La bondad de Dios
Noviembre 05, 2023 – 1:30PM | Dr. Toby Jr.
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TRANSCRIPCIÓN
¿Es usted una persona cordial? No olvide que todo lo que el hombre siembra, eso también cosecha. Mi papá lo decía así, es un simple consejo, si yo no tengo nada bueno que decir de alguien mejor no digo nada; aunque sepa que esa persona es mala. Todo lo oculto sale a luz. Es muy diferente cuando una persona le pide un consejo a usted, si le preguntan por esa persona (que ya usted sabe que es mala persona) dígale la verdad, porque si no, hará tropezar a su hermano (a quien le está preguntando).
La bondad también es cordialidad, dulzura. ¡Qué amabilidad la los hermanos! Como se saludan, como te dan la mano y se acercan a uno con tanta dulzura.
La bondad es generosidad. Debajo del hotel donde estoy hospedado, hay un lugar al que he ido y me han atendido tres personas diferentes, una de ellas hindú, pasamos trabajo para comunicarnos, pero muy cordial. Al día siguiente cuando llegué había otra señora que para nada era generosa, si por poco me da media servilleta nada más.
Cuando hablo de persona generosa, no estoy hablando de dinero hermano, hablo de su actitud en la vida, que le va a permitir su lugar a otro; personas que muestren una evidencia externa de un cambio interno que le produjo Dios, en su corazón, a través de Cristo. Si estas cosas me faltan, probablemente yo no he nacido de nuevo.
Marcos 10:18 (RV-60): Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios. En esta porción un joven adinerado estaba diciendo: “he cumplido con todo”. Sí, pero en otras palabras Dios le dice: “no lo has hecho de corazón”. Sí, tú has regalado tus bienes, tú has mantenido fulano, has sembrado plata, pero no lo has hecho de corazón; lo has hecho solo por religión. Pero la pregunta es: ¿te nace la benevolencia? ¿Te nace la amabilidad? ¿Te nace ayudar a otros? ¿Te nace la dulzura? ¿Te nace la generosidad? ¿Te nace la sensibilidad?
¿Eres sensible? Hay gente que le gusta poner el dedo en la llaga, hay temas que no podemos tocar, deje las cosas como están. Sabe que usted tiene problemas con sus hijos, sabe que los hijos suyos son los más problemáticos se toda la colonia y qué va a hacer, ¿son sus hijos para la gloria de Dios?
La Biblia dice en 2Corinitios 5:8: Pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes en el Señor. ¿Habla la Biblia de algún túnel? ¿Habla la Biblia de alguna luz? ¿Habla la Biblia que alguien murió y regresó para contar como es el cielo? Para mí, todo eso es pura fantasía, la Biblia dice que nadie a cruzado de un lugar a otro, así de claro. Cuando alguien muere yo le digo al familiar: “siento mucho de su familiar, celebremos su vida”. Cuando dije eso hubo una señora que casi me corta la cabeza, me dijo: ¿cómo voy a celebrar si se acaba de morir mi mamá? Hermana, le dije, si su mamá es la que está celebrando ahorita. Celebrar la vida es hacer las cosas que esa persona que murió, siempre quiso que hiciéramos.
Cuando mis hermanos me dicen: Yo amo a mi papá. Siempre les digo: No sean emocionales y vayan a graduarse a la universidad, eso quiso él para todos nosotros. A ustedes les pagó hasta sus carreras y no todos las terminaron; pero así se muestra el amor, lo dice la Biblia. En la Biblia, mi papá del cielo, dice: Juan 14:15 (RV-60) Si me amáis, guardad mis mandamientos. ¡Señor cómo te amo! No, usted anda emocional porque amar a Dios es pagar los impuestos. Amar a Dios es hacer notar que amas a Dios, es no denigrar al prójimo. Amar a Dios es ser sensible. Amar a Dios es ser dulce, amar a Dios es ser bondadoso. La Biblia dice: Juan 15:13 RV-60: Nadie tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos. ¿Quién lo ha hecho sino Cristo? ¡Amén! Por la bondad de Dios no hemos sido consumidos.
Porque Dios es benevolente, porque es amable, porque es cariñoso, porque es cordial, porque es dulce, porque es generoso, porque es sensible. Esto suena un poco raro: porque Dios es Dios, pero Él respeta tus decisiones. Por eso nos dio libre albedrío, Él respeta tus decisiones; no las respalda, pero las respeta. Él no te obliga a nada. Lo lindo del evangelio es que el evangelio genera en la gente convicción. Eso lo puede ver usted cuando la iglesia está llena. Dice su palabra: Romanos 5:8 (RV-60): Más Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Marcos 10:18 (RV-60): Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios.
Quiero hablarles ahora de los niveles de bondad de Dios.
La bondad de Dios es rica en amor. ¿Alguien se ha enamorado aquí alguna vez? La bondad de Dios está llena de amor.
Miren hermanos, he cometido grandes errores con mis hijos, grandes errores. El error más grande fue dejar el amor y solo tomar la disciplina, cuando la Biblia dice (Hebreos 12:6) que: El Señor al que ama, disciplina. Son dos cosas completamente diferentes, dice la palabra: corrige al muchacho mientras hay esperanza, pero no se apresure tu alma a destruirlo. Este es el estándar bíblico, esto siempre fue así, me di cuenta muy tarde y casi que los pierdo, porque no hemos ganado la batalla todavía; pero ahí estamos orando por ellos. ¿Por qué? Porque lo dice su palabra.
Salmos 145:8 (RV-60): 8Clemente y misericordioso es Jehová, Lento para para la ira, y grande en misericordia. 9Bueno es Jehová para con todos, Y sus misericordias sobre todas sus obras. Eso significa que tiene ira, pero no la manifiesta; lo piensa, pero no lo hace. Él está listo, y refrena su ira; ¿y por qué lo hará? Porque Él es bondadoso y su bondad es infinita y está llena de amor.
Hermano, si hoy estamos parados aquí es por esa bondad. ¿No sé cómo decirlo? Yo no entiendo cómo Dios ha sido tan tolerante conmigo, ¡no sé! Es por su bondad. La bondad es un atributo comunicable de Dios, que lo ha llenado a Él de benevolencia, de amabilidad, de cordialidad, de generosidad, de sensibilidad.
La bondad de Dios es suave. Cuando una persona está enamorada es suave, amable; pero cuando se acaba el amor se vuelven indiferentes; Dios no es así, la bondad de Dios es rica.
Salmos 145:8 (RV-60): 8Clemente y misericordioso es Jehová, Lento para para la ira, y grande en misericordia. 9Bueno es Jehová para con todos, Y sus misericordias sobre todas sus obras.
¿Yo no sé qué le he hecho al Señor? Le voy a dar un consejo: a mí la vida me ha apretado como tubo de pasta dental. A mí han llegado momentos, en la vida, que yo no sé ni para dónde voltearme (demandas, escándalos, rumores, traiciones, críticas, abandono), lo que le pueda contar en los últimos 6 meses. Yo le pregunto al Señor: ¿Y qué pasa? ¿Por qué a mí Señor, si nosotros estamos trabajando? Todo lo que Dios quiere es que pongas tus ojos en Él. Mientras sigas confiando en las personas que te rodeen, mientras sigas confiando en tus herramientas, mientras sigas confiando en tus talentos, la vida no te va a dejar de dar lecciones. Porque dice la palabra del Señor que: Dios no comparte su gloria con nadie; pero esa bondad de Dios es rica en amor y tiene detalles.
Muchas personas creen que Dios le ama por las cosas que les da. Dios te amó porque dio a su Hijo Jesucristo, eso dice la palabra, no porque te dio cosas. Entonces cuando las cosas faltan, tú dices: quizá Dios ya no me ama. No, te está diciendo que pongas tu mirada en Él, porque su bondad es infinita, su bondad está llena de amor,
Su bondad está llena de disciplina. A mí me enseñaron que la disciplina en exceso nunca es mala. La bondad de Dios se traduce en: benevolencia, amabilidad, cordialidad, dulzura, generosidad, sensibilidad, suavidad, ternura, disciplina, los hábitos te van a llevar más lejos que las emociones. Hebreos 12:6 (RV-60): El Señor al que ama, disciplina. La disciplina te va a llevar mucho más lejos que las emociones. Cuando el Señor nos disciplina, es para enseñarnos sus disciplinas espirituales, ¿cuáles son esas, pastor? La oración, la lectura bíblica, la asistencia a los cultos, la mayordomía, el servicio, esa es la bondad de Dios. Todo lo que he mencionado Dios lo hace con dulzura, con amabilidad.
Hebreos 12:5-6 (RV-60): 5Y habéis ya olvidado la exhortación que como hijos os dirige diciendo hijo mío no menosprecies la disciplina del Señor ni desmayes cuando eres reprendido por él. 6Porque el Señor al que ama disciplina, y azota a todo aquel que recibe por hijo. Esa es la bondad de Dios. Cuando a usted no le interesa, usted no corrige.
La bondad de Dios incluye sus bendiciones.
Dios es bondadoso, Amén.
Todo lo que tenemos es una esperanza, una petición; pero Dios en su inmensa e infinita bondad, Él nos bendice.
Santiago 1:17 (RV-60): Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.
Cuidado cuando usted dice: mi casa, mi carro, mi empresa, mi ministerio, mi iglesia; no amigo, no es así. Nada de lo que has dicho es así. Todo se lo debemos a Dios. Esa es la bendición que Dios nos da. Un año más de vida, un contrato más de trabajo, una factura más por cobrar, un proyecto más de vida, porque la bondad de Dios incluye su amor, su disciplina y también nos bendice.
La bondad de Dios nos perdona, Dios no trae tus errores al frente. 2Corintios 5:17 (RV-60): De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. La bondad de Dios es maravillosa, es la que nos va a dar un año más de vida, y lo voy a decir en fe: la bondad de Dios es la que nos va a permitir estrenar ese templo en algún momento de nuestra historia.
La bondad de Dios nos enseña su ley.
La ley de Dios es el mapa de la vida (la Biblia). Lo voy a probar.
Jesús dijo: Juan 14:6 (RV-60): Yo soy el camino, la verdad y la vida, y nadie viene al Padre si no es por mí.
Les decía la noche del viernes que mis hermanas mayores fueron muy bendecidas por mi papá, muy bendecidas. Cuando una de ellas quiso estudiar ingeniería en sistemas (en aquel entonces), pues se fue a estudiar, la otra se graduó de otra cosa que él le pagó. Conmigo fue todo lo contrario, yo me quejaba mucho porque a mí no me daba las cosas que le daba a mis hermanas. Pero nunca entendí que lo que sí me dio fue el mentoreo uno a uno. Me enseñó los caminos de Dios. Y si nos dejó o no nos dejó casa, si nos dejó o no nos dejó herencia, si nos dejó o no nos dejó plata (dinero), nos ha dejado el mejor tesoro de todos: a Cristo en el corazón. La bondad de Dios hizo eso. El hombre lejos de Dios no tenía esperanza.
La bondad de Dios no solamente está llena de amor, de disciplina, de bendición, de perdón, de su ley; el que abraza la ley de Dios es sabio.
La bondad de Dios es la que nos alimenta. El día que su pueblo tuvo hambre, hizo llover pan del cielo. El día que su pueblo tuvo sed, sacó agua de una piedra. No se afane, la bondad de Dios nos alimenta.
Nehemías 9:20 (RV-60) Y enviaste tu buen Espíritu para enseñarles, y no retiraste tu maná de su boca, y agua les diste para su sed. La bondad de Dios nos alimenta.
La bondad de Dios en el momento de la prueba nos llevará a tierra firme.
La bondad de Dios aún en tus tribulaciones, te va a llevar a tierra segura. ¿Por qué pastor? ¿Porque eres bueno? No, porque para siempre su misericordia. Amén.
Cierre sus ojos y vamos a orar:
Padre gracias por esta mañana. Gracias porque hemos entendido qué es bondad, y hemos aprendido que bondad es mansedumbre, tolerancia, ternura, suavidad, sensibilidad, generosidad, dulzura, cordialidad, amabilidad, benevolencia, y todos esos atributos comunicables, los tienes tú. Padre, el día de hoy no queremos rechazar esa bondad tuya que ha sido mostrada a través de nuestro Señor Jesucristo. Tu palabra dice Señor, en el Salmos 145:9 Bueno es Jehová para con todos y su misericordia sobre todas sus obras.
Padre quiero orar el día de hoy, por aquellos que no conocen tu bondad, que es Cristo, el mejor regalo que pudiste darnos Señor. Quiero orar por aquellos que, conociendo tu bondad, tu palabra, aun así, no la obedecen. Señor quiero orar por aquellos que aún, teniendo en su corazón a tu Espíritu Santo, no le toman en cuenta para sus decisiones. Mi amigo, si usted está acá sin Cristo, si nunca le ha invitado a ser Señor y Salvador de su vida, ahí donde está ¿por qué no oramos juntos? Dile al Señor: Señor Jesús, yo te recibo hoy como mi único y suficiente salvador personal. Yo creo que eres Dios, que moriste en la cruz por mis pecados y resucitaste al tercer día. Me arrepiento Señor, soy pecador, perdóname. Salva mi alma hoy, para cuando yo muera poder estar en tu presencia por siempre. En Cristo Jesús, en esta hora te declaro mi Señor y mi Salvador. Y la iglesia con gozo dice un fuerte: Amén.
Iglesia, le hago una pregunta a usted: ¿Conoce usted la bondad de Dios? Porque si usted conoce la bondad de Dios, que es Cristo, lo único que va a hacer es reflejar en otros lo que Cristo ha hecho en usted. Eso significa que, a partir del día de hoy, vamos a ser amables, cordiales, dulces, generosos, sensibles, suaves, tiernos, tolerante y mansos. Termino diciendo el que tiene oídos para oír que oiga. El Señor le bendiga.
Padre gracias por el mensaje de esta hora Señor. Gracias por lo que nos regalaste a través de nuestro pastor Toby Junior. Señor gracias por recordarnos que debemos de seguir siempre adelante. Gracias Señor por esa bondad tan infinita para tu iglesia para tus hijos. Padre te pedimos que nos lleves con bien. Gracias por todo Padre, en el nombre poderoso de Jesús: amén y amén.
¡Bendiciones iglesia!
La bondad de Dios
Noviembre 05, 2023 – 1:30PM | Dr. Toby Jr.
Etiquetas: Dr. Toby Jr., noviembre 2023, transcripcion
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TRANSCRIPCIÓN
¿Es usted una persona cordial? No olvide que todo lo que el hombre siembra, eso también cosecha. Mi papá lo decía así, es un simple consejo, si yo no tengo nada bueno que decir de alguien mejor no digo nada; aunque sepa que esa persona es mala. Todo lo oculto sale a luz. Es muy diferente cuando una persona le pide un consejo a usted, si le preguntan por esa persona (que ya usted sabe que es mala persona) dígale la verdad, porque si no, hará tropezar a su hermano (a quien le está preguntando).
La bondad también es cordialidad, dulzura. ¡Qué amabilidad la los hermanos! Como se saludan, como te dan la mano y se acercan a uno con tanta dulzura.
La bondad es generosidad. Debajo del hotel donde estoy hospedado, hay un lugar al que he ido y me han atendido tres personas diferentes, una de ellas hindú, pasamos trabajo para comunicarnos, pero muy cordial. Al día siguiente cuando llegué había otra señora que para nada era generosa, si por poco me da media servilleta nada más.
Cuando hablo de persona generosa, no estoy hablando de dinero hermano, hablo de su actitud en la vida, que le va a permitir su lugar a otro; personas que muestren una evidencia externa de un cambio interno que le produjo Dios, en su corazón, a través de Cristo. Si estas cosas me faltan, probablemente yo no he nacido de nuevo.
Marcos 10:18 (RV-60): Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios. En esta porción un joven adinerado estaba diciendo: “he cumplido con todo”. Sí, pero en otras palabras Dios le dice: “no lo has hecho de corazón”. Sí, tú has regalado tus bienes, tú has mantenido fulano, has sembrado plata, pero no lo has hecho de corazón; lo has hecho solo por religión. Pero la pregunta es: ¿te nace la benevolencia? ¿Te nace la amabilidad? ¿Te nace ayudar a otros? ¿Te nace la dulzura? ¿Te nace la generosidad? ¿Te nace la sensibilidad?
¿Eres sensible? Hay gente que le gusta poner el dedo en la llaga, hay temas que no podemos tocar, deje las cosas como están. Sabe que usted tiene problemas con sus hijos, sabe que los hijos suyos son los más problemáticos se toda la colonia y qué va a hacer, ¿son sus hijos para la gloria de Dios?
La Biblia dice en 2Corinitios 5:8: Pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes en el Señor. ¿Habla la Biblia de algún túnel? ¿Habla la Biblia de alguna luz? ¿Habla la Biblia que alguien murió y regresó para contar como es el cielo? Para mí, todo eso es pura fantasía, la Biblia dice que nadie a cruzado de un lugar a otro, así de claro. Cuando alguien muere yo le digo al familiar: “siento mucho de su familiar, celebremos su vida”. Cuando dije eso hubo una señora que casi me corta la cabeza, me dijo: ¿cómo voy a celebrar si se acaba de morir mi mamá? Hermana, le dije, si su mamá es la que está celebrando ahorita. Celebrar la vida es hacer las cosas que esa persona que murió, siempre quiso que hiciéramos.
Cuando mis hermanos me dicen: Yo amo a mi papá. Siempre les digo: No sean emocionales y vayan a graduarse a la universidad, eso quiso él para todos nosotros. A ustedes les pagó hasta sus carreras y no todos las terminaron; pero así se muestra el amor, lo dice la Biblia. En la Biblia, mi papá del cielo, dice: Juan 14:15 (RV-60) Si me amáis, guardad mis mandamientos. ¡Señor cómo te amo! No, usted anda emocional porque amar a Dios es pagar los impuestos. Amar a Dios es hacer notar que amas a Dios, es no denigrar al prójimo. Amar a Dios es ser sensible. Amar a Dios es ser dulce, amar a Dios es ser bondadoso. La Biblia dice: Juan 15:13 RV-60: Nadie tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos. ¿Quién lo ha hecho sino Cristo? ¡Amén! Por la bondad de Dios no hemos sido consumidos.
Porque Dios es benevolente, porque es amable, porque es cariñoso, porque es cordial, porque es dulce, porque es generoso, porque es sensible. Esto suena un poco raro: porque Dios es Dios, pero Él respeta tus decisiones. Por eso nos dio libre albedrío, Él respeta tus decisiones; no las respalda, pero las respeta. Él no te obliga a nada. Lo lindo del evangelio es que el evangelio genera en la gente convicción. Eso lo puede ver usted cuando la iglesia está llena. Dice su palabra: Romanos 5:8 (RV-60): Más Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Marcos 10:18 (RV-60): Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios.
Quiero hablarles ahora de los niveles de bondad de Dios.
La bondad de Dios es rica en amor. ¿Alguien se ha enamorado aquí alguna vez? La bondad de Dios está llena de amor.
Miren hermanos, he cometido grandes errores con mis hijos, grandes errores. El error más grande fue dejar el amor y solo tomar la disciplina, cuando la Biblia dice (Hebreos 12:6) que: El Señor al que ama, disciplina. Son dos cosas completamente diferentes, dice la palabra: corrige al muchacho mientras hay esperanza, pero no se apresure tu alma a destruirlo. Este es el estándar bíblico, esto siempre fue así, me di cuenta muy tarde y casi que los pierdo, porque no hemos ganado la batalla todavía; pero ahí estamos orando por ellos. ¿Por qué? Porque lo dice su palabra.
Salmos 145:8 (RV-60): 8Clemente y misericordioso es Jehová, Lento para para la ira, y grande en misericordia. 9Bueno es Jehová para con todos, Y sus misericordias sobre todas sus obras. Eso significa que tiene ira, pero no la manifiesta; lo piensa, pero no lo hace. Él está listo, y refrena su ira; ¿y por qué lo hará? Porque Él es bondadoso y su bondad es infinita y está llena de amor.
Hermano, si hoy estamos parados aquí es por esa bondad. ¿No sé cómo decirlo? Yo no entiendo cómo Dios ha sido tan tolerante conmigo, ¡no sé! Es por su bondad. La bondad es un atributo comunicable de Dios, que lo ha llenado a Él de benevolencia, de amabilidad, de cordialidad, de generosidad, de sensibilidad.
La bondad de Dios es suave. Cuando una persona está enamorada es suave, amable; pero cuando se acaba el amor se vuelven indiferentes; Dios no es así, la bondad de Dios es rica.
Salmos 145:8 (RV-60): 8Clemente y misericordioso es Jehová, Lento para para la ira, y grande en misericordia. 9Bueno es Jehová para con todos, Y sus misericordias sobre todas sus obras.
¿Yo no sé qué le he hecho al Señor? Le voy a dar un consejo: a mí la vida me ha apretado como tubo de pasta dental. A mí han llegado momentos, en la vida, que yo no sé ni para dónde voltearme (demandas, escándalos, rumores, traiciones, críticas, abandono), lo que le pueda contar en los últimos 6 meses. Yo le pregunto al Señor: ¿Y qué pasa? ¿Por qué a mí Señor, si nosotros estamos trabajando? Todo lo que Dios quiere es que pongas tus ojos en Él. Mientras sigas confiando en las personas que te rodeen, mientras sigas confiando en tus herramientas, mientras sigas confiando en tus talentos, la vida no te va a dejar de dar lecciones. Porque dice la palabra del Señor que: Dios no comparte su gloria con nadie; pero esa bondad de Dios es rica en amor y tiene detalles.
Muchas personas creen que Dios le ama por las cosas que les da. Dios te amó porque dio a su Hijo Jesucristo, eso dice la palabra, no porque te dio cosas. Entonces cuando las cosas faltan, tú dices: quizá Dios ya no me ama. No, te está diciendo que pongas tu mirada en Él, porque su bondad es infinita, su bondad está llena de amor,
Su bondad está llena de disciplina. A mí me enseñaron que la disciplina en exceso nunca es mala. La bondad de Dios se traduce en: benevolencia, amabilidad, cordialidad, dulzura, generosidad, sensibilidad, suavidad, ternura, disciplina, los hábitos te van a llevar más lejos que las emociones. Hebreos 12:6 (RV-60): El Señor al que ama, disciplina. La disciplina te va a llevar mucho más lejos que las emociones. Cuando el Señor nos disciplina, es para enseñarnos sus disciplinas espirituales, ¿cuáles son esas, pastor? La oración, la lectura bíblica, la asistencia a los cultos, la mayordomía, el servicio, esa es la bondad de Dios. Todo lo que he mencionado Dios lo hace con dulzura, con amabilidad.
Hebreos 12:5-6 (RV-60): 5Y habéis ya olvidado la exhortación que como hijos os dirige diciendo hijo mío no menosprecies la disciplina del Señor ni desmayes cuando eres reprendido por él. 6Porque el Señor al que ama disciplina, y azota a todo aquel que recibe por hijo. Esa es la bondad de Dios. Cuando a usted no le interesa, usted no corrige.
La bondad de Dios incluye sus bendiciones.
Dios es bondadoso, Amén.
Todo lo que tenemos es una esperanza, una petición; pero Dios en su inmensa e infinita bondad, Él nos bendice.
Santiago 1:17 (RV-60): Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.
Cuidado cuando usted dice: mi casa, mi carro, mi empresa, mi ministerio, mi iglesia; no amigo, no es así. Nada de lo que has dicho es así. Todo se lo debemos a Dios. Esa es la bendición que Dios nos da. Un año más de vida, un contrato más de trabajo, una factura más por cobrar, un proyecto más de vida, porque la bondad de Dios incluye su amor, su disciplina y también nos bendice.
La bondad de Dios nos perdona, Dios no trae tus errores al frente. 2Corintios 5:17 (RV-60): De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. La bondad de Dios es maravillosa, es la que nos va a dar un año más de vida, y lo voy a decir en fe: la bondad de Dios es la que nos va a permitir estrenar ese templo en algún momento de nuestra historia.
La bondad de Dios nos enseña su ley.
La ley de Dios es el mapa de la vida (la Biblia). Lo voy a probar.
Jesús dijo: Juan 14:6 (RV-60): Yo soy el camino, la verdad y la vida, y nadie viene al Padre si no es por mí.
Les decía la noche del viernes que mis hermanas mayores fueron muy bendecidas por mi papá, muy bendecidas. Cuando una de ellas quiso estudiar ingeniería en sistemas (en aquel entonces), pues se fue a estudiar, la otra se graduó de otra cosa que él le pagó. Conmigo fue todo lo contrario, yo me quejaba mucho porque a mí no me daba las cosas que le daba a mis hermanas. Pero nunca entendí que lo que sí me dio fue el mentoreo uno a uno. Me enseñó los caminos de Dios. Y si nos dejó o no nos dejó casa, si nos dejó o no nos dejó herencia, si nos dejó o no nos dejó plata (dinero), nos ha dejado el mejor tesoro de todos: a Cristo en el corazón. La bondad de Dios hizo eso. El hombre lejos de Dios no tenía esperanza.
La bondad de Dios no solamente está llena de amor, de disciplina, de bendición, de perdón, de su ley; el que abraza la ley de Dios es sabio.
La bondad de Dios es la que nos alimenta. El día que su pueblo tuvo hambre, hizo llover pan del cielo. El día que su pueblo tuvo sed, sacó agua de una piedra. No se afane, la bondad de Dios nos alimenta.
Nehemías 9:20 (RV-60) Y enviaste tu buen Espíritu para enseñarles, y no retiraste tu maná de su boca, y agua les diste para su sed. La bondad de Dios nos alimenta.
La bondad de Dios en el momento de la prueba nos llevará a tierra firme.
La bondad de Dios aún en tus tribulaciones, te va a llevar a tierra segura. ¿Por qué pastor? ¿Porque eres bueno? No, porque para siempre su misericordia. Amén.
Cierre sus ojos y vamos a orar:
Padre gracias por esta mañana. Gracias porque hemos entendido qué es bondad, y hemos aprendido que bondad es mansedumbre, tolerancia, ternura, suavidad, sensibilidad, generosidad, dulzura, cordialidad, amabilidad, benevolencia, y todos esos atributos comunicables, los tienes tú. Padre, el día de hoy no queremos rechazar esa bondad tuya que ha sido mostrada a través de nuestro Señor Jesucristo. Tu palabra dice Señor, en el Salmos 145:9 Bueno es Jehová para con todos y su misericordia sobre todas sus obras.
Padre quiero orar el día de hoy, por aquellos que no conocen tu bondad, que es Cristo, el mejor regalo que pudiste darnos Señor. Quiero orar por aquellos que, conociendo tu bondad, tu palabra, aun así, no la obedecen. Señor quiero orar por aquellos que aún, teniendo en su corazón a tu Espíritu Santo, no le toman en cuenta para sus decisiones. Mi amigo, si usted está acá sin Cristo, si nunca le ha invitado a ser Señor y Salvador de su vida, ahí donde está ¿por qué no oramos juntos? Dile al Señor: Señor Jesús, yo te recibo hoy como mi único y suficiente salvador personal. Yo creo que eres Dios, que moriste en la cruz por mis pecados y resucitaste al tercer día. Me arrepiento Señor, soy pecador, perdóname. Salva mi alma hoy, para cuando yo muera poder estar en tu presencia por siempre. En Cristo Jesús, en esta hora te declaro mi Señor y mi Salvador. Y la iglesia con gozo dice un fuerte: Amén.
Iglesia, le hago una pregunta a usted: ¿Conoce usted la bondad de Dios? Porque si usted conoce la bondad de Dios, que es Cristo, lo único que va a hacer es reflejar en otros lo que Cristo ha hecho en usted. Eso significa que, a partir del día de hoy, vamos a ser amables, cordiales, dulces, generosos, sensibles, suaves, tiernos, tolerante y mansos. Termino diciendo el que tiene oídos para oír que oiga. El Señor le bendiga.
Padre gracias por el mensaje de esta hora Señor. Gracias por lo que nos regalaste a través de nuestro pastor Toby Junior. Señor gracias por recordarnos que debemos de seguir siempre adelante. Gracias Señor por esa bondad tan infinita para tu iglesia para tus hijos. Padre te pedimos que nos lleves con bien. Gracias por todo Padre, en el nombre poderoso de Jesús: amén y amén.
¡Bendiciones iglesia!