Calcularon mal
June 05, 2022 – 1:30PM | Lucas 14:28 | Dr. David Rodríguez
Descargar Texto: Sermón en PDF
TRANSCRIPCIÓN
En esta oportunidad quiero predicar un mensaje que es necesario. Yo tengo un compromiso bien grande en decirles cómo son las cosas en realidad. No cómo piensa la gente, sino que dice Dios.
Abran sus Biblias en Lucas 14:28 (RV-60), por favor. Quiero predicar un tema titulado: “Calcularon mal”. Quiero hablar de personas que no calcularon el precio de seguir a Jesús. Últimamente hablamos de familias que hace muchos años seguían a Jesús y ahora ya no. Hablamos de personas que eran miembros de una iglesia y ahora ya no. Sirvieron en una iglesia y ahora ya no. Fueron diáconos de una iglesia y ahora ya no. Cantaron detrás de los púlpitos evangélicos y ahora ya no; entonces nos surge una pregunta: ¿Qué pasó? Se me ocurre que calcularon mal, no calcularon el precio de seguir a Jesús.
Se dice por ahí que la salvación es gratis, es un regalo; decimos de esa manera, pero sabemos que hubo un precio que se pagó. Para la salvación usted no tiene que hacer nada más que invitar a Jesús a su vida, vivir para Cristo y someterse al Señor. La verdad que el discipulado tiene un precio y un precio bien elevado.
Déjeme decirle hermano que las cosas que vamos a exponer, en los próximos minutos, no tienen nada que ver conmigo, no tiene nada que ver con la iglesia, tiene que ver con usted y Dios. Entiéndase con Dios como usted pueda y como usted quiera. Yo en esta tarde le voy a decir la verdad.
Dice la palabra del Señor en Lucas 14:28 (RV-60) 28Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla? 29No sea que después que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla, todos los que lo vean comiencen a decir a hacer burla de él 30diciendo: Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar. 31¿O qué rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil? 32Y si no puede, cuando el otro está todavía lejos, le envía una embajada y le pide condiciones de paz. 33Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.
Que Dios bendiga esta palabra.
Este pasaje de la Biblia nos habla de calcular el costo de seguir a Jesús. Hermano hoy en día hay miles de personas, como dije hace un instante, que comenzaron bien la vida cristiana pero no calcularon el costo de seguir a Jesús y se apartaron. Comenzaron bien pero no terminaron, se apartaron. He escuchado a muchos pastores en las redes sociales decir que: “seguir a Jesús es fácil”; pero la verdad es que, eso no es lo que dice la Biblia. Hay un precio elevado y tenemos que considerarlo.
Yo quiero presentarles una lista, de varias, de esas cosas que la gente no calculó.
La salvación es lo más grande que le puede pasar a un individuo sobre la faz de la tierra, no hay otra cosa. Cuando yo le pregunto, ¿qué es lo mejor que le puede pasar a una persona en este mundo? No hay otra respuesta más que: “La Salvación en Cristo Jesús”, no hay otra respuesta. Es la única manera de poder ir a la Gloria, a través de Cristo Jesús. Estoy hablando en base a la Biblia, lo que la palabra del Señor nos enseña; no lo que le dijo a usted su abuela o su abuelo que eran viejos sabios; yo respeto.
Cuando venimos al evangelio, los primeros días que conocemos de Jesucristo le entregamos la vida al Señor y comenzamos a caminar en la vida cristiana; pero ignoramos muchas cosas. Que usted llegue hasta el final de la carrera, es mi deseo, que pueda decir como el apóstol Pablo: ¿Sabe qué? He acabado la carrera, he guardado la fe, he peleado la buena batalla. Yo no quiero que al final del día se quede sin completar la carrera porque no calculó bien, porque las cosas las hizo a su manera y no a la manera de Dios. Esto es un problema para los necios, los testarudos; que piensan que las cosas son como ellos dicen; esas personas van a necesitar una inmensa porción de la misericordia de Dios para hacer lo que Dios dice.
Este es un mensaje bien sencillo y ahí puede que esté el problema, en la sencillez de esto; puede que usted esté viviendo un evangelio a su manera y no un evangelio a la manera de Jesús. Un evangelio como usted lo concibe y no un evangelio como lo presenta Dios en la Biblia.
Leamos Lucas 14: 25 al 26 (RV-60): 25Grandes multitudes iban con él; y volviéndose, les dijo: 26 Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo. Me llama la atención esto, porque la idea que yo me hago es que Jesús iba caminando, y detrás de él un montón de gente. Entonces yo digo: yo sé que él es Dios, pero ¿qué cosa pasó que hizo que Jesús se detuviera y diera la vuelta?
Yo tengo una lista (que he resumido) de cosas que debemos cuidar, que no debemos ignorar en nuestra vida cristiana.
- Fe por encima de la familia He estado con pastores, en reunión de pastores donde los pastores me han dicho: “No primero es mi mujer y después lo que quieran”. Usted piense lo que quiera, yo le voy a decir lo que Dios dice.
La palabra aborrecer, no es que Dios le está diciendo que debe literalmente aborrecer a su mamá, a su papá, a sus hermanos o a su mujer. No; lo que está diciendo es que el amor a Dios debe estar por encima de toda su familia. Que usted no puede amar a su papá antes que a Dios, que usted no puede amar a su mujer antes que a Dios, que usted no puede amar a sus hijos antes que a Dios, y esto es algo delicado.
Yo conozco una gran cantidad de gente que no sirven a Dios, por sus hijos. Conozco gran cantidad de gente que no atienden a los servicios del Señor, por sus hijos; ¿me explico? Entonces yo creo que ésta sencillez de la palabra, las personas la pasan por encima de la cabeza creando un ambiente, donde viven la palabra, de acuerdo a como ellos la conciben y no como el Señor lo menciona acá.
Hermano, si Jesús le hubiera dicho a toda la gente casada: “Sígame”, y todos le hubieran dicho: “Señor, ¿y mis hijos, qué hago con ellos? Ay, Señora yo no puedo porque mi niña yo la acuesto a las siete de la noche. Hermano, ¿cómo usted cree que progresa o camina el evangelio?
¿Sabe cuál es la justificación de esta gente? Ellos piensan que estos versículos son para pastores, que estos versículos son para seminaristas, para aquellos que están en un instituto bíblico, para personas de otra especialidad y no para los creyentes. Lo está diciendo claro el Señor: “Yo tengo que ser prioridad”. Su mamá es importante, pero no más importante que Dios, ese es el asunto. Su esposo, su esposa, sus hijos, hermanos y todos nuestros familiares son importantes; pero Dios aquí dice: “No más importante que yo”. Entonces usted decide.
Se acuerda usted de aquel al que le dijo el Señor: “Sígueme”. Como el hombre dijo: “No, deja que primero entierre mi padre”. Jesús le dijo: “Si papaíto, no tengas pena hombre, si Dios es un Dios que entiende”. Eso es como la expresión que les digo es del diablo: “Dios conoce mi corazón” Toda las personas que yo conozco que la utilizan es para justificarse, para no hacer lo que Dios manda.
Tiene que entender que Dios demanda fe por encima de la familia. Hay familias que si el esposo no viene, la mujer tampoco. Si la esposa no viene, el marido tampoco. ¿Usted cree que esa gente está fundamentada en Dios? No, están jugando a la iglesia. No tienen una fe fundamentada en el Señor.
Yo conozco a un pastor que después de 25 largos años de pastorear una iglesia aquí en Canadá, la mujer un domingo iba, dos domingos faltaba, la esposa del pastor. Otro domingo iba y otros dos domingos faltaba. Llegó el día que ella no fue más. Y él dijo (es pastor, su esposo): “Mira hija la gente está preguntando por ti en la iglesia, ¿cuándo vas?” Ella dijo: “Ay me los saludas, ya no quiero ir.” Escuche a la esposa del pastor. Su esposo le dijo: “Bueno hija linda, tú ya conoces el evangelio, tú ya conoces la palabra, tú ya conoces a Dios, ¿verdad? Así el siguió en su iglesia los domingos, miércoles, siempre en la casa del Señor. Hoy en día, están separados, la señora le dijo: “Me aburrí” ¿Usted cree que uno se puede aburrir de Dios? Si Dios es el aire que respiramos. Yo conozco personas así.
Dios está diciendo la fe es por encima. Si tus hijos no quieren venir usted si viene a la casa del Señor. Yo les he dicho mientras los chamaquitos están pequeños uno los puede obligar, los puede arrastrar, porque al fin y al cabo no hay otra cosa que puedan hacer ellos. Pero cuando llegan a la mayoría de edad, ¿qué puede hacer usted? Decirle a sus hijos: ¿Sabes qué? Yo te enseñé la palabra, yo te prediqué el evangelio, tú ya sabes perfectamente bien a dónde van aquellos que no tienen a Dios como su Señor y su Salvador. No hay más nada que yo pueda hacer, nos vemos.
- Tiempo: Hay personas que prefieren la comodidad. Y aquí estamos hablando de compromiso por encima de conveniencia, “compromiso.”
Hoy en día es bien común que las personas se queden viendo los cultos por las redes sociales, yo insisto, si usted está lejos de la ciudad usted tiene que asistir a la iglesia de su localidad y luego ver los cultos que usted quiera. Las únicas personas que se podrían justificar por no estar en los cultos son aquellas que están enfermas, que no se pueden levantar de su cama. Pero si usted tiene buena las piernas, usted puede tomar un autobús, usted puede tomar un tren y usted puede ir a la casa del Señor.
El tiempo es un problema serio con el mundo evangélico en nuestros días. Entienda hermano que no se lo estoy exigiendo yo, se lo exige Dios.
Cuando Jesús le dijo a sus seguidores: “Sólo sígueme, sígueme, sígueme.” ¿Qué significa todo eso? Significa tiempo, significa tiempo. Tenga mucho cuidado si usted está demasiado ocupado en sus cosas, en sus empresas, bueno que Dios lo bendiga.
Hace unos días hablé por teléfono con una persona y le digo: “Papá, tengo tanto tiempo de no verte en la iglesia, ¿qué sucede? “Ay pastor, es que fíjese, donde yo vivo hay una directiva (de no sé qué) y ahora me han puesto de presidente de los padres de familia”. ¡Qué presidente ni que ocho cuartos! A ver qué es lo que le va a decir el Señor usted, porque si no tiene tiempo para adorarlo, si no tiene tiempo para servirle, si no tiene tiempo para honrarlo, ¿pero si tiene tiempo para usted?
Hermano tengo 40 años en el evangelio, son muchas las personas que se van de las iglesias por “el tiempo”. No hay tiempo para las cosas de Dios, pero si hay tiempo para ellos. Ese tiempo no se lo estoy exigiendo yo, se lo exige Dios, es el Señor.
Los judíos, el shabat, ese día es sagrado. Los creyentes debemos hacer lo mismo. Durante la semana busque el tiempo, Dios va a honrarle a usted si busca el tiempo. Pero el día domingo es día del Señor, estamos hablando de compromiso por encima de conveniencia.
- Oposición: He conocido personas que le han entregado su vida a Jesucristo y no quieren que sus familiares, allá en su país, se den cuenta. “Ah, me matan pastor”. ¿Y por qué lo van a matar? No porque ellos dicen que yo cambie de religión. Cristo no es una religión, Cristo es una fe, es una relación personal con Dios.
Hay oposición en todo sentido, es muy probable que en una familia usted sea el único o la única que conoce a Jesús. Que su mamá se burla de usted, sus hermanos, su papá. Como le decían a un chamaquito: “¿Ya vas a dejarle los diezmos al pastor? No papá es para la iglesia, es para el reino. “Deja de perder el tiempo en la iglesia y búscate una novia o ponte a estudiar.
En el evangelio hay oposición, en todo y en todos lados, en la casa, en el trabajo, con las amistades, con los amigos. Y hay que tener cuidado con eso.
Muchas personas se van a burlar de usted y si usted no calcula eso y no piensa en que usted ha tomado la mejor decisión de la vida, usted puede apartarse de Dios.
Recuerde que entregarle nuestra vida a Cristo es la mejor decisión que podemos tomar. Hay muchas personas que no calcularon la oposición.
- Complacer a otras personas: Muchos tenemos de ese defecto: tratar de complacer a la gente. La vida y los años y la experiencia le van a enseñar que no se puede complacer a todo el mundo, no puede tener contento a todo el mundo.
Hermano usted por complacer a su esposo, ¿va a descuidar a Dios? Por complacer a su mujer, ¿va a descuidar al Señor? Por complacer a sus hijos, ¿va a descuidar al Señor? Por complacer a sus nietos, ¿va a descuidar al Señor? Por complacer la familia, ¿va a descuidar el Señor?
Hay gente que quiere estar bien con todos y al final del día no complacen a Dios; y esto es una situación complicada para muchas personas, porque no calcularon eso. Quieren entregarle su vida al Señor pero quieren seguir viviendo de esa manera (complaciendo a otros). Hermanos hay gente que no calcula esto.
Servicio hermanos. Usted tiene que servir a Dios, la palabra lo dice en Lucas 4:8/ Mateo 4:10 (RV-60): Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.
Esta iglesia tiene actividades pero hasta decir ya no más. Mi hermano tenemos actividades desde los bebés hasta los que ya están cerca del reino. Si usted no participe es porque usted no le interesa. Busque servir a Dios, métase a ver de qué forma pone sus dones al servicio del Señor.
Y perdóneme, esto ya es una cosa mía, no ande buscando un ministerio donde le va a servir a Dios una vez al mes, ¡por favor! ¿Usted come una vez al mes? Usted sirva al Señor todos los días. Si tiene trabajo háblele a la gente, busque a los necesitados de Dios. Hay tanta necesidad espiritual como usted no tiene idea. Así es que sirva al Señor hermanos.
- Amar al mundo: Vivimos en el mundo, pero no se debe de amar a este mundo. Lastimosamente hay gente que tiene un pie en el evangelio y el otro pie en el antro, ¿verdad? Ese es un problema, en la vida cristiana no se puede.
Ahora, usted acaba de recibir a Jesucristo, espere que Dios va a ir haciendo la obra en usted. Somos un producto en el que Dios está trabajando todos los días. Usted simplemente entréguese al Señor. Dios está trabajando, usted simplemente entréguese y deje que Dios lo vaya llevando; usted se va a dar cuenta que: si usted quiere hacer las cosas bien, el Señor se irá encargando de poner las cosas en su lugar.
Hay un principio que usted debe entender como cristiano, y es que hay un lugar donde nosotros no cabemos. Hermanos la Biblia dice claramente 1Juan 2:15 (RV-60): No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
Hay gente que no lo calculó, hay personas que se pusieron a jugar con el mundo y con el correr de los años se quedaron en el mundo. Por ejemplo: Una persona que batalló muchísimo con el alcohol, bastante; al punto de terminar tirado en el piso de su cuarto por la embriaguez. El domingo con saquito (traje), perfume, cuatro cajetillas de chicle (para que no se le sienta el olorcito) y para la iglesia a servir. Entonces, ¿qué pasa? Está con el Señor y en el mundo, con el Señor y en el mundo; con el Señor y en el mundo. Hoy en día, nos movemos en un mundo espiritual, usted le dice: “Hermano, llégate a la iglesia.” Te dice: “Es que no sé, ya no siento el mismo deseo.” Ya perdió el deseo de volver a los caminos de Dios. ¿Usted cree que Dios se lo quitó? Su mamá, es creyente, le habló; el papá le habló, le hablé yo, le habló su exnovia, todos le dijimos que volviera a los caminos del evangelio. Él se queda con esa situación de: “un día de estos” Si hombre, un día de estos, un día de estos se va a morir, y va a morir fuera de los caminos del evangelio.
Es que no os engañéis, Dios no puede ser burlado. Todo lo que el hombre sembrare eso también segará. Hermano no es un evangelio a su manera, no es un evangelio como usted lo concibe, es el evangelio como está escrito, aquí en la palabra de Dios.
- Pruebas: En la vida cristiana te van a venir pruebas.
Hermano yo conozco gente que le han venido pruebas y no las soportaron. Como no las soportaron, ¿qué fue lo que hicieron? Agarraron camino para afuera. Dígame si todos no hemos tenido que atravesar pruebas, hemos pasado por mucho.
- La Iglesia es Imperfecta: Quiero hablarle a las personas que están nuevas en nuestra iglesia, la iglesia es imperfecta. Quiero que se meta eso en la cabeza y en el corazón. Si usted pensó que aquí iba a encontrar gente santa, santísima, que vuelan (como ángeles); se equivocó. No solo en esta iglesia, sino en todas. Usted se puede encontrar con alguna persona malcriada sí, digo eso lastimosamente y con vergüenza. Tratamos de que no se den situaciones desagradables, pero es cierto que hay personas malcriadas e hipócritas.
Como pastor de esta congregación, que los quiero muchísimo a todos, le estoy diciendo la verdad en su cara, usted va a tener que aprender con quién tiene confianza y con quién no. La iglesia es imperfecta. Habrá alguien que le puede responder feo, esa persona necesita a Cristo, hay de todo en la viña del Señor.
Pero también hay gente maravillosa hermanos, gente muy linda. Se dice que no debemos poner las manos en el fuego por nadie, pero yo las pondría por varias personas de esta congregación. Hablo de gente honesta, personas sabias; y no es necesario llegar a viejo para ser sabio, algunas personas son jóvenes y sabios.
Mucha gente no calculó esto cuando se acercó a una iglesia y por eso tenemos un montón de gente allá afuera. Hay quien dice: “Hace años trabajé con una persona de la iglesia y me bajó.” Pero eso no significa que usted tenga que apartarse de los caminos de Dios, no señor.
- Tenemos un enemigo que quiere destruirnos: Tenemos un enemigo y, aún como cristiano que somos, nos va a meter cosas en la cabeza.
Estaba escuchando a un teólogo decir que: “Cuando la serpiente habló con Eva (porque así lo dice la escritura), a él le parece que no le habló audiblemente; sino que le puso en su mente esas ideas, porque Adán estaba ahí, si verdaderamente Adán hubiera visto a la serpiente hablando con su mujer se hubiera metido, ¿verdad? El diablo te mete cosas en la cabeza, eso hay que entenderlo y aceptarlo.
Cuando usted comienza a pensar cosas fuera del lugar o cosas que no tienen nada que ver con el reino, nada que ver con el evangelio, reconozca que es el diablo que le está metiendo tonteras en la cabeza; y vuelva otra vez al camino del Señor. Tenemos un enemigo que quiere destruirnos por completo y estas son parte de las cosas que la gente no calcula y como no la calcularon, ¿qué pasó? Comenzaron a edificar una torre y se quedaron a la mitad, y esto da tristeza en realidad.
Estaba en mi país (El Salvador) hace unos meses atrás y me hablaron de una persona que tocaba la guitarra en la iglesia. Hermanos tocaba la guitarra, muy bonito cantaba este hombre, en aquel entonces. Me lo encuentro, mientras yo comía con algunos hermanos, ¿y qué pasó, cómo estás? Él me dijo que ya no se congrega. “Pero que fue lo que pasó”, pregunté yo. Me dijo: –No sé. “¿Pero qué pasó, y Dios, y tu mujer?” ¡No divorciamos hace tantos años! Hermano, es mucha la tristeza, imaginen que sea su hijo o su hija. ¿Cómo es posible? ¿Cómo es posible que personas que sirvieron, ya no se congreguen?
- Dios es soberano: Este es uno de los costos más difíciles que hay. En la vida cristiana pasan cosas que a usted no le va a gustar y que no las va a entender, y ese precio hay mucha gente que no lo entiende. Se apartan del evangelio porque se murió su mamá, porque se murió su hijo, porque se murió su hija, porque mi hermano tiene cáncer, porque tal cosa, porque esto, porque lo otro.
Hermano, el hecho que usted sea cristiano evangélico no quiere decir que el día que se presenta en la corte el juez le va a decir: “Bienvenido a Canadá”. ¡Cosas pasan! Yo tengo personas en la ciudad de México que todavía me escriben, personas que pasaron por esta iglesia, que recibieron a Cristo, se bautizaron y no se congregan. Me dicen: “No me congrego pastor desde que Dios nos echó de Canadá”. ¡Imagínese usted! “Yo le digo a Dios que yo voy a volver a sus caminos si él deja que yo regrese allá.” ¿No me diga, pues? En la vida cristiana pasan cosas que no te van a gustar hermano, ¿qué es lo que tienes que hacer? Aceptarlas y seguir caminando.
Su matrimonio no funcionó como usted quería que funcionara, ¿y qué va a hacer? ¿Ponerse a llorar en la cama el resto de sus días? Pues da gracias a Dios que apareció esa prueba y siga adelante. Habrán muchas cosas que no entedemos.
En estos últimos 20 y pico de años, pastores y amigos, han querido filosofar la razón por la que mi esposa tiene 20 años en una silla de ruedas, ¿y yo qué sé? Los doctores dicen que es una en un millón, dicen que esa enfermedad es muy rara, que no nos pueden decir qué es lo que va a pasa. El día que fuimos al médico, dijeron que podía durar cinco años, como que puede durar toda la vida. Es que es una en un millón, no sabemos. ¿Entonces tenemos que ponernos a llorar, y dejar de seguir adelante? No se puede. Entonces entienda que Dios es soberano, en la vida cristiana pasan cosas que no nos gustan, que no entendemos y lo que hay que hacer es levantarse y seguir caminando.
Hay personas que no calcularon nunca que Dios exige relación por encima de religión. Si las personas que se han apartado de Dios y del evangelio, hubiesen tenido comunión con Dios, con el Padre, con el Dios de la Gloria; no se hubiesen apartado del Señor. Pero ellos tenían religión, la biblia la dejaban en el baúl del carro solo la usaban el día que venían al culto, el domingo una horita nada más y se acabó. Durante el resto de la semana no hay relación con el Señor, no hay un tiempo de comunión mañana, tarde y noche, durante el día todas las veces que desee. Hermano yo hablo con Dios, todo el día, hasta para encontrar parqueo. Es que nadie ha dicho que usted tiene que buscar un tiempo y es ese tiempo nada más. Todo el día hable con Dios, que le de sabiduría. Si va a hacer una visita pídale al Señor que le ayude, que lo bendiga en todo aspecto, en toda situación. Padre perdóname por esta imprudencia, Señor que feo esto que dije, Señor ayúdame con “tal” cosa. Esa es una relación constante y Dios demanda relación por encima de cualquier religión.
- Sacrificio: Lucas 9:23 (RV-60) Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame.
Esto es de lo más complicado que hay, porque la verdad es que la mayoría de los que estamos acá, o tal vez la mitad, quizá un poquito menos de la mitad se van a quedar en casa en esta tarde. Nada malo con eso. Pero ¿sabe por qué? Porque usted prefiere descansar que regresar a la iglesia, usted prefiere Netflix. Entonces, ¿qué pasa? Que en su mentalidad usted con venir al mediodía ya cumplió, ¿no es cierto? Ya con eso nos lavamos pues, ya tenemos derecho a faltar en la noche y el miércoles; porque ya estuvimos el domingo. Eso es religión, hombre, eso no es una relación. Eso quiere decir que usted todavía no le ha encontrado el gusto al evangelio, no ha encontrado el sabor de sentirse bien en la casa de Dios, de gozar. De estar aquí no por la fuerza, no porque lo obligan.
Una de las cosas que a mí me encantaría de tener dinero, ¿sabe que sería? No recibir un salario. ¿Usted cree que yo dejaría de venir? No hermano, vendría con el mayor de los gustos, con el anhelo con el que lo hago. ¡Con lo que me gusta estar en la casa de Dios!
Así es la vida cristiana, exige sacrificio.
- Obediencia: ¡Ay Dios mío! Aquellos que somos padres, ¿cómo nos sentimos cuando nuestros hijos no nos hacen caso? Algunos de ellos son medios tontitos, porque les decimos te vas a quemar, hijo te vas a quemar, y al ratito viene llorando: ya ves por bruto, te lo dije. Algunos crecen y así se quedan.
¿Cuántos hijos nuestros se quedaron en la casa este día? “Hijo vamos a la iglesia.” –Algún día te caigo por ahí. Imagine, como si tuviéramos que rogarles para venir a adorar al Rey del universo, al Rey de Reyes y Señor de Señores.
¿Cuántas veces dejamos de venir a la casa del Señor por ver un partido? Esto habla de sacrificio, habla de obediencia. Si Dios dice: “Hay que hacerlo.” Hermano hay que hacerlo, no se dice nada más.
- Perseverancia: Este es el costo, el precio que mucha gente no calculó. Esto yo lo puedo hablar con amplitud. Desde 1979 que conocí a Jesucristo, por la Gracia de Dios hermano, yo nunca me he apartado el evangelio; yo jamás me he quedado en la casa porque tenga algo que hacer. Nunca me he quedado en la casa porque mis hijos estaban “mocositos”, así los traíamos.
A mí me fascinó el viernes pasado andaban los niñitos, los hijos de ustedes, dando vueltas para un lado, corriendo por otro, agarraron una bicicleta que estaba para la venta y se subieron a ella; a mí me encanta eso, me fascinan. Mis hijos así crecieron en esta iglesia, haciendo relajo, corriendo para todos lados. Pero crecieron en la casa de Dios, sus hijos y los míos, ahora ya tienen hijos ellos también; Dios mío, imagínate, hoy algunos ya son abuelos.
Imagínate me encanta eso, ¡qué bonita, la perseverancia! Que pasen los años, que pasen las generaciones y poder decir como muchos de acá dicen: “Pastor yo conocí a Cristo hace 30 años, nunca me he apartado, nunca me he quedado en la casa, nunca me he ido a comprar”
Acaso Dios no es su prioridad? Deje de vivir un evangelio a su manera. Calcule el costo del discipulado, sino dice la palabra: No puede ser mi discípulo. Esa es palabra de Dios, no palabra del pastor, no palabra de su abuelo. Es palabra de Dios la que tiene enfrente, es el Señor que le está hablando. Si cumpliéramos eso el mundo sería diferente si viviéramos de esta manera. Otras personas se sentirían diferentes si el evangelio fuera de esta manera. Nuestras vidas serían diferentes si viviéramos de esta manera.
Inclinen su rostro hermano, oremos al Señor.
Padre esta palabra nos habla en este día que ser tus discípulos tiene un costo elevado, y eso es lo que tu palabra nos dice al corazón en este día. A entender que el Señor Jesucristo pagó un precio en la cruz del calvario, para que nosotros podamos hacer nuestro el camino hacia la bendición. Señor cuando nos sometemos a esta palabra descubrimos que lo que encontramos es un panal de miel. Todo lo que muchas personas consideran que esto cuesta mucho dejarlo, nos venimos a dar cuenta que lo que encontramos es bendición. Encontramos paz, encontramos gozo, encontramos tranquilidad, bendición a nuestro alrededor. Oramos por esa multitud de personas, que de una u otra forma Señor se han apartado de tus caminos, que en este día no están siguiendo tus pasos, que ahora mismo viven como si nunca te hubieran conocido. Señor ten misericordia y guárdanos a nosotros también, guárdanos Padre. De tal manera que podamos permanecer firmes y fieles, hasta el día que tú nos llames a tu presencia. Señor te ruego por aquellas personas que han de escuchar este mensaje en otras partes del mundo. También que pueda ser de bendición y que pueda hacerlos reflexionar de la necesidad de buscar tu rostro de buscar tu presencia, Señor.
Mientras todos oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón, déjeme decirle que Dios le ama. Dios tiene un plan para su vida. Dios quiere salvarle, quiere perdonarle y si usted nunca ha recibido a Jesús hoy puede hacerlo. Si hay alguien con nosotros en esta hora que dice: “Pastor yo necesito a Dios en mi vida. Yo quiero comenzar una vida nueva tomado de la mano con mi Señor, una vida de fe, una vida de comunión con Dios”. Si hay alguien que quiere recibir a Cristo en el corazón, ahí donde está, yo le hago la invitación para que se ponga de pie o levante su mano. Si usted quiere recibir a Cristo, si quiere entregarle su vida al Señor; hay alguien que se va a acercar a usted para hacer esta oración con ustedes e invitarle a tener una relación personal con Cristo Jesús. Usted que nos mira por internet, también usted puede hacer lo mismo a través de una oración de fe, dígale al Señor: “Señor en este día te pido perdón por mis pecados. Reconozco lo que hiciste en la cruz. Te recibo como mi Señor, mi Salvador y me arrepiento de todas mis faltas.” Si usted hizo esta oración yo quiero animarle a crecer en el conocimiento de Dios y su bendita palabra.
Padre querido gracias por tu palabra, despídenos con tu paz, con tu bendición en el nombre de Jesús, amén y amén.
Amado mío, que la paz de Cristo les acompañe, ¡Bendiciones!
Calcularon mal
June 05, 2022 – 1:30PM | Lucas 14:28 | Dr. David Rodríguez
Etiquetas: junio 2022, lucas, pastor david rodriguez, transcripcion
Descargar Texto: Sermón en PDF
TRANSCRIPCIÓN
En esta oportunidad quiero predicar un mensaje que es necesario. Yo tengo un compromiso bien grande en decirles cómo son las cosas en realidad. No cómo piensa la gente, sino que dice Dios.
Abran sus Biblias en Lucas 14:28 (RV-60), por favor. Quiero predicar un tema titulado: “Calcularon mal”. Quiero hablar de personas que no calcularon el precio de seguir a Jesús. Últimamente hablamos de familias que hace muchos años seguían a Jesús y ahora ya no. Hablamos de personas que eran miembros de una iglesia y ahora ya no. Sirvieron en una iglesia y ahora ya no. Fueron diáconos de una iglesia y ahora ya no. Cantaron detrás de los púlpitos evangélicos y ahora ya no; entonces nos surge una pregunta: ¿Qué pasó? Se me ocurre que calcularon mal, no calcularon el precio de seguir a Jesús.
Se dice por ahí que la salvación es gratis, es un regalo; decimos de esa manera, pero sabemos que hubo un precio que se pagó. Para la salvación usted no tiene que hacer nada más que invitar a Jesús a su vida, vivir para Cristo y someterse al Señor. La verdad que el discipulado tiene un precio y un precio bien elevado.
Déjeme decirle hermano que las cosas que vamos a exponer, en los próximos minutos, no tienen nada que ver conmigo, no tiene nada que ver con la iglesia, tiene que ver con usted y Dios. Entiéndase con Dios como usted pueda y como usted quiera. Yo en esta tarde le voy a decir la verdad.
Dice la palabra del Señor en Lucas 14:28 (RV-60) 28Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla? 29No sea que después que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla, todos los que lo vean comiencen a decir a hacer burla de él 30diciendo: Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar. 31¿O qué rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil? 32Y si no puede, cuando el otro está todavía lejos, le envía una embajada y le pide condiciones de paz. 33Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.
Que Dios bendiga esta palabra.
Este pasaje de la Biblia nos habla de calcular el costo de seguir a Jesús. Hermano hoy en día hay miles de personas, como dije hace un instante, que comenzaron bien la vida cristiana pero no calcularon el costo de seguir a Jesús y se apartaron. Comenzaron bien pero no terminaron, se apartaron. He escuchado a muchos pastores en las redes sociales decir que: “seguir a Jesús es fácil”; pero la verdad es que, eso no es lo que dice la Biblia. Hay un precio elevado y tenemos que considerarlo.
Yo quiero presentarles una lista, de varias, de esas cosas que la gente no calculó.
La salvación es lo más grande que le puede pasar a un individuo sobre la faz de la tierra, no hay otra cosa. Cuando yo le pregunto, ¿qué es lo mejor que le puede pasar a una persona en este mundo? No hay otra respuesta más que: “La Salvación en Cristo Jesús”, no hay otra respuesta. Es la única manera de poder ir a la Gloria, a través de Cristo Jesús. Estoy hablando en base a la Biblia, lo que la palabra del Señor nos enseña; no lo que le dijo a usted su abuela o su abuelo que eran viejos sabios; yo respeto.
Cuando venimos al evangelio, los primeros días que conocemos de Jesucristo le entregamos la vida al Señor y comenzamos a caminar en la vida cristiana; pero ignoramos muchas cosas. Que usted llegue hasta el final de la carrera, es mi deseo, que pueda decir como el apóstol Pablo: ¿Sabe qué? He acabado la carrera, he guardado la fe, he peleado la buena batalla. Yo no quiero que al final del día se quede sin completar la carrera porque no calculó bien, porque las cosas las hizo a su manera y no a la manera de Dios. Esto es un problema para los necios, los testarudos; que piensan que las cosas son como ellos dicen; esas personas van a necesitar una inmensa porción de la misericordia de Dios para hacer lo que Dios dice.
Este es un mensaje bien sencillo y ahí puede que esté el problema, en la sencillez de esto; puede que usted esté viviendo un evangelio a su manera y no un evangelio a la manera de Jesús. Un evangelio como usted lo concibe y no un evangelio como lo presenta Dios en la Biblia.
Leamos Lucas 14: 25 al 26 (RV-60): 25Grandes multitudes iban con él; y volviéndose, les dijo: 26 Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo. Me llama la atención esto, porque la idea que yo me hago es que Jesús iba caminando, y detrás de él un montón de gente. Entonces yo digo: yo sé que él es Dios, pero ¿qué cosa pasó que hizo que Jesús se detuviera y diera la vuelta?
Yo tengo una lista (que he resumido) de cosas que debemos cuidar, que no debemos ignorar en nuestra vida cristiana.
- Fe por encima de la familia He estado con pastores, en reunión de pastores donde los pastores me han dicho: “No primero es mi mujer y después lo que quieran”. Usted piense lo que quiera, yo le voy a decir lo que Dios dice.
La palabra aborrecer, no es que Dios le está diciendo que debe literalmente aborrecer a su mamá, a su papá, a sus hermanos o a su mujer. No; lo que está diciendo es que el amor a Dios debe estar por encima de toda su familia. Que usted no puede amar a su papá antes que a Dios, que usted no puede amar a su mujer antes que a Dios, que usted no puede amar a sus hijos antes que a Dios, y esto es algo delicado.
Yo conozco una gran cantidad de gente que no sirven a Dios, por sus hijos. Conozco gran cantidad de gente que no atienden a los servicios del Señor, por sus hijos; ¿me explico? Entonces yo creo que ésta sencillez de la palabra, las personas la pasan por encima de la cabeza creando un ambiente, donde viven la palabra, de acuerdo a como ellos la conciben y no como el Señor lo menciona acá.
Hermano, si Jesús le hubiera dicho a toda la gente casada: “Sígame”, y todos le hubieran dicho: “Señor, ¿y mis hijos, qué hago con ellos? Ay, Señora yo no puedo porque mi niña yo la acuesto a las siete de la noche. Hermano, ¿cómo usted cree que progresa o camina el evangelio?
¿Sabe cuál es la justificación de esta gente? Ellos piensan que estos versículos son para pastores, que estos versículos son para seminaristas, para aquellos que están en un instituto bíblico, para personas de otra especialidad y no para los creyentes. Lo está diciendo claro el Señor: “Yo tengo que ser prioridad”. Su mamá es importante, pero no más importante que Dios, ese es el asunto. Su esposo, su esposa, sus hijos, hermanos y todos nuestros familiares son importantes; pero Dios aquí dice: “No más importante que yo”. Entonces usted decide.
Se acuerda usted de aquel al que le dijo el Señor: “Sígueme”. Como el hombre dijo: “No, deja que primero entierre mi padre”. Jesús le dijo: “Si papaíto, no tengas pena hombre, si Dios es un Dios que entiende”. Eso es como la expresión que les digo es del diablo: “Dios conoce mi corazón” Toda las personas que yo conozco que la utilizan es para justificarse, para no hacer lo que Dios manda.
Tiene que entender que Dios demanda fe por encima de la familia. Hay familias que si el esposo no viene, la mujer tampoco. Si la esposa no viene, el marido tampoco. ¿Usted cree que esa gente está fundamentada en Dios? No, están jugando a la iglesia. No tienen una fe fundamentada en el Señor.
Yo conozco a un pastor que después de 25 largos años de pastorear una iglesia aquí en Canadá, la mujer un domingo iba, dos domingos faltaba, la esposa del pastor. Otro domingo iba y otros dos domingos faltaba. Llegó el día que ella no fue más. Y él dijo (es pastor, su esposo): “Mira hija la gente está preguntando por ti en la iglesia, ¿cuándo vas?” Ella dijo: “Ay me los saludas, ya no quiero ir.” Escuche a la esposa del pastor. Su esposo le dijo: “Bueno hija linda, tú ya conoces el evangelio, tú ya conoces la palabra, tú ya conoces a Dios, ¿verdad? Así el siguió en su iglesia los domingos, miércoles, siempre en la casa del Señor. Hoy en día, están separados, la señora le dijo: “Me aburrí” ¿Usted cree que uno se puede aburrir de Dios? Si Dios es el aire que respiramos. Yo conozco personas así.
Dios está diciendo la fe es por encima. Si tus hijos no quieren venir usted si viene a la casa del Señor. Yo les he dicho mientras los chamaquitos están pequeños uno los puede obligar, los puede arrastrar, porque al fin y al cabo no hay otra cosa que puedan hacer ellos. Pero cuando llegan a la mayoría de edad, ¿qué puede hacer usted? Decirle a sus hijos: ¿Sabes qué? Yo te enseñé la palabra, yo te prediqué el evangelio, tú ya sabes perfectamente bien a dónde van aquellos que no tienen a Dios como su Señor y su Salvador. No hay más nada que yo pueda hacer, nos vemos.
- Tiempo: Hay personas que prefieren la comodidad. Y aquí estamos hablando de compromiso por encima de conveniencia, “compromiso.”
Hoy en día es bien común que las personas se queden viendo los cultos por las redes sociales, yo insisto, si usted está lejos de la ciudad usted tiene que asistir a la iglesia de su localidad y luego ver los cultos que usted quiera. Las únicas personas que se podrían justificar por no estar en los cultos son aquellas que están enfermas, que no se pueden levantar de su cama. Pero si usted tiene buena las piernas, usted puede tomar un autobús, usted puede tomar un tren y usted puede ir a la casa del Señor.
El tiempo es un problema serio con el mundo evangélico en nuestros días. Entienda hermano que no se lo estoy exigiendo yo, se lo exige Dios.
Cuando Jesús le dijo a sus seguidores: “Sólo sígueme, sígueme, sígueme.” ¿Qué significa todo eso? Significa tiempo, significa tiempo. Tenga mucho cuidado si usted está demasiado ocupado en sus cosas, en sus empresas, bueno que Dios lo bendiga.
Hace unos días hablé por teléfono con una persona y le digo: “Papá, tengo tanto tiempo de no verte en la iglesia, ¿qué sucede? “Ay pastor, es que fíjese, donde yo vivo hay una directiva (de no sé qué) y ahora me han puesto de presidente de los padres de familia”. ¡Qué presidente ni que ocho cuartos! A ver qué es lo que le va a decir el Señor usted, porque si no tiene tiempo para adorarlo, si no tiene tiempo para servirle, si no tiene tiempo para honrarlo, ¿pero si tiene tiempo para usted?
Hermano tengo 40 años en el evangelio, son muchas las personas que se van de las iglesias por “el tiempo”. No hay tiempo para las cosas de Dios, pero si hay tiempo para ellos. Ese tiempo no se lo estoy exigiendo yo, se lo exige Dios, es el Señor.
Los judíos, el shabat, ese día es sagrado. Los creyentes debemos hacer lo mismo. Durante la semana busque el tiempo, Dios va a honrarle a usted si busca el tiempo. Pero el día domingo es día del Señor, estamos hablando de compromiso por encima de conveniencia.
- Oposición: He conocido personas que le han entregado su vida a Jesucristo y no quieren que sus familiares, allá en su país, se den cuenta. “Ah, me matan pastor”. ¿Y por qué lo van a matar? No porque ellos dicen que yo cambie de religión. Cristo no es una religión, Cristo es una fe, es una relación personal con Dios.
Hay oposición en todo sentido, es muy probable que en una familia usted sea el único o la única que conoce a Jesús. Que su mamá se burla de usted, sus hermanos, su papá. Como le decían a un chamaquito: “¿Ya vas a dejarle los diezmos al pastor? No papá es para la iglesia, es para el reino. “Deja de perder el tiempo en la iglesia y búscate una novia o ponte a estudiar.
En el evangelio hay oposición, en todo y en todos lados, en la casa, en el trabajo, con las amistades, con los amigos. Y hay que tener cuidado con eso.
Muchas personas se van a burlar de usted y si usted no calcula eso y no piensa en que usted ha tomado la mejor decisión de la vida, usted puede apartarse de Dios.
Recuerde que entregarle nuestra vida a Cristo es la mejor decisión que podemos tomar. Hay muchas personas que no calcularon la oposición.
- Complacer a otras personas: Muchos tenemos de ese defecto: tratar de complacer a la gente. La vida y los años y la experiencia le van a enseñar que no se puede complacer a todo el mundo, no puede tener contento a todo el mundo.
Hermano usted por complacer a su esposo, ¿va a descuidar a Dios? Por complacer a su mujer, ¿va a descuidar al Señor? Por complacer a sus hijos, ¿va a descuidar al Señor? Por complacer a sus nietos, ¿va a descuidar al Señor? Por complacer la familia, ¿va a descuidar el Señor?
Hay gente que quiere estar bien con todos y al final del día no complacen a Dios; y esto es una situación complicada para muchas personas, porque no calcularon eso. Quieren entregarle su vida al Señor pero quieren seguir viviendo de esa manera (complaciendo a otros). Hermanos hay gente que no calcula esto.
Servicio hermanos. Usted tiene que servir a Dios, la palabra lo dice en Lucas 4:8/ Mateo 4:10 (RV-60): Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.
Esta iglesia tiene actividades pero hasta decir ya no más. Mi hermano tenemos actividades desde los bebés hasta los que ya están cerca del reino. Si usted no participe es porque usted no le interesa. Busque servir a Dios, métase a ver de qué forma pone sus dones al servicio del Señor.
Y perdóneme, esto ya es una cosa mía, no ande buscando un ministerio donde le va a servir a Dios una vez al mes, ¡por favor! ¿Usted come una vez al mes? Usted sirva al Señor todos los días. Si tiene trabajo háblele a la gente, busque a los necesitados de Dios. Hay tanta necesidad espiritual como usted no tiene idea. Así es que sirva al Señor hermanos.
- Amar al mundo: Vivimos en el mundo, pero no se debe de amar a este mundo. Lastimosamente hay gente que tiene un pie en el evangelio y el otro pie en el antro, ¿verdad? Ese es un problema, en la vida cristiana no se puede.
Ahora, usted acaba de recibir a Jesucristo, espere que Dios va a ir haciendo la obra en usted. Somos un producto en el que Dios está trabajando todos los días. Usted simplemente entréguese al Señor. Dios está trabajando, usted simplemente entréguese y deje que Dios lo vaya llevando; usted se va a dar cuenta que: si usted quiere hacer las cosas bien, el Señor se irá encargando de poner las cosas en su lugar.
Hay un principio que usted debe entender como cristiano, y es que hay un lugar donde nosotros no cabemos. Hermanos la Biblia dice claramente 1Juan 2:15 (RV-60): No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
Hay gente que no lo calculó, hay personas que se pusieron a jugar con el mundo y con el correr de los años se quedaron en el mundo. Por ejemplo: Una persona que batalló muchísimo con el alcohol, bastante; al punto de terminar tirado en el piso de su cuarto por la embriaguez. El domingo con saquito (traje), perfume, cuatro cajetillas de chicle (para que no se le sienta el olorcito) y para la iglesia a servir. Entonces, ¿qué pasa? Está con el Señor y en el mundo, con el Señor y en el mundo; con el Señor y en el mundo. Hoy en día, nos movemos en un mundo espiritual, usted le dice: “Hermano, llégate a la iglesia.” Te dice: “Es que no sé, ya no siento el mismo deseo.” Ya perdió el deseo de volver a los caminos de Dios. ¿Usted cree que Dios se lo quitó? Su mamá, es creyente, le habló; el papá le habló, le hablé yo, le habló su exnovia, todos le dijimos que volviera a los caminos del evangelio. Él se queda con esa situación de: “un día de estos” Si hombre, un día de estos, un día de estos se va a morir, y va a morir fuera de los caminos del evangelio.
Es que no os engañéis, Dios no puede ser burlado. Todo lo que el hombre sembrare eso también segará. Hermano no es un evangelio a su manera, no es un evangelio como usted lo concibe, es el evangelio como está escrito, aquí en la palabra de Dios.
- Pruebas: En la vida cristiana te van a venir pruebas.
Hermano yo conozco gente que le han venido pruebas y no las soportaron. Como no las soportaron, ¿qué fue lo que hicieron? Agarraron camino para afuera. Dígame si todos no hemos tenido que atravesar pruebas, hemos pasado por mucho.
- La Iglesia es Imperfecta: Quiero hablarle a las personas que están nuevas en nuestra iglesia, la iglesia es imperfecta. Quiero que se meta eso en la cabeza y en el corazón. Si usted pensó que aquí iba a encontrar gente santa, santísima, que vuelan (como ángeles); se equivocó. No solo en esta iglesia, sino en todas. Usted se puede encontrar con alguna persona malcriada sí, digo eso lastimosamente y con vergüenza. Tratamos de que no se den situaciones desagradables, pero es cierto que hay personas malcriadas e hipócritas.
Como pastor de esta congregación, que los quiero muchísimo a todos, le estoy diciendo la verdad en su cara, usted va a tener que aprender con quién tiene confianza y con quién no. La iglesia es imperfecta. Habrá alguien que le puede responder feo, esa persona necesita a Cristo, hay de todo en la viña del Señor.
Pero también hay gente maravillosa hermanos, gente muy linda. Se dice que no debemos poner las manos en el fuego por nadie, pero yo las pondría por varias personas de esta congregación. Hablo de gente honesta, personas sabias; y no es necesario llegar a viejo para ser sabio, algunas personas son jóvenes y sabios.
Mucha gente no calculó esto cuando se acercó a una iglesia y por eso tenemos un montón de gente allá afuera. Hay quien dice: “Hace años trabajé con una persona de la iglesia y me bajó.” Pero eso no significa que usted tenga que apartarse de los caminos de Dios, no señor.
- Tenemos un enemigo que quiere destruirnos: Tenemos un enemigo y, aún como cristiano que somos, nos va a meter cosas en la cabeza.
Estaba escuchando a un teólogo decir que: “Cuando la serpiente habló con Eva (porque así lo dice la escritura), a él le parece que no le habló audiblemente; sino que le puso en su mente esas ideas, porque Adán estaba ahí, si verdaderamente Adán hubiera visto a la serpiente hablando con su mujer se hubiera metido, ¿verdad? El diablo te mete cosas en la cabeza, eso hay que entenderlo y aceptarlo.
Cuando usted comienza a pensar cosas fuera del lugar o cosas que no tienen nada que ver con el reino, nada que ver con el evangelio, reconozca que es el diablo que le está metiendo tonteras en la cabeza; y vuelva otra vez al camino del Señor. Tenemos un enemigo que quiere destruirnos por completo y estas son parte de las cosas que la gente no calcula y como no la calcularon, ¿qué pasó? Comenzaron a edificar una torre y se quedaron a la mitad, y esto da tristeza en realidad.
Estaba en mi país (El Salvador) hace unos meses atrás y me hablaron de una persona que tocaba la guitarra en la iglesia. Hermanos tocaba la guitarra, muy bonito cantaba este hombre, en aquel entonces. Me lo encuentro, mientras yo comía con algunos hermanos, ¿y qué pasó, cómo estás? Él me dijo que ya no se congrega. “Pero que fue lo que pasó”, pregunté yo. Me dijo: –No sé. “¿Pero qué pasó, y Dios, y tu mujer?” ¡No divorciamos hace tantos años! Hermano, es mucha la tristeza, imaginen que sea su hijo o su hija. ¿Cómo es posible? ¿Cómo es posible que personas que sirvieron, ya no se congreguen?
- Dios es soberano: Este es uno de los costos más difíciles que hay. En la vida cristiana pasan cosas que a usted no le va a gustar y que no las va a entender, y ese precio hay mucha gente que no lo entiende. Se apartan del evangelio porque se murió su mamá, porque se murió su hijo, porque se murió su hija, porque mi hermano tiene cáncer, porque tal cosa, porque esto, porque lo otro.
Hermano, el hecho que usted sea cristiano evangélico no quiere decir que el día que se presenta en la corte el juez le va a decir: “Bienvenido a Canadá”. ¡Cosas pasan! Yo tengo personas en la ciudad de México que todavía me escriben, personas que pasaron por esta iglesia, que recibieron a Cristo, se bautizaron y no se congregan. Me dicen: “No me congrego pastor desde que Dios nos echó de Canadá”. ¡Imagínese usted! “Yo le digo a Dios que yo voy a volver a sus caminos si él deja que yo regrese allá.” ¿No me diga, pues? En la vida cristiana pasan cosas que no te van a gustar hermano, ¿qué es lo que tienes que hacer? Aceptarlas y seguir caminando.
Su matrimonio no funcionó como usted quería que funcionara, ¿y qué va a hacer? ¿Ponerse a llorar en la cama el resto de sus días? Pues da gracias a Dios que apareció esa prueba y siga adelante. Habrán muchas cosas que no entedemos.
En estos últimos 20 y pico de años, pastores y amigos, han querido filosofar la razón por la que mi esposa tiene 20 años en una silla de ruedas, ¿y yo qué sé? Los doctores dicen que es una en un millón, dicen que esa enfermedad es muy rara, que no nos pueden decir qué es lo que va a pasa. El día que fuimos al médico, dijeron que podía durar cinco años, como que puede durar toda la vida. Es que es una en un millón, no sabemos. ¿Entonces tenemos que ponernos a llorar, y dejar de seguir adelante? No se puede. Entonces entienda que Dios es soberano, en la vida cristiana pasan cosas que no nos gustan, que no entendemos y lo que hay que hacer es levantarse y seguir caminando.
Hay personas que no calcularon nunca que Dios exige relación por encima de religión. Si las personas que se han apartado de Dios y del evangelio, hubiesen tenido comunión con Dios, con el Padre, con el Dios de la Gloria; no se hubiesen apartado del Señor. Pero ellos tenían religión, la biblia la dejaban en el baúl del carro solo la usaban el día que venían al culto, el domingo una horita nada más y se acabó. Durante el resto de la semana no hay relación con el Señor, no hay un tiempo de comunión mañana, tarde y noche, durante el día todas las veces que desee. Hermano yo hablo con Dios, todo el día, hasta para encontrar parqueo. Es que nadie ha dicho que usted tiene que buscar un tiempo y es ese tiempo nada más. Todo el día hable con Dios, que le de sabiduría. Si va a hacer una visita pídale al Señor que le ayude, que lo bendiga en todo aspecto, en toda situación. Padre perdóname por esta imprudencia, Señor que feo esto que dije, Señor ayúdame con “tal” cosa. Esa es una relación constante y Dios demanda relación por encima de cualquier religión.
- Sacrificio: Lucas 9:23 (RV-60) Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame.
Esto es de lo más complicado que hay, porque la verdad es que la mayoría de los que estamos acá, o tal vez la mitad, quizá un poquito menos de la mitad se van a quedar en casa en esta tarde. Nada malo con eso. Pero ¿sabe por qué? Porque usted prefiere descansar que regresar a la iglesia, usted prefiere Netflix. Entonces, ¿qué pasa? Que en su mentalidad usted con venir al mediodía ya cumplió, ¿no es cierto? Ya con eso nos lavamos pues, ya tenemos derecho a faltar en la noche y el miércoles; porque ya estuvimos el domingo. Eso es religión, hombre, eso no es una relación. Eso quiere decir que usted todavía no le ha encontrado el gusto al evangelio, no ha encontrado el sabor de sentirse bien en la casa de Dios, de gozar. De estar aquí no por la fuerza, no porque lo obligan.
Una de las cosas que a mí me encantaría de tener dinero, ¿sabe que sería? No recibir un salario. ¿Usted cree que yo dejaría de venir? No hermano, vendría con el mayor de los gustos, con el anhelo con el que lo hago. ¡Con lo que me gusta estar en la casa de Dios!
Así es la vida cristiana, exige sacrificio.
- Obediencia: ¡Ay Dios mío! Aquellos que somos padres, ¿cómo nos sentimos cuando nuestros hijos no nos hacen caso? Algunos de ellos son medios tontitos, porque les decimos te vas a quemar, hijo te vas a quemar, y al ratito viene llorando: ya ves por bruto, te lo dije. Algunos crecen y así se quedan.
¿Cuántos hijos nuestros se quedaron en la casa este día? “Hijo vamos a la iglesia.” –Algún día te caigo por ahí. Imagine, como si tuviéramos que rogarles para venir a adorar al Rey del universo, al Rey de Reyes y Señor de Señores.
¿Cuántas veces dejamos de venir a la casa del Señor por ver un partido? Esto habla de sacrificio, habla de obediencia. Si Dios dice: “Hay que hacerlo.” Hermano hay que hacerlo, no se dice nada más.
- Perseverancia: Este es el costo, el precio que mucha gente no calculó. Esto yo lo puedo hablar con amplitud. Desde 1979 que conocí a Jesucristo, por la Gracia de Dios hermano, yo nunca me he apartado el evangelio; yo jamás me he quedado en la casa porque tenga algo que hacer. Nunca me he quedado en la casa porque mis hijos estaban “mocositos”, así los traíamos.
A mí me fascinó el viernes pasado andaban los niñitos, los hijos de ustedes, dando vueltas para un lado, corriendo por otro, agarraron una bicicleta que estaba para la venta y se subieron a ella; a mí me encanta eso, me fascinan. Mis hijos así crecieron en esta iglesia, haciendo relajo, corriendo para todos lados. Pero crecieron en la casa de Dios, sus hijos y los míos, ahora ya tienen hijos ellos también; Dios mío, imagínate, hoy algunos ya son abuelos.
Imagínate me encanta eso, ¡qué bonita, la perseverancia! Que pasen los años, que pasen las generaciones y poder decir como muchos de acá dicen: “Pastor yo conocí a Cristo hace 30 años, nunca me he apartado, nunca me he quedado en la casa, nunca me he ido a comprar”
Acaso Dios no es su prioridad? Deje de vivir un evangelio a su manera. Calcule el costo del discipulado, sino dice la palabra: No puede ser mi discípulo. Esa es palabra de Dios, no palabra del pastor, no palabra de su abuelo. Es palabra de Dios la que tiene enfrente, es el Señor que le está hablando. Si cumpliéramos eso el mundo sería diferente si viviéramos de esta manera. Otras personas se sentirían diferentes si el evangelio fuera de esta manera. Nuestras vidas serían diferentes si viviéramos de esta manera.
Inclinen su rostro hermano, oremos al Señor.
Padre esta palabra nos habla en este día que ser tus discípulos tiene un costo elevado, y eso es lo que tu palabra nos dice al corazón en este día. A entender que el Señor Jesucristo pagó un precio en la cruz del calvario, para que nosotros podamos hacer nuestro el camino hacia la bendición. Señor cuando nos sometemos a esta palabra descubrimos que lo que encontramos es un panal de miel. Todo lo que muchas personas consideran que esto cuesta mucho dejarlo, nos venimos a dar cuenta que lo que encontramos es bendición. Encontramos paz, encontramos gozo, encontramos tranquilidad, bendición a nuestro alrededor. Oramos por esa multitud de personas, que de una u otra forma Señor se han apartado de tus caminos, que en este día no están siguiendo tus pasos, que ahora mismo viven como si nunca te hubieran conocido. Señor ten misericordia y guárdanos a nosotros también, guárdanos Padre. De tal manera que podamos permanecer firmes y fieles, hasta el día que tú nos llames a tu presencia. Señor te ruego por aquellas personas que han de escuchar este mensaje en otras partes del mundo. También que pueda ser de bendición y que pueda hacerlos reflexionar de la necesidad de buscar tu rostro de buscar tu presencia, Señor.
Mientras todos oramos, si usted nunca antes ha recibido a Cristo en el corazón, déjeme decirle que Dios le ama. Dios tiene un plan para su vida. Dios quiere salvarle, quiere perdonarle y si usted nunca ha recibido a Jesús hoy puede hacerlo. Si hay alguien con nosotros en esta hora que dice: “Pastor yo necesito a Dios en mi vida. Yo quiero comenzar una vida nueva tomado de la mano con mi Señor, una vida de fe, una vida de comunión con Dios”. Si hay alguien que quiere recibir a Cristo en el corazón, ahí donde está, yo le hago la invitación para que se ponga de pie o levante su mano. Si usted quiere recibir a Cristo, si quiere entregarle su vida al Señor; hay alguien que se va a acercar a usted para hacer esta oración con ustedes e invitarle a tener una relación personal con Cristo Jesús. Usted que nos mira por internet, también usted puede hacer lo mismo a través de una oración de fe, dígale al Señor: “Señor en este día te pido perdón por mis pecados. Reconozco lo que hiciste en la cruz. Te recibo como mi Señor, mi Salvador y me arrepiento de todas mis faltas.” Si usted hizo esta oración yo quiero animarle a crecer en el conocimiento de Dios y su bendita palabra.
Padre querido gracias por tu palabra, despídenos con tu paz, con tu bendición en el nombre de Jesús, amén y amén.
Amado mío, que la paz de Cristo les acompañe, ¡Bendiciones!