RV-60): Y Mical hija de Saúl nunca tuvo hijos de su muerte. Este versículo que acaba de leer, quien lo puso ahí fue el Espíritu Santo. El no tener hijos, en aquellos tiempos, era una situación bien delicada; porque era como que el favor de Dios estaba en contra de la mujer.
Dos cosas pudieron suceder: Una, que fue castigo de Dios, el versículo no lo dice. La otra fue que David no durmió con ella. Me explico, ¿por qué? ¿Por qué un hombre que ama Jehová, que ama a Dios, que danza delante de Jehová y que quiere hacer las cosas bien delante de Dios, no va a querer compartir su techo, lecho, mesa, sentimientos de amor, con una persona que está completamente fuera del lugar en prioridades y en valores?
Ahora, lo que pasa es que en la vida hay de todo. Hay hombres que son flojos y mandilones (que hacen lo que dice la esposa.) y son grandotes. Si la mujer dice: -Hoy no vamos a ir a culto. El esposo (flojo) responde: –Sí mi amorcito, lo que usted diga. Cuando su posición debe ser: ¿Se te olvidó que Dios nos rescató y nos levantó; y nos ha puesto sobre una roca firme? ¿Que Dios nos ha bendecido y mira la familia que tenemos? Si vienes tú, con que no quieres ir al culto te quedas mi hija, nos vemos.
Quisiera hablar un poquitito acerca de la verdadera adoración. Permítame un poco de locura esta noche.
En el Antiguo Testamento la adoración tenía que ver con altares, pero, no altares de adoración; sino altares de la memoria, altares del recuerdo. Por ejemplo: “vas a levantar este altar para que cuando te pregunten tus hijos les digas: Jehová Dios nos hizo pasar por este mar con brazo fuerte y poderoso.” Altar del recuerdo, de la memoria, para que nunca se te olvide. Esos son los altares del que nos habla Antiguo Testamento.
También tenía que ver con los sacrificios. Cuando hablamos de sacrificios, hay dos tipos de sacrificios. Uno que ya no es requerido, el que se realizaba para el perdón de los pecados; por eso es que la gente traía los animalitos para derramar la sangre, y obtener el perdón de los pecados.
Pero, hay otro sacrificio; lo dice Romanos 12: 1(RV-60): Así que, hermanos, os ruego por la misericordia de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. Déjeme decirle algo iglesia: venir a la casa del Señor es un sacrificio. Muchos de ustedes el día miércoles llegan de sus trabajos, se dan un baño y se vienen al culto; todo esto requiere sacrificio, venir a la casa del Señor requiere sacrificio. También hay sacrificios de ofrenda. Piense en esto: todo el antiguo testamento está lleno de sacrificios de gratitud. Sacrificios de ofrendas, que Dios lo dictaminó. Más adelante hablaremos de eso
¿Qué dijo Jesús? En Juan 4:23 (RV-60) Más la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Entonces el Padre busca verdaderos adoradores.
¿Sabe usted mi hermano, que usted puede venir a la iglesia y no adorar? Esto es triste. Cuando yo estaba de viaje yo veía los cultos. Yo veía a la hora que están aquí los hermanos de alabanza, de adoración; guiando al pueblo en la adoración y hay gente que no canta. Los que piensan que con venir a la iglesia ya están adorando, no es así. La relación con Dios es una relación personal, es como su papá, es como su mamá; es una relación personal la que hay.
¿Sabe usted que hay personas que llegan tarde a los cultos, quince o veinte minutos después? ¿Sabe por qué? Porque no les importa. La pregunta que se tiene que hacer, no es si usted estuvo; la pregunta es: ¿usted adoró? Porque si Él es mi Dios, yo quiero adorar a mi Señor, yo quiero venir temprano, antes que el culto comience, ponerme a cuentas con Dios, hablar con nuestro Dios, nuestro Señor.
Quiero mencionar algunas cosas que son importantes, para que le queden allí guardadas en su corazón.
¿Por qué Dios dijo que David era el dulce cantor de Israel? ¿Por qué Dios dijo que David era el hombre conforme al corazón de Dios? ¿Qué había en el Antiguo Testamento? ¿Qué cosas obedeció David para que Dios dijeran semejante cosa?
Quiero que piense en estos principios de adoración.
- Antes de su adoración, Dios mira el corazón. Dios mira a la persona antes de la ofrenda.
Génesis 4: 4-5 (RV-60) 4Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de los más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda, 5pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante. Nos damos cuenta que la ofrenda de Caín y Abel fue evaluada por Dios. A Dios le interesa el tipo de ofrenda que nosotros presentamos, pero le interesa más la condición del corazón de la persona que lo ofrece. Dios miró con agrado a Abel, pero no miró con agrado a Caín ni a la ofrenda suya.
Algunas personas creen, erróneamente, que la razón por la que Dios aceptó la ofrenda de Abel es porque incluía sacrificio. Pero la Biblia no apoya tal conclusión, no está hablando de eso. Nosotros ya conocemos la historia, y podemos darnos cuenta que Caín era un hombre malo. ¿Qué cosa buena podía haber en su corazón si él deseaba matar a su propio hermano? ¿Qué había en su corazón en realidad? Dios antes de ver su ofrenda, mira su corazón.
¿Cómo es su actitud para Dios? Usted ve el venir a la iglesia como: “algo que tiene que hacer” o como: “algo que le llena de gozo el alma, por la gratitud que tiene con Él.” Dios mira a la persona, la ofrenda que le presentamos a Dios representa lo que Dios vale para nosotros. La ofrenda habla del individuo, por eso dice Dios: “vas a traer de lo más gordo de tu ofrenda, el más excelente sacrificio.”
Hebreos 11: 4 (RV-60) dice: Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella. ¿Qué significa eso? Que Dios antes de ver nuestra adoración, antes de ver que venimos a la iglesia, antes de ver cualquier cosa que hacemos; Dios mira el corazón nuestro antes de cualquier otra cosa. Es por eso que dejamos un tiempo para ponernos a cuentas con Dios, para pedirle perdón al Señor, y decirle: “Señor yo te amo, este soy yo Señor, ayúdame con mis cosas.” Dios mira el corazón de la persona, mira la sinceridad del corazón de la persona.
Si vemos a Abraham, ¿sabe qué vio Dios en la adoración de Abraham? Obediencia.
-Quiero que me ofrezcas a tu hijo, dice Dios. Y ¿qué respondió Abraham? –No Señor, mejor te canto un corito. -Quiero que me ofrezcas a tu hijo. –No, yo voy a levantar mis manos. –No Abraham, yo quiero que me ofrezcas a tu hijo. –No, yo voy a cerrar los ojos. Dios dice: Eso, lo hace cualquiera; pero lo que te estoy pidiendo eso no lo hace cualquiera. Porque Dios siempre nos pide lo que más nos cuesta dar. Siempre. Y uno como ya lo conoce; uno sabe lo que nos va a pedir el Señor. Y así mismo es. “Obediencia.”
Cuando Dios habla de la adoración de Daniel, ¿sabes qué es lo que Dios toma en cuenta? Su fidelidad. Tres veces al día, él abría sus ventanas en dirección a Jerusalén para orar. Daniel fue siervo, profeta del Señor. Iban reyes, venían reyes; y Daniel permanecía fiel.
No hay motivos, no hay razón, ni circunstancia que nos haga poner a Dios en segundo lugar. En esta semana, le he estado hablando a varias personas que no he visto en la casa del Señor. Siempre de la mejor manera, de la mejor forma porque los amamos, los queremos y deseamos verle pronto. No existe en este mundo nada, que pueda hacer que pongamos a Dios en segundo lugar.
Yo creo que el ser humano fue creado para adorar algo. El ser humano fue creado para tener devoción a algo. En la vida usted decide ¿qué quiere adorar? En la vida usted decide ¿a qué quiere tenerle devoción? Algunas personas, por ejemplo, adoran sus riquezas; otras personas adoran ídolos (por cantidades navegables). En el mundo hay quienes adoran a los hijos, a las esposas, a las madres, al éxito, al prestigio, al dinero.
Ahora, hay un nuevo ídolo que se ha levantado, ¿sabe cómo se llama? Comodidad, ¿no es cierto? Es que hay mucho frío, es que está lloviendo, es que van muchas personas y puedo enfermarme; otros dicen que hay mucho calor. El asunto es que siempre están inventando algo para no darle la alabanza y adoración a aquel que puso sus ojos en nosotros sin merecerlo, al que mandó a su Hijo a la cruz a morir por nosotros por gracia y misericordia. ¡Él es digno de nuestra alabanza y nuestra adoración! Pero la manera como tratamos el evangelio, como tratamos las cosas de Dios, habla del valor que Dios tiene para nosotros.
¿Usted quiere hablar de David? Hace un rato acabamos de leer sobre este tema.
1 Crónicas 29: 1-2 (RV-60): 1Después dijo el rey David a toda la asamblea: Solamente a Salomón mi hijo ha elegido Dios; él es joven y tierno de edad, y la obra grande; porque la casa no es para hombre, sino para Jehová Dios. 2Yo con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, oro para las cosas de oro, plata para las cosas de plata, bronce para las cosas de bronce, hierro para las de hierro, y madera para las de madera; y piedras de ónice, piedras preciosas, piedras negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, y piedras de mármol en abundancia.
Hay un estudioso que llama a David: “Un hombre de pasión”. David era apasionado en todo lo que hacía. Cuando iba danzando delante del arca, dice la Biblia que, iba danzando con todas sus fuerzas. A la hora de ofrendar para la casa del Señor dice: con todas mis fuerzas. Y a la hora de seguir a Betsabé, con todas sus fuerzas. Un nombre de pasión. ¿De qué habla esto? Esto habla de la actitud, entonces al hablar de adoración es imposible dejar de hablar de tu afecto en la casa de Dios.
Le dije una Señora en estos días, óigame desde cuando no los vemos. Ella me dijo: – ¡Ay pastor! Es que a mi esposo no le gusta ir a la iglesia, porque dice que ahí piden mucho dinero. Le dije: –No de dinero, si aquí a nadie se le obliga a dar. Lo que usted no da, lo da otro, créame. Pero escuche esto: Si usted no da, ¿será que usted cree en un Dios todopoderoso en la gloria, que Él es el que está pidiendo. No es el pastor, yo no quiero de su dinero; es para la obra del Señor. Pero le dije: –Bueno hermana, ¿y a qué iglesia están yendo? ¿Saben qué me dijo? — A ninguna. – ¡Ah! Usted ve, es pura mentira, son justificaciones.
Yo siempre he dicho algo: Si en esta iglesia, usted no crece, no crecerá nunca. Yo siempre dicho: “Si usted no crece con la palabra que se predique en este lugar, con los programas que se tienen en esta iglesia; entonces no va a crecer en ningún lado.” Usted se puede ir a otra iglesia, y dentro de un año o dos años, ya no va a ir a ningún lado. El evangelio es exigente, por eso nosotros somos exigentes. Lo que nosotros vivimos y hacemos, demuestra el valor que Dios tiene para nosotros.
David entendió el valor de Dios, y dio en abundancia todo lo que necesitaba Dios. Recuerde que el hombre nace para adorar algo, tenga cuidado no se esté adorando a usted mismo. A Dios hay que honrarlo. Tenga cuidado, y lo que usted sienta sea solamente simpatía por el evangelio y el corazón está vacío. Si en el corazón no está Dios, si en el corazón hay otras cosas; tenga cuidado.
Todas aquellas personas que son generosas con el reino, siempre tienen muchas cosas en la vida. Dios los bendice, los prospera en todo sentido; pueden hacer lo que quieran, ir donde quieran, comer lo que quieran y comprar lo que quieran; ¿por qué? Porque Dios no miente, y si Él te dice: “voy a abrir la ventana de los cielos, y voy a derramar bendición hasta que sobre abunde”. Él no te va a fallar jamás.
1 Crónicas 29: 3 (RV-60): Además de esto, por cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular oro y plata que, además de todas las cosas he preparado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios.
¿Vas a venir a adorar? ¿Cómo está tu afecto en la casa de Jehová? A mí me cuesta muchísimo trabajo entender, en realidad, cuando persona me dice: “es que estoy un poco desanimado.” Si supiera las veces que he estado desanimado yo, pero aquí estoy. Y obligado no estoy, yo solo le digo: Padre, te encargas tú de mi dolor. Pero, ¿sabe qué? No me dan ganas de quedarme en casa, yo quiero estar en la casa del Señor. Me es difícil que alguien me diga que cree en Dios, que ama a Dios, que adora a Dios; y que no asista a una iglesia.
1 Crónicas 29: 5 (RV-60): oro, pues, para las cosas de oro, y plata para las cosas de plata, y para toda obra de la mano de los artífices. ¿Y quién quiere hacer hoy ofrenda voluntaria Jehová?
Fue la pregunta que hizo David, y dice la escritura que la gente se desbordó de generosidad para el reino, para Dios. Dios no va a pasar desapercibido la generosidad de nadie, no Señor.
Yo les he contado, en varias oportunidades, que cuando llegamos a Canadá hace 33 años, mi esposa y yo vendimos todos los tiliches que teníamos en El Salvador, todo. De todo lo que vendimos dimos el diezmo a la iglesia, y cuando pusimos un pie aquí en Canadá hicimos lo mismo (volvimos a diezmar). Ya habíamos diezmado, sí; pero queríamos comenzar con el pie derecho en Canadá. Y después de 33 años, podemos decir: “Benditos sea el nombre del Señor, por todas sus bendiciones.” Muchos llegamos a este país, con una mano adelante y otra atrás. A mí no se me olvida, las personas que llegaron al apartamento en la doce avenida, las personas que llegaron con tenedores, cuchillos, cucharas, a nuestro apartamento; acabaditos de llegar. Mi esposa y yo salíamos a caminar todas las noches y siempre nos perdíamos. No se me olvida, esas personas que nos llevaron esas cositas ese día y siguieron ayudándonos.
Tiene que entender que la adoración es un conjunto de situaciones que Dios toma en consideración, Dios mira tu corazón, mira tú obediencia.
Otra cosa que es bien importante, Dios mira tu humildad. En varias oportunidades encontramos en las escrituras, a personas soberbias, y Dios dice claramente con relación a eso (Salmos 138:6): Jehová es excelso, atiende al humilde; más al activo mira de lejos. ¡Dios nos ayude!
Y David danzaba. Su mujer lo menospreció, pero él dijo: ¿sabes qué? Yo a mi Dios, lo seguiré adorando.
Oremos al Señor, demos gracias: Padre te damos gracias por el estudio de esta noche Señor. Oramos para que nos ayudes a crecer en determinación, y a entender que tú eres digno de nuestra alabanza, digno de nuestra adoración. Que nos conoces por nombre, así como un padre conoce a sus hijos. Así como un padre sabe quién de sus hijos tiene consideración, quién de sus hijos es cercano, quién de sus hijos lo atiende, lo ayuda; Dios sabe quién lo ama. Te pedimos perdón Padre, si todo este tiempo hemos estado haciendo las cosas al revés, ayúdanos Espíritu Santo, ayúdanos a hacer tu voluntad. Queremos obedecer a tu palabra bendita, queremos crecer en el conocimiento tuyo. Queremos que tú seas la persona más importante en nuestro diario caminar. Si hemos nacido para adorar algo, en este día te decimos con el alma: hemos decidido adorarte a ti Señor. Hemos decidido que tú seas el único ser que reciba nuestra alabanza y nuestra adoración. Porque tuyo es el poder y la gloria, por los siglos de los siglos.
Mientras oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón, pero quisiera hacerlo en esta noche, la invitación es para usted. Si hay alguien, que dice: Pastor yo necesito a Dios en mi vida, yo quiero recibir a Cristo en mi corazón. Yo le invito que levante su mano donde está o se ponga de pie, y nos deje orar por usted. ¿Hay alguna persona que siente la necesidad de recibir a Cristo hoy? Usted que no mira por internet, también puede hacer lo mismo a través de una oración de fe. Dígale al Señor: “Señor en este día, te pido perdón por mis pecados. Te doy gracias por lo que hiciste en la cruz; al poner tu cuerpo, al derramar tu sangre preciosa por mis pecados. Señor en este día, te entrego mi alma, te entrego mi corazón, te entrego mi vida.”
Padre querido, despídenos con tu paz y con tu bendición, en el nombre de Jesús: amén.
¡Que la paz de Cristo les acompañe mis amados hermanos! ¡Bendiciones para todos!
Y David danzaba
Septiembre 22, 2021 – 7:00PM | 2 Samuel 6: 14-23 | Dr. David Rodríguez
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TRANSCRIPCIÓN
Tenemos un estudio interesante para esta noche, llamado: “Y David danzaba.” Un pasaje de la escritura muy conocido. Vamos a pedir a Dios que nos bendiga con el mensaje de la palabra. Quiero invitarles a ir a 2 Samuel capítulo 6, y vamos a leer del versículo 14 en adelante. Yo voy a leer para ustedes.
2Samuel 6: 14-23 (NTV): 14Y David danzó ante el Señor con todas sus fuerzas, vestido con una vestidura sacerdotal. 15Y David y todo el pueblo trasladaron el arca del SEÑOR entre gritos de alegría y toques de cuerno de carnero. 16Entonces cuando el arca del SEÑOR entraba a la Ciudad de David, Mical, hija de Saúl, se asomó por la ventana. Cuando vio que el rey David saltaba y danzaba ante el SEÑOR, se llenó de desprecio hacia él. 17Así que trasladaron el arca y la colocaron en su lugar dentro de la carpa especial que David le había preparado. David sacrificó al SEÑOR ofrendas quemadas y ofrendas de paz. 18Cuando terminó de ofrecer los sacrificios, David bendijo al pueblo en el nombre del SEÑOR de los Ejércitos Celestiales. 19Después repartió a todos los israelitas que estaban allí reunidos, tanto hombres como mujeres, una hogaza de pan, un pastel de dátiles y un pastel de pasas de uva. Luego todos regresaron a su casa. 20Cuando David regresó a su hogar para bendecir a su propia familia, Mical, la hija de Saúl, salió a su encuentro y le dijo indignada: – ¡Qué distinguido se veía hoy el rey de Israel, exhibiéndose descaradamente delante de las sirvientas tal como lo haría cualquier persona vulgar! 21David le replicó a Mical: – ¡Estaba lanzando delante del SEÑOR, quien me eligió por encima de tu padre y de su familia! Él me designó como el líder de Israel, el pueblo del SEÑOR, y de este modo celebro delante de él. 22 ¡Así es, y estoy dispuesto a quedar en ridículo e incluso a ser humillado ante mis propios ojos! Pero esas sirvientas que mencionaste, ¡de seguro seguirán pensando que soy distinguido! 23Y Mical, la hija de Saúl, nunca tuvo hijos en toda su vida.
¡Que Dios bendiga esta lectura!
Mical fue la primera esposa de David. Recuerdan ustedes que Mical era hija del rey Saúl. Y el rey, primero le había ofrecido a la mayor, quien matara a Goliat. David lo mató, pero como Saúl era tremendo, no se la dio. Después, llegó a oídos del rey Saúl de que la hija menor estaba enamorada de David. El rey Saúl le dijo a David: te la voy a dar como mujer, y se casaron; pero no fue de gratis. Le pidió cien prepucios de filisteos, pero David trajo doscientos, quiere decir que mató doscientas personas. Entonces se fueron a vivir juntos, David y Mical. Pero de repente Saúl, como estaba loco, no le gustó la canción que cantaba el pueblo (Saúl mató a sus miles y David a sus diez miles) y mandó soldados a casa de su propia hija, para que mataran a David. Pero Mical salió y les dijo: “No lo pueden matar porque está enfermo. Si lo van a matar, tienen que matarlo cuando esté sano el hombre.” Todo esto había sido una trampa de la mujer, ella lo había encubierto; había puesto una sábana por encima a una estatua, e hizo que David huyera. Se fue David, no lo volvió a ver por un tiempo, se quedó sola la mujer. Entonces el rey Saúl le dio un hombre llamado Palti, que la amaba tanto que lloraba por ella. Ustedes deben de recordar que, cuando David fue rey de Hebrón le vinieron a ofrecer engrandecer su reino; la condición que David puso fue que le regresaran a su esposa (Mical) y por eso ella ahora está en el palacio.
En el estudio anterior, David trae el arca del pacto a Jerusalén. Dice la Biblia que David danzaba, brincaba, de regocijo y de alegría por el temor de que ya había muerto Uza. Mire usted si David es tan especial que dijo: Bueno, Uza u Ahío iban adelante, entonces me voy a poner yo delante del arca de Dios, y si el Señor me quiere llevar, que lo haga. David se vistió como se visten los sacerdotes, caminaban seis pasos y después sacrificaban un buey; celebrando esos pasos. Estaban alegres porque el Señor estaba complacido con ellos, por traer el arca del pacto a la ciudad de Jerusalén.
Fíjese usted, ya había bendecido a Jehová, había bendecido al pueblo, y ahora viene para bendecir la casa. Y, ¿cómo le sale la señora?
2Samuel 6: 20 (RV-60): Volvió luego David para bendecir su casa; y saliendo Mical a recibir a David dijo: ¡Cuán honrado ha quedado hoy el rey de Israel, descubriéndose hoy delante de las criadas de sus siervos, como se descubre sin decoro un cualquiera!
Quiero mencionar dos cosas. La versión en inglés dice: Medio desnudo. Otra versión dice: Hoy has hecho el ridículo, no te has portado a la altura de un rey. Con los saltos que dabas, hasta la última de tus sirvientas te vio el trasero. Te has portado como una persona vulgar y sin vergüenza.
David no estaba desnudo hermanos, lo que pasa es que David se había quitado sus atuendos de rey; y se había vestido al igual que se visten los sacerdotes; eso es todo. Recordemos que esta señora era la hija del rey Saúl, ella no entendía lo que hacía su marido. Ella quería ver a su marido vestido de rey toda la santa vida. Se refiere a su esposo como desnudo, porque se había quitado su ropa de rey.
¿Por qué danzaba David? La respuesta es sencilla: Para agradar a Dios.
Quiero que notemos varios detalles, 2 Samuel 6:14 (RV-60), interesantes.
2 Samuel 6:14 (RV-60): Y David danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; y estaba David vestido con un efod de lino. Nos dice que estaba vestido con un efod de lino, claro no tenía su atuendo del rey, no tenía su corona. En este caso nos damos cuenta que el danzaba delante de Jehová, la respuesta es: danzaba por regocijo, danzaba por alegría, danzaba porque habían traído el arca a la ciudad de Jerusalén. Un arca que había estado olvidada, prácticamente, por todos los años que reinó Saúl, nunca le preocupó siquiera. David ya había conquistado Jerusalén, la había hecho la capital política; ahora estaba haciéndola la capital religiosa al traer al arca, la presencia de Dios dentro de Jerusalén.
Le aseguro una cosa hermano, en ningún momento David estaba pensando en Mical, él estaba pensando en Dios, estaba pensando en la gloria de Dios. David nunca se imaginó que la señora estaba molesta. ¡Qué bonito hubiese sido que ella también hubiese adorado al Señor!
2 Samuel 6:15 (RV-60): Así David y toda la casa de Israel conducía en el arca de jehová con júbilo y sonido de trompeta. Es decir, no estaba haciendo ninguna cosa fuera del lugar, estaba ofreciendo sacrificios a Jehová; lo dice la escritura.
2 Samuel 6:17 (RV-60): Metieron, pues, el arca de Jehová, y la pusieron en su lugar en medio de una tienda que David le había levantado; y sacrificó David holocaustos y ofrenda de paz delante de Jehová. Está haciendo lo que le dictó su corazón. Hay gratitud en el alma, hay gratitud en el corazón delante de Dios.
2 Samuel 6:18 (RV-60): Y cuando David había acabado de ofrecer los holocaustos y ofrenda de paz, bendijo al pueblo en el nombre de Jehová de los ejércitos. Después de eso reparte comida (versículo 19) a todo el pueblo, a toda la multitud de Israel. Quiere decir que, David no se fue, hasta que todo el mundo tuvo comida.
¿Cómo es posible que un día de tanto gozo, que pudo haberse muerto David mientras trasladaba el arca, la esposa le iba a llevar la contraria? Esto molestó mucho a David.
La comunicación en el matrimonio es un arte, hay que aprender a comunicarse. Hay personas que tienen lengua y boca, pero solamente para lanzar veneno todo el día; y déjeme decirle que uno se cansa de escuchar veneno todo el día. Hay tiempo para todo, hay tiempo para discutir (sabiamente), hay tiempo para pasarla bien, para conversar (tomar un café, hablemos de otras cosas).
La Señora de David, al parecer se comió la víbora en la mañana. Y esta fue una situación interesante que se presenta en este pasaje de la escritura; porque David no se quedó callado.
La connotación del pleito (2Samuel 6) tenía que ver con el hecho de haberse quitado la ropa. Es que hay personas que no están contentos con nada en la vida.
2 Samuel 6:21 (RV-60): Entonces David respondió a Mical: Fue delante de Jehová, quien me eligió en preferencia a tu padre y a toda su casa, para constituirme por príncipe sobre el pueblo de Jehová, sobre Israel. Por tanto, danzaré delante de Jehová.
¡Me encanta la respuesta de David! “Pero si fue delante de Jehová”, como diciendo: “Mira yo no saqué a bailar a nadie, yo no me puse a bailar aquí para agradar a ninguna mujer, yo solo danzaba delante de Jehová.” Me encanta: quien me eligió en lugar de tu papá (de toda tu casa).
2 Samuel 6:22 (RV-60): Y aún me haré más vil que esta vez, seré bajo a tus ojos; pero seré honrado delante de las criadas de quienes has hablado. Está David como diciendo: ¿tú crees que por ese reclamo que tú me acabas de hacer, a partir de ahora, ya no voy a danzar delante de Dios? ¿Tú crees que por ese reclamo que tú me acabas de hacer, a partir de ahora, ya no voy a adorar a Dios con el alma, con el corazón? Te equivocas, podré ser más bajo a tus ojos, pero seré más brillante delante de las criadas.
Aquí hay una situación interesante, ¿cómo es posible que las criadas pueden tener más sensibilidad, que una esposa? Se lo está diciendo ahí la Biblia. Las criadas le aplaudieron, las criadas decían: ¡Ese es nuestro rey! “Nos ha traído el arca a Jerusalén, ahora la gloria de Dios estará en medio de nosotros.” Eso lo decían las criadas.
2 Samuel 6:23 (RV-60): Y Mical hija de Saúl nunca tuvo hijos de su muerte. Este versículo que acaba de leer, quien lo puso ahí fue el Espíritu Santo. El no tener hijos, en aquellos tiempos, era una situación bien delicada; porque era como que el favor de Dios estaba en contra de la mujer.
Dos cosas pudieron suceder: Una, que fue castigo de Dios, el versículo no lo dice. La otra fue que David no durmió con ella. Me explico, ¿por qué? ¿Por qué un hombre que ama Jehová, que ama a Dios, que danza delante de Jehová y que quiere hacer las cosas bien delante de Dios, no va a querer compartir su techo, lecho, mesa, sentimientos de amor, con una persona que está completamente fuera del lugar en prioridades y en valores?
Ahora, lo que pasa es que en la vida hay de todo. Hay hombres que son flojos y mandilones (que hacen lo que dice la esposa.) y son grandotes. Si la mujer dice: -Hoy no vamos a ir a culto. El esposo (flojo) responde: –Sí mi amorcito, lo que usted diga. Cuando su posición debe ser: ¿Se te olvidó que Dios nos rescató y nos levantó; y nos ha puesto sobre una roca firme? ¿Que Dios nos ha bendecido y mira la familia que tenemos? Si vienes tú, con que no quieres ir al culto te quedas mi hija, nos vemos.
Quisiera hablar un poquitito acerca de la verdadera adoración. Permítame un poco de locura esta noche.
En el Antiguo Testamento la adoración tenía que ver con altares, pero, no altares de adoración; sino altares de la memoria, altares del recuerdo. Por ejemplo: “vas a levantar este altar para que cuando te pregunten tus hijos les digas: Jehová Dios nos hizo pasar por este mar con brazo fuerte y poderoso.” Altar del recuerdo, de la memoria, para que nunca se te olvide. Esos son los altares del que nos habla Antiguo Testamento.
También tenía que ver con los sacrificios. Cuando hablamos de sacrificios, hay dos tipos de sacrificios. Uno que ya no es requerido, el que se realizaba para el perdón de los pecados; por eso es que la gente traía los animalitos para derramar la sangre, y obtener el perdón de los pecados.
Pero, hay otro sacrificio; lo dice Romanos 12: 1(RV-60): Así que, hermanos, os ruego por la misericordia de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. Déjeme decirle algo iglesia: venir a la casa del Señor es un sacrificio. Muchos de ustedes el día miércoles llegan de sus trabajos, se dan un baño y se vienen al culto; todo esto requiere sacrificio, venir a la casa del Señor requiere sacrificio. También hay sacrificios de ofrenda. Piense en esto: todo el antiguo testamento está lleno de sacrificios de gratitud. Sacrificios de ofrendas, que Dios lo dictaminó. Más adelante hablaremos de eso
¿Qué dijo Jesús? En Juan 4:23 (RV-60) Más la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Entonces el Padre busca verdaderos adoradores.
¿Sabe usted mi hermano, que usted puede venir a la iglesia y no adorar? Esto es triste. Cuando yo estaba de viaje yo veía los cultos. Yo veía a la hora que están aquí los hermanos de alabanza, de adoración; guiando al pueblo en la adoración y hay gente que no canta. Los que piensan que con venir a la iglesia ya están adorando, no es así. La relación con Dios es una relación personal, es como su papá, es como su mamá; es una relación personal la que hay.
¿Sabe usted que hay personas que llegan tarde a los cultos, quince o veinte minutos después? ¿Sabe por qué? Porque no les importa. La pregunta que se tiene que hacer, no es si usted estuvo; la pregunta es: ¿usted adoró? Porque si Él es mi Dios, yo quiero adorar a mi Señor, yo quiero venir temprano, antes que el culto comience, ponerme a cuentas con Dios, hablar con nuestro Dios, nuestro Señor.
Quiero mencionar algunas cosas que son importantes, para que le queden allí guardadas en su corazón.
¿Por qué Dios dijo que David era el dulce cantor de Israel? ¿Por qué Dios dijo que David era el hombre conforme al corazón de Dios? ¿Qué había en el Antiguo Testamento? ¿Qué cosas obedeció David para que Dios dijeran semejante cosa?
Quiero que piense en estos principios de adoración.
- Antes de su adoración, Dios mira el corazón. Dios mira a la persona antes de la ofrenda.
Génesis 4: 4-5 (RV-60) 4Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de los más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda, 5pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante. Nos damos cuenta que la ofrenda de Caín y Abel fue evaluada por Dios. A Dios le interesa el tipo de ofrenda que nosotros presentamos, pero le interesa más la condición del corazón de la persona que lo ofrece. Dios miró con agrado a Abel, pero no miró con agrado a Caín ni a la ofrenda suya.
Algunas personas creen, erróneamente, que la razón por la que Dios aceptó la ofrenda de Abel es porque incluía sacrificio. Pero la Biblia no apoya tal conclusión, no está hablando de eso. Nosotros ya conocemos la historia, y podemos darnos cuenta que Caín era un hombre malo. ¿Qué cosa buena podía haber en su corazón si él deseaba matar a su propio hermano? ¿Qué había en su corazón en realidad? Dios antes de ver su ofrenda, mira su corazón.
¿Cómo es su actitud para Dios? Usted ve el venir a la iglesia como: “algo que tiene que hacer” o como: “algo que le llena de gozo el alma, por la gratitud que tiene con Él.” Dios mira a la persona, la ofrenda que le presentamos a Dios representa lo que Dios vale para nosotros. La ofrenda habla del individuo, por eso dice Dios: “vas a traer de lo más gordo de tu ofrenda, el más excelente sacrificio.”
Hebreos 11: 4 (RV-60) dice: Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella. ¿Qué significa eso? Que Dios antes de ver nuestra adoración, antes de ver que venimos a la iglesia, antes de ver cualquier cosa que hacemos; Dios mira el corazón nuestro antes de cualquier otra cosa. Es por eso que dejamos un tiempo para ponernos a cuentas con Dios, para pedirle perdón al Señor, y decirle: “Señor yo te amo, este soy yo Señor, ayúdame con mis cosas.” Dios mira el corazón de la persona, mira la sinceridad del corazón de la persona.
Si vemos a Abraham, ¿sabe qué vio Dios en la adoración de Abraham? Obediencia.
-Quiero que me ofrezcas a tu hijo, dice Dios. Y ¿qué respondió Abraham? –No Señor, mejor te canto un corito. -Quiero que me ofrezcas a tu hijo. –No, yo voy a levantar mis manos. –No Abraham, yo quiero que me ofrezcas a tu hijo. –No, yo voy a cerrar los ojos. Dios dice: Eso, lo hace cualquiera; pero lo que te estoy pidiendo eso no lo hace cualquiera. Porque Dios siempre nos pide lo que más nos cuesta dar. Siempre. Y uno como ya lo conoce; uno sabe lo que nos va a pedir el Señor. Y así mismo es. “Obediencia.”
Cuando Dios habla de la adoración de Daniel, ¿sabes qué es lo que Dios toma en cuenta? Su fidelidad. Tres veces al día, él abría sus ventanas en dirección a Jerusalén para orar. Daniel fue siervo, profeta del Señor. Iban reyes, venían reyes; y Daniel permanecía fiel.
No hay motivos, no hay razón, ni circunstancia que nos haga poner a Dios en segundo lugar. En esta semana, le he estado hablando a varias personas que no he visto en la casa del Señor. Siempre de la mejor manera, de la mejor forma porque los amamos, los queremos y deseamos verle pronto. No existe en este mundo nada, que pueda hacer que pongamos a Dios en segundo lugar.
Yo creo que el ser humano fue creado para adorar algo. El ser humano fue creado para tener devoción a algo. En la vida usted decide ¿qué quiere adorar? En la vida usted decide ¿a qué quiere tenerle devoción? Algunas personas, por ejemplo, adoran sus riquezas; otras personas adoran ídolos (por cantidades navegables). En el mundo hay quienes adoran a los hijos, a las esposas, a las madres, al éxito, al prestigio, al dinero.
Ahora, hay un nuevo ídolo que se ha levantado, ¿sabe cómo se llama? Comodidad, ¿no es cierto? Es que hay mucho frío, es que está lloviendo, es que van muchas personas y puedo enfermarme; otros dicen que hay mucho calor. El asunto es que siempre están inventando algo para no darle la alabanza y adoración a aquel que puso sus ojos en nosotros sin merecerlo, al que mandó a su Hijo a la cruz a morir por nosotros por gracia y misericordia. ¡Él es digno de nuestra alabanza y nuestra adoración! Pero la manera como tratamos el evangelio, como tratamos las cosas de Dios, habla del valor que Dios tiene para nosotros.
¿Usted quiere hablar de David? Hace un rato acabamos de leer sobre este tema.
1 Crónicas 29: 1-2 (RV-60): 1Después dijo el rey David a toda la asamblea: Solamente a Salomón mi hijo ha elegido Dios; él es joven y tierno de edad, y la obra grande; porque la casa no es para hombre, sino para Jehová Dios. 2Yo con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, oro para las cosas de oro, plata para las cosas de plata, bronce para las cosas de bronce, hierro para las de hierro, y madera para las de madera; y piedras de ónice, piedras preciosas, piedras negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, y piedras de mármol en abundancia.
Hay un estudioso que llama a David: “Un hombre de pasión”. David era apasionado en todo lo que hacía. Cuando iba danzando delante del arca, dice la Biblia que, iba danzando con todas sus fuerzas. A la hora de ofrendar para la casa del Señor dice: con todas mis fuerzas. Y a la hora de seguir a Betsabé, con todas sus fuerzas. Un nombre de pasión. ¿De qué habla esto? Esto habla de la actitud, entonces al hablar de adoración es imposible dejar de hablar de tu afecto en la casa de Dios.
Le dije una Señora en estos días, óigame desde cuando no los vemos. Ella me dijo: – ¡Ay pastor! Es que a mi esposo no le gusta ir a la iglesia, porque dice que ahí piden mucho dinero. Le dije: –No de dinero, si aquí a nadie se le obliga a dar. Lo que usted no da, lo da otro, créame. Pero escuche esto: Si usted no da, ¿será que usted cree en un Dios todopoderoso en la gloria, que Él es el que está pidiendo. No es el pastor, yo no quiero de su dinero; es para la obra del Señor. Pero le dije: –Bueno hermana, ¿y a qué iglesia están yendo? ¿Saben qué me dijo? — A ninguna. – ¡Ah! Usted ve, es pura mentira, son justificaciones.
Yo siempre he dicho algo: Si en esta iglesia, usted no crece, no crecerá nunca. Yo siempre dicho: “Si usted no crece con la palabra que se predique en este lugar, con los programas que se tienen en esta iglesia; entonces no va a crecer en ningún lado.” Usted se puede ir a otra iglesia, y dentro de un año o dos años, ya no va a ir a ningún lado. El evangelio es exigente, por eso nosotros somos exigentes. Lo que nosotros vivimos y hacemos, demuestra el valor que Dios tiene para nosotros.
David entendió el valor de Dios, y dio en abundancia todo lo que necesitaba Dios. Recuerde que el hombre nace para adorar algo, tenga cuidado no se esté adorando a usted mismo. A Dios hay que honrarlo. Tenga cuidado, y lo que usted sienta sea solamente simpatía por el evangelio y el corazón está vacío. Si en el corazón no está Dios, si en el corazón hay otras cosas; tenga cuidado.
Todas aquellas personas que son generosas con el reino, siempre tienen muchas cosas en la vida. Dios los bendice, los prospera en todo sentido; pueden hacer lo que quieran, ir donde quieran, comer lo que quieran y comprar lo que quieran; ¿por qué? Porque Dios no miente, y si Él te dice: “voy a abrir la ventana de los cielos, y voy a derramar bendición hasta que sobre abunde”. Él no te va a fallar jamás.
1 Crónicas 29: 3 (RV-60): Además de esto, por cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular oro y plata que, además de todas las cosas he preparado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios.
¿Vas a venir a adorar? ¿Cómo está tu afecto en la casa de Jehová? A mí me cuesta muchísimo trabajo entender, en realidad, cuando persona me dice: “es que estoy un poco desanimado.” Si supiera las veces que he estado desanimado yo, pero aquí estoy. Y obligado no estoy, yo solo le digo: Padre, te encargas tú de mi dolor. Pero, ¿sabe qué? No me dan ganas de quedarme en casa, yo quiero estar en la casa del Señor. Me es difícil que alguien me diga que cree en Dios, que ama a Dios, que adora a Dios; y que no asista a una iglesia.
1 Crónicas 29: 5 (RV-60): oro, pues, para las cosas de oro, y plata para las cosas de plata, y para toda obra de la mano de los artífices. ¿Y quién quiere hacer hoy ofrenda voluntaria Jehová?
Fue la pregunta que hizo David, y dice la escritura que la gente se desbordó de generosidad para el reino, para Dios. Dios no va a pasar desapercibido la generosidad de nadie, no Señor.
Yo les he contado, en varias oportunidades, que cuando llegamos a Canadá hace 33 años, mi esposa y yo vendimos todos los tiliches que teníamos en El Salvador, todo. De todo lo que vendimos dimos el diezmo a la iglesia, y cuando pusimos un pie aquí en Canadá hicimos lo mismo (volvimos a diezmar). Ya habíamos diezmado, sí; pero queríamos comenzar con el pie derecho en Canadá. Y después de 33 años, podemos decir: “Benditos sea el nombre del Señor, por todas sus bendiciones.” Muchos llegamos a este país, con una mano adelante y otra atrás. A mí no se me olvida, las personas que llegaron al apartamento en la doce avenida, las personas que llegaron con tenedores, cuchillos, cucharas, a nuestro apartamento; acabaditos de llegar. Mi esposa y yo salíamos a caminar todas las noches y siempre nos perdíamos. No se me olvida, esas personas que nos llevaron esas cositas ese día y siguieron ayudándonos.
Tiene que entender que la adoración es un conjunto de situaciones que Dios toma en consideración, Dios mira tu corazón, mira tú obediencia.
Otra cosa que es bien importante, Dios mira tu humildad. En varias oportunidades encontramos en las escrituras, a personas soberbias, y Dios dice claramente con relación a eso (Salmos 138:6): Jehová es excelso, atiende al humilde; más al activo mira de lejos. ¡Dios nos ayude!
Y David danzaba. Su mujer lo menospreció, pero él dijo: ¿sabes qué? Yo a mi Dios, lo seguiré adorando.
Oremos al Señor, demos gracias: Padre te damos gracias por el estudio de esta noche Señor. Oramos para que nos ayudes a crecer en determinación, y a entender que tú eres digno de nuestra alabanza, digno de nuestra adoración. Que nos conoces por nombre, así como un padre conoce a sus hijos. Así como un padre sabe quién de sus hijos tiene consideración, quién de sus hijos es cercano, quién de sus hijos lo atiende, lo ayuda; Dios sabe quién lo ama. Te pedimos perdón Padre, si todo este tiempo hemos estado haciendo las cosas al revés, ayúdanos Espíritu Santo, ayúdanos a hacer tu voluntad. Queremos obedecer a tu palabra bendita, queremos crecer en el conocimiento tuyo. Queremos que tú seas la persona más importante en nuestro diario caminar. Si hemos nacido para adorar algo, en este día te decimos con el alma: hemos decidido adorarte a ti Señor. Hemos decidido que tú seas el único ser que reciba nuestra alabanza y nuestra adoración. Porque tuyo es el poder y la gloria, por los siglos de los siglos.
Mientras oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón, pero quisiera hacerlo en esta noche, la invitación es para usted. Si hay alguien, que dice: Pastor yo necesito a Dios en mi vida, yo quiero recibir a Cristo en mi corazón. Yo le invito que levante su mano donde está o se ponga de pie, y nos deje orar por usted. ¿Hay alguna persona que siente la necesidad de recibir a Cristo hoy? Usted que no mira por internet, también puede hacer lo mismo a través de una oración de fe. Dígale al Señor: “Señor en este día, te pido perdón por mis pecados. Te doy gracias por lo que hiciste en la cruz; al poner tu cuerpo, al derramar tu sangre preciosa por mis pecados. Señor en este día, te entrego mi alma, te entrego mi corazón, te entrego mi vida.”
Padre querido, despídenos con tu paz y con tu bendición, en el nombre de Jesús: amén.
¡Que la paz de Cristo les acompañe mis amados hermanos! ¡Bendiciones para todos!